Deep Eyes |Cara Delevingne|

Capítulo 11

— ¿¡Que carajo!? ¡Dylan!

Abriste los ojos de golpe, y te diste cuenta que quien te estaba besando no era Cara, sino Dylan.

La misma Dylan que te había roto el corazón, la que te abandonó con tus problemas suicidas era la misma que ahora estaba intentando reconquistarte o algo por el estilo.

Dylan seguía inclinada sobre ti, la empujaste de los hombros. No querías que Cara pensara otra cosa.

Cara se acercó sin despegar la vista de Dylan con la intención de pegarle, pero te sentaste en la camilla, quedando entre ambas.

— No Cara, por favor. — Tomaste su muñeca con la mano izquierda. Estaba enojada, mirando tus ojos. Volteaste a ver a Dylan, quien se estaba burlando de la rubia.

— Lástima. No hoy. — Levantó las cejas y sonrió.

— Lárgate Dylan.

Caminó con la vista en alto, tu no soltabas la muñeca de Cara.

— Adiós mi amor. — Dylan lanzó un beso desde el umbral de la puerta.

Cara iba a salir tras ella, pero la sujetaste y eso provocó que la aguja en tu muñeca se desconectara.

— ¡Dios, amor, perdóname!

— Ibas a pelear con ella, Cara. — La miraste con una mueca.

— ¿Y que querías que yo hiciera? Te estaba besando.

— Es mi ex novia, Cara.

— Muy bien. — Se cruzó de brazos y sonrió sarcásticamente. — Osea que mi ex novia puede venir y besarme sin que tu digas nada. Me agrada la idea.

— No Cara, yo no quería decir eso.

Suspiró y te miró con una sonrisa de lado al ver que abrazabas su chamarra como si fuese ella misma.

— Solo ven aquí. — Recargaste la cabeza en la almohada.

Se dio por vencida y se acostó a un lado tuyo.

(...)

— Cara, ve a casa. — Tomaste su brazo.

— Quiero estar contigo. ¿Tu no lo quieres? — Dijo con los ojos entrecerrados por el sueño.

— No digas eso Cara, pero has estado aquí desde ayer, y tienes enormes ojeras.

— Tu las tienes también. ¿Y te estoy corriendo? No.

Reíste ante su comentario y la abrazaste por la cintura.

— Amor, el sueño te hace agresiva.

— Tu también querida.

— No es cierto. Pequeña rubia mentirosa.

Frunció las cejas e hizo un puchero.

— A ti no te miento. — La besaste.

Viste a tu madre, y rápidamente te separaste de ella.

— ¿Que pasa?

— Mis padres, Cara, ellos aún no lo saben.

— Oh, claro. — Se alejó.

— Hija ¿De nuevo?

Tu madre dejó un beso en tu frente, tu padre no dijo nada, sólo te daba una sonrisa reconfortante.

— ¿Y quien es ella? — Tu madre le sonrió, Cara lo hizo de vuelta.

— Ella es... — Cara sonreía y tu interior temblaba.

No sabías como presentarla, Cara esperaba ser presentada como lo que era, y tu madre esperaba una respuesta.

***

Saludos :3
Gracias por el apoyo a esta novela. Disculpen el capitulo caca /.\
Hay una novela Kaylor en mis obras ¿La vieron? Yo se que si e.e
Saludos a Dayana, que es como dos años menor que yo pero me bullea y me alburea.
A la Zamme :') volvió al fin