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Diez años después

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Diez años después.

La vida en Niravis siguió relativamente tranquila dentro de los estándares de un pueblo que poco a poco iba creciendo en los últimos diez años.

Todo esto gracias a la incorporación de los enanos como nuevos vecinos o familia en algunos casos.

Los primeros años fueron de poco contacto, solo fueron los Febris quienes mantenían algún tipo de relación con los nuevos llegados; aunque quienes más participaban eran Karlen y Krack.

Fue gracias a la constante insistencia por parte de ellos que poco a poco ambas razas empezaron a mezclarse. Aunque esto solo fue de manera laboral o por necesidad de recursos.

Necesitabas unas nuevas hachas para cortar leña. Busca a los enanos.

Necesitabas algunas verduras para el caldo; o algún tipo de remedio. Busca a los "jinetes de Avis".

"Jinetes de Avis", un nombre que usaron los enanos para referirse a sus vecinos. Pues necesitaban un nombre, no eran humanos, no eran Hobbit, y por suerte no eran elfos.

Pero tenían las bestias llamadas Avis. De ahí el poco original nombre.

Al principio dio un poco de controversia, pero lo dejaron a un lado debido a que ni ellos mismos tendrían un nombre para su especie.

Así que se puede decir que los años pasaron tranquilamente, o al menos para los jinetes.

Khalizy disfruto de eso. Tener una vida tranquila, que solo era interrumpida por alguna emergencia clínica que necesita su presencia de manera urgente.

La mayoría del tiempo se encontraba en la pequeña posada que utilizaba como consultorio. Estaba a unos kilómetros de su casa, por lo que tendría que tener una pequeña caminata por la mañana y él amanecer.

Excepto los sábados y domingos. Esos días se quedaba en su casa, pasando el tiempo con sus padres o salía a volar con Viricion.

Hoy era uno de esos días. Estaba terminando de lavar algunos platos del almuerzo, cuando su madre entró con una pequeña nota en sus manos.

Si ella estuviera prestando atención, vería como un cuervo pasaría volando por la ventana.

— Sé que es tu día libre amor —. Empezó su madre mientras caminaba hacia ella.

Khalizy cerró levemente los ojos, pues sabía que significaba esto.

— Pero te necesitan cerca de tu abuelo, una muchacha con una gripe que no sana —. Su madre siguió explicando mientras caminaba hacia ella.

La joven pelirroja se seco la manos. Sabía que si era cerca de la casa de su abuelo, era algún enano.

— Bien, tenemos algunos brebajes y hierbas aquí no? —. Ella preguntó mientras se sacaba el delantal y caminaba hasta un pequeño cuarto.

Mi Pelirroja -Thorin Oakenshield -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora