Anexo 5: Shock

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JAKE

8 horas desde la desaparición de Erica
[Se cuenta desde que Erica sale del piso]

—Jake, Jake… —alguien me estaba zarandeando—, ¡Jaaakee! 

Apenas oía nada, es como si solo escuchara el típico sonido que hace una televisión con interferencias. 

—¡No lo muevas tanto, James! Ya ves que está en estado de shock. 

—¡Y una mierda! —James me estaba dando golpecitos en la cara—. Hemos ido de culo durante esta investigación, le necesitamos o nos mandará a esa chica en tuppers. 

Miré a James tras su comentario, seguramente mi cara estuviera desencajada. El federal siguió hablando: 

—¿Me oyes? —ponía énfasis en cada sílaba, como si le hablara a un niño pequeño—. Te-ne-mos que ha-cer al-go si-no E-ri-ca mo-ri-rá. 

—¡James! —El agente González le llamó la atención. 

Reaccioné. Aunque de la peor forma posible, sentía mi sangre subir de temperatura, hasta su punto de ebullición.

—¡Todo esto es por vuestra maldita culpa! —Ambos agentes me miraron estupefactos—. Nunca hemos tenido nada útil contra Rainbow ¡Nada! 

Con la palma abierta di un golpe a mi escritorio, barriendo parte del equipo, que cayó al suelo. 

—¡Jake, cálmate! —me advirtió González—. No solucionas nada destrozando tu equipo. 

—¿¡Y qué más da?! —grité— ¡No podemos hacer nada ya! Para cuando tengamos la ubicación Erica estará… —mi voz se quebró— estará…. mue-

¡ZAS! 

Sentí un dolor fortísimo y me toqué la mejilla, había sangre ¿El agente James me había dado un puñetazo?

Lo miré desconcertado, estaba agitando la mano, sus nudillos se estaban enrojeciendo. Me hacía gracia su expresión, como si le doliera más a él que a mí… Tremendo psicópata. 

Por su parte, González estaba frotando sus sienes, como si quisiera borrar de su cerebro la imagen de lo ocurrido. Tras suspirar dice: 

—Está claro que hemos enfocado muy mal esto. Este caso se ha llevado cuatro víctimas y hay una chica desaparecida —suelta otro suspiro para aliviar su frustración—. Ahora no es momento de lamentarnos, tenemos que actuar y ser más eficientes que nunca. 

—¡Joder! —James da otro puñetazo, pero esta vez en la mesa.

—Estáis demasiado tensos, ahora os vais a meter en la cama y dormir un par de horas. Así no me servís para nada. 

Abrí la boca para quejarme, por supuesto que no me iba a ir dormir cuando Erica estaba a merced de ese asesino. No obstante, James se me adelantó: 

—¡Ya está! —es la primera vez desde la desaparición que lo veo sonreír— La clave está en lo que Erica dejó en Colville ¡Necesitamos un fax! 

—¿Un fax? —Arqueé una ceja, eso estaba obsoleto. Pero nuevamente la ira iba creciendo en mí— ¡Lo que necesitamos es encontrar la ubicación de Erica!

James hace un gesto con las manos, indicando que me calmara y dice: 

—Seguro que encontramos a Rainbow, Erica estaba investigando su conexión con Liam. Estoy seguro de que encontró algo, lo que pasa es que desistimos al saber que Nathaniel Olivers estaba muerto. 

—En breves va a venir un equipo para asegurar el piso, pondrán varias líneas seguras —intervino el agente González—, está claro que Rainbow ha ido un paso por delante de nosotros todo este tiempo y aunque alguien del grupo de Erica le pasó información, pero no tiene acceso a tanta. Así que… 

Duskwood: Rainbow case.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora