My destino eres tu

Capitulo 30

El tiempo comenzó a avanzar muy rápido para Izuku aun no podía creer todo lo que habia pasado para él en esos casi dos años de conocer a su Alfa destinado, ya tenia 8 meses de embarazo y comenzaba a emocionarse por la llegada de su cachorro, Denki lo visitaba todo el dia, se la pasaban ocupados viendo temas de la boda de Eijiro y Denki, en algunas ocasiones Ochaco también los acompañaba.

Ese dia en particular estaban Ochaco y Denki con Izuku en su casa hablaban sobre los planes a de sus futuros cachorros.

—¿Saben? — llamo la atención Ochaco — Se que yo no estoy esperando un cachorro pero me gustaría abrir una cuenta de ahorro para guardar algo de dinero, ya saben para emergencias de los cachorros o para que tengan oportunidad de estudiar donde ellos quieran sin preocuparse del dinero.

Izuku asintió con entusiasmo, acariciando su prominente barriga mientras sonreía. Denki y Ochaco compartieron miradas de aprobación.

—¡Eso suena como una excelente idea, Ochaco! —exclamó Denki—. La educación de los cachorros es fundamental, y nunca está de más estar preparados para cualquier eventualidad.

Ochaco asintió con una sonrisa. —Exacto. Además, sería genial que tuvieran la libertad de elegir sus propios caminos sin preocuparse por las limitaciones económicas. ¿Qué piensas, Izuku?

Izuku respondió emocionado: —¡Estoy completamente de acuerdo!, aunque gracias a nuestras posiciones en las empresas de nuestros padres no deberíamos tener problemas a menos que las cosas en los negocios familiares no fueran bien.

—Bueno en eso tienes razón pero también debemos enseñarles la importancia de su dinero, pero para eso faltan muchos años — sonrio Ochaco.

Conforme seguían platicando el tema del fondo para la educación de los futuros cachorros, paso a segundo plano y comenzaron con temas mas personales

—¿Cómo vas con la planeación de la boda? — pregunto Ochaco a Denki

Denki sonrió ampliamente al escuchar la pregunta de Ochaco. Se acomodó en el sofá y comenzó a hablar sobre los detalles de la boda con entusiasmo.

—Bueno, la verdad es que estamos avanzando bastante. Eijiro y yo hemos decidido hacer una boda bastante grande, con todos nuestros amigos y familiares. Ya tenemos el lugar reservado, y estamos trabajando en los detalles de la decoración. También estamos en el proceso de elegir el menú, ¡y créanme, es más difícil de lo que parece!

Ochaco rió suavemente, imaginando la cantidad de decisiones que debían tomar para organizar un evento tan importante. Izuku se unió a la conversación, mostrando interés. —¿Ya tienen pensada la fecha?

Denki asintió con una sonrisa radiante. —Sí, hemos decidido casarnos en la primavera del próximo año. Queremos que sea una época llena de vida y color. Además, así tendremos tiempo suficiente para coordinar todos los detalles sin sentirnos demasiado presionados.

Izuku acarició su barriga y agregó: —Será maravilloso. Estoy ansioso por ver cómo todo se desarrolla y, por supuesto, ¡por ser parte de ese día tan especial para ustedes!

Ochaco asintió y miró a Izuku con una expresión curiosa. —Hablando de eso, ¿ya han pensado en cómo organizarán las cosas para cuando nazca el cachorro?

Izuku sonrió y compartió sus planes. —Sí, Denki me ayudará en todo momento. Además, nuestros padres están muy emocionados y dispuestos a brindarnos apoyo. Creo que todo saldrá bien, y estoy agradecido de tener a gente tan increíble a mi alrededor.

Al final del dia los chicos se retiraron cuando llegaron Katsuki y Eijiro quien venia por su omega. Al dia siguiente el peliverde tendría su ultima consulta medica antes del gran dia donde recibirán a su amado cachorro por lo que, Katsuki lo llevo a su nido después de una deliciosa cena.

A la mañana siguiente el Alfa se despertó primero a preparar todo desde la bañera para que su omega tomara un relajante baño, hasta el desayuno servido con mucho amor, luego de ahí lo condujo con cuidado al auto para ir a la última cita médica.

La sala de espera estaba tranquila, con una suave música ambiental que intentaba calmar los nervios. Izuku y Katsuki se sentaron juntos, entrelazando sus manos mientras esperaban a ser llamados. La tensión se disipó cuando el médico finalmente los recibió.

Después de realizar las revisiones habituales, el médico sonrió y les aseguró que todo estaba progresando de manera saludable. Izuku, aliviado, compartió una mirada emocionada con su Alfa. El médico continuó explicando los detalles finales y proporcionando consejos para los días previos al nacimiento.

—Todo parece ir perfectamente. Su cachorro está en buena posición, y tanto la madre como el padre han hecho un trabajo excepcional en el cuidado prenatal —comento el médico con una sonrisa tranquilizadora.

Después de la consulta, se dirigieron a casa con una sensación de alivio y emoción. Izuku acarició su barriga hinchada mientras su Alfa le dedicaba una mirada amorosa.

—No puedo creer que estemos tan cerca de conocer a nuestro cachorro —susurró Katsuki, emocionado.

—Lo sé Kacchan no puedo esperar más tiempo.

Un par de semanas mas tarde, Izuku se habia quedado con Denki, Nejire y Shoto quienes visitaban al peliverde, de hecho fue una solicitud de Katsuki porque no podía faltar a una reunión con Yagi para la firma de unos papeles importantes dentro de la compañía no quería dejarlo solo por si pasaba algo.

La espera llegó a su fin cuando finalmente, llegó el día del esperado nacimiento. Izuku estaba rodeado de amor y apoyo en la sala de parto, con Katsuki sosteniendo su mano con fuerza y mirándolo con ojos llenos de afecto.

Después de horas de trabajo de parto, el llanto del recién nacido llenó la habitación, anunciando la llegada del esperado cachorro. Izuku y Katsuki compartieron una mirada llena de emoción antes de que el personal médico colocara al pequeño en los brazos de su madre.

—¡Es perfecto! Se parece a ti Kacchan —exclamó Izuku con lágrimas de felicidad en los ojos mientras sostenía a su pequeño cachorro, tenia cabello igual al de su padre, ojos verdes con toques rojizos en sus iris, así como las hermosas pequitas que el peliverde poseía.

—Es una mezcla perfecta de los dos — Agrego Katsuki conteniendo la emoción del momento se inclinó para darle un beso a ambos, expresando su alegría. La noticia se extendió rápidamente a los amigos y familiares en la sala de espera.

A medida que los días pasaban, la casa se llenó de risas, pañales y noches sin dormir. Izuku y Katsuki disfrutaban su etapa como padres primerizos, con la ayuda y apoyo constante de sus amigos cercanos. Denki, en particular, se mostró como un tío dedicado, visitando con frecuencia y ofreciendo su ayuda en todo lo necesario.