𝐂𝐚𝐩. 𝟏𝟎

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La separé abruptamente de un empujón, limpiando mis labios hasta por fin mirarla, con el ceño completamente fruncido y la mandíbula tensa.

— ¿Qué rayos te sucede?... —quería abofetearla en ese momento, incluso levanté la mano, pero la sostuvo antes de poder golpearla— ¿Crees que voy a corresponderte un maldito beso después de todo lo que me hiciste pasar? 

— No me rechazaste al principio.

— Eso no tiene nada que ver, que lo haya hecho no significa que te perdono, tampoco que todo está olvidado. ¿Me crees tan fácil?

Aunque había una verdad detrás de todo esto. Seguía teniendo una debilidad por ella, jamás logré olvidarla por completo, pero debía seguir y no estancarme más.

— No eres fácil... no dije eso.

— Parece que sí —ataqué.

— No sé que tipo de rencor tienes hacia mí, pero solo trato de arreglar las cosas entre ambas... ser amigas otra vez —suspiró, metiendo las manos en los bolsillos de su buzo luego de haberme soltado.

— No tengo rencor, solo estoy enojada contigo.

— Han pasado nueve años ya, JooHyun, tienes rencor.

— ¿Te afecta que lo tenga? —Ataqué nuevamente.

— Sí, mucho.

No me esperaba esa respuesta en lo absoluto.

Abrí ligeramente los ojos, ya sin saber qué decir o qué hacer, simplemente la miré.

— Por qué te afectaría, es mi pregunta ahora.

— Después de nueve años, jamás pude amar a alguien tanto como te amé a ti, no me es posible ser cariñosa con otra persona que no seas tú, JooHyun... es mi culpa que estés enojada, lo sé, estás dolida y lo entiendo. Me dejé manipular muy fácil por SeungWan, y me arrepiento de eso... no debí irme ese día sin escucharte, sin saber tu versión —se acercó, tomándome de las mejillas—. Fui una imbécil todo este tiempo, no debí haberte dañado de esa manera.

Coloqué mis manos sobre las suyas, solo hasta que vi una lágrima correr por su mejilla, la cual sequé, mientras acunaba su rostro en mi diestra.

Escuché la puerta abrirse, al voltear no pude creer quién era. Maldita sea, mi suerte no podía ser peor.

— ¡SooYoung!, Dios... lo siento, SeulGi... —tomé mis cosas y salí corriendo del salón.

SooYoung no estaba tan lejos, así que no me costó mucho alcanzarla. Tomé su muñeca e hice que me mirase, estaba enfurecida.

— ¿Por qué estabas con ella? —preguntó de inmediato.

— No hacíamos nada, solamente estábamos hablando... ella me pidió disculpas por todo.

— Y tú fuiste tan idiota como para perdonarla, ¿cierto?

No pensaba permitir que me tratase de esa manera.

— No soy una idiota, ni siquiera le dejé una respuesta concreta, porque justo llegaste tú —bufé.

No dijo nada más, solamente me llevó a uno de los baños y me besó en el último cubículo, estaba aún molesta, y el beso para nada lo disfrutaba si estábamos de esa manera.

— No, no, ya... —murmuré al sentir su mano bajo mi camisa, y aunque era una debilucha, ella claramente no se separó.

Me gustaban las cogidas rudas, pero no una maldita violación, apenas llevábamos un día de relación.

KIDS - SEULRENE G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora