The Forest | TK

37

—Taehyung —escuchar su voz le provocó un escalofrío.

Por un breve momento Taehyung pensó en ignorar el llamado de su hermano porque todavía no sabía cómo enfrentarlo, pero no podía evitar preocuparse por él y el tono en su voz era extraño mientras golpeaba la puerta, terminó de anudar sus agujetas y se acercó a la entrada de la cabaña, aspiró profundamente antes de abrirla.

—Buenos días —dijo con una sonrisa amable aunque Jungwoo lo miraba de forma inquietante, se veía tenso.

—Taehyung, vine para disculparme contigo —ignoró el saludo de su hermano y tragó saliva al ver las cejas arqueadas de este por la sorpresa. No quería perder el tiempo en formalidades, por lo que lo interrumpió cuando quiso hablar de nuevo—. Déjame terminar, por favor... No debí desquitarme contigo por lo que me está ocurriendo porque no es tu responsabilidad que me enfrente a esta enfermedad, sé que si supieras cómo ayudarme, lo harías sin lugar a dudas. Perdón por no creerte.

Taehyung no pudo evitar el sentimiento de culpa que estrujó su corazón cuando Jungwoo sonrió un poco. La última vez que lo vio sonreír fue hace tantos años que sintió compasión por él, salió de la cabaña dispuesto a hablar, deseaba ayudarlo.

—Perdóname por no poder hacer nada por ti —dijo sin mirarlo a los ojos, con un nudo apretando su garganta porque le estaba mintiendo mientras su hermano se disculpaba por no creerle.

—No es tu culpa —repitió en un tono suave que hizo que Taehyung lo mirara apenado y confundido, era la primera vez que Jungwoo se comportaba de esa manera, pero lo interpretó como un reflejo de la vulnerabilidad del momento—. Aunque estuve pensando después de hablar contigo y me di cuenta que mi única esperanza es consultar a varios médicos hasta encontrar uno que pueda ayudarme, quizá en un lugar con servicios médicos más avanzados.

—El tío Jae puede apoyarte —sugirió en su afán por encontrar una solución—. Quizá si buscas ayuda en uno de los hospitales de renombre en alguna de las ciudades más grandes... Él viaja a esos lugares por trabajo, podrías acompañarlo y buscar apoyo.

—¿Crees que acceda? —dijo mientras miraba las llaves de la cabaña en las manos de Taehyung—. No he sido muy amable con él. Me parece que no me ve con la misma significancia que a ti.

—Eres parte de su familia —contestó con el ceño fruncido—. Por supuesto que también se preocupa por ti.

—Pero la diferencia es innegable, Taehyung. Incluso viniste hasta aquí para ayudarle, cuentas con su apoyo porque prácticamente has crecido a su lado y tienes un lugar en su empresa —sus ojos volvieron a encontrar los de su hermano, el cual no pasó por alto la forma nerviosa en que tragó saliva, los labios de Jungwoo se fruncieron antes de decir—. Taehyung, ¿hay alguna labor del tío Jae con la que pueda ayudarte? Quizá si también hago algo útil, él...

—No es necesario —negó suavemente con la cabeza, pero el semblante de Jungwoo se mantuvo intacto.

—Por favor, debe haber algo —avanzó un paso hacia adelante, impulsado por su desesperación—. Estoy decidido a corregir mis errores, ya he hecho mucho dolor a mi familia. Déjame hacer algo bueno por las únicas personas que se han preocupado de verdad por mí.

A pesar de que Taehyung no confiaba plenamente en su hermano, esperaba que disfrutara de buena salud y construyera una vida feliz. Quería apoyarlo sin poner en riesgo a Jungkook y su idea ofrecía la posibilidad de alcanzar ambas cosas, podría sanar su enfermedad y alejarlo del bosque, era ​​la opción más favorable.

—Estaba a punto de irme... Debo ir con Cho Seungsik, van a recogernos en su casa para supervisar uno de los sembrados que surten al tío Jae —una sensación de alivió relajó su cuerpo cuando Jugwoo volvió a sonreír—. ¿Te gustaría venir conmigo?