—¿Por qué haces esto?
—¿Por qué crees que lo hago? —pregunta la muchacha al otro lado del teléfono mientras juega con el cable entre sus dedos.
Yo siento pesar en mi interior ya que me sorprende entender todo lo que sucede.
—No lo sé, estoy sorprendido.
—Yo también estoy sorprendida —bosteza—. Te tomó bastante tiempo armar el rompecabezas.
—¿Crees que esto es un juego?
—Nunca dije que lo fuera.
—¿Entonces por qué quieres hacer ver como que esto es un juego Furina? —comienzo a perder la paciencia.
Wriothesley mira hacia donde me encuentro con cara de no entender muy bien lo que sucede.
—Mmmmhn-aaah, tu inocencia a veces me hace querer... —Furina apieta el puño con el cable del teléfono dentro de su mano— abrazarte tanto Neuvillette.
—No entiendo a qué te refieres...
—Vayamos por partes, Neuvi —dice la Arconte al otro lado de la línea—. Primero: hacía mucho no teníamos días libres. Asumo que habrás disfrutado este tiempo en el Fuerte Merópide —la muchacha sonríe con malicia—. Segundo: la Jaula del Mar Primigenio se estaba desbordando, por lo que uno de nosotros dos debía bajar a ayudar a que no se desborde y continúe sosteniendo al Mar Primigenio ya que ninguno de los ingenieros puede exponerse a un peligro tal. Pero en la carta, la petición era muy explícita. Solicitaban tu presencia, melocotón... —Furina sonríe de medio— así que decidí tomar las riendas del asunto y optar por un... —se alza de hombros— pequeño plan. Una vez solucionaste el problema, mi plan ya estaba en marcha.
Escucho atento y sigo todos los acontecimientos que Furina me dicta, dándome cuenta pronto de que fui un completo tonto. En ese momento todo comienza a cobrar sentido.
—Para mi no fue un juego Neuvillette —dice la Arconte—, y aquí volvemos hacia el 28 de Septiembre. ¿Puedes recordar esa fecha? —Furina sonríe de lado.
—¿28 de Septiembre? —Y en ese momento mi mente viaja como si se tratara de una cinta de rebobinar hacia el pasado unos cuantos días.
*FLASHBACK*
—Y con este sello cerramos el expediente de Croglorth —pongo un sello al final de la hoja y cierro aquella planilla. Furina lo contempla detrás del escritorio de piernas cruzadas—.
—Eso es todo por hoy.
—Así es Furina.
—Toma, te la mereces —la Arconte me extiende una copa plateada con gemas de color azul profundo incrustadas de manera simétrica que rodeaban la misma, en la cuál cargó Agua del lago de Sidra—.
ESTÁS LEYENDO
Lie me if you can ~
FanfictionNo es lo mismo la vida en el Palacio Mermonia que en el Fuerte Merópide. En uno trabaja el Gran Juez supremo Neuvillete, del otro se encarga el celador Don Wriothesley, quién fue un recluso que ascendió a ese puesto por buen comportamiento y por sob...