Jimin logró esquivar ese camión, el cual venía en vía contraria. Maldijo de mil formas existente y las no existentes.Al llegar al centro de Seúl se detuvo. Desde hace mucho Jimin no disfrutaba de sus noches. Le pareció buena idea ir a una discoteca, además que con el sustos de hace unos minutos necesitaba distraerse.
-Jimin hace días no te veía por estos lados! -El hombre musculoso, alto y de piel morena abrió la cinta para que Jimin pudiera pasar sin necesidad de hacer fila.
-No había tenido tiempo. -Jimin le sonrió agradeció, sienpre lo dejaba pasar. -Y me da gusto volver a verte Kalvin.
-Lo mismo digo, Park. Divierte.
Jimin asintió y se adentró. La música empezó a sonar aún más fuerte, muchas personas estaban bailando y bebiendo. El rubio se fue a sentar a la misma mesa de siempre y pidió algo de tomar.
Esa asquerosa imagen de Jungkook con la mujer encima le venía a la mente. Podría solo ignorarlo y seguir como si nada paso, no podía. Jimin siguió y siguió tomando, muchas mujeres y hombres se le acercaban pero él siempre los terminaba rechazando.
-Jimin deja de tomar. -Aquella vos hizo que Jimin viera a la persona frente a él. -Terminarás por vomitarte encima y eso sería asqueroso.
-Incluso aquí me jodes? Lárgate Taemin y déjame en paz.
Taemin le arrebató el vaso de alcohol y aventó el líquido al piso.
-Estás ebrio Park, déjame llevarte a casa!
-Ni loco dejaré que hagas eso. ¿Para que? Para que luego te aproveches y le digas infinidades de mentiras a Jeon, no gracias! Yo paso!
La escandalosa risa de Taemin se escuchó.
-Entonces ahora te gusta te tentar a la muerte! Pensé que eras más inteligente Park ¿si sabes que Jungkook te puede matar cuando al él se le de la gana?
-Si me mata o no ese es mi problema! Además anduve contigo y tú eres igual, quizás peor.
-Hace cuanto fue eso? Cinco años! Ya supéralo Jimin.
-Qué lo supere? Me utilizabas solo por sexo y luego te fuiste sin decirme nada, no te importo dejarme solo y en la cárcel. -Le reprochó. -Y en ningún momento me dijiste nada de que eres mafioso, ahora entiendo lo de la droga.
-Saliste así que no te puedes quejar...
-Salí pero no fue gracias a ti. Taehyung y Hoseok me ayudaron, si fuera por ti aún estaría en ese lugar. Y todo por una droga que no era mía.
-Yo iba a sacar esa droga, pero la policía se adelantó. Mi padre se enojo por mi descuido y me llevo para Japón.
-Cuándo pensabas decirme a lo que te dedicabas?
-Te lo diría Jimin, pero todo se salió de control. Y tampoco era como que yo estuviera muy involucrado, aún era joven y mi padre no me ponía hacer muchos trabajos. Luego la Mafia Jeon empezó a reclamar su territorio y todo fue una mierda.
-Estoy arto de escuchar de mafias, estoy arto de ti y estoy arto de Jeon Jungkook. Por mi que se mueran todos.
-Espera a donde crees que vas? -Jimin se levantó y empezó a caminar. -Jimin regresa. -El rubio se dio la vuelta para sacarle el dedo de en medio y seguir su camino.
Salió por la parte trasera de la discoteca, un callejón poco transitado. Aún podía caminar aunque su cabeza empezaba a doler.
-Maldición! -Gritó y se detuvo. -Podrías salir de una vez? Ya se que me sigues! -Nadie salió, nadie habló. Jimin siguió caminado a paso un poco torpe.
-Pero que lindo regalo nos hemos encontrado! -Escuchó eso a su espalda. -Ven precioso no te haremos nada. -Dos hombres obesos se iban acercando.
Traían sus brazos tatuados y bates. Eran pandilleros y Jimin no se quedaría a averiguarlo.
-Corre lo que puedas, aún así no te salvarás precioso.
Jimin empezaba a maldecir el haber tomado, sus pies se enredaban al intentar correr. Esos hombres estaban por alcanzarlo y para su desgracia se resbaló y calló golpeándose la cabeza.
-Ahora si lindo, veremos que es lo que traes de valor y de paso te aprobaremos. -Sus asquerosas risas se escucharon, uno empezó a bajarse el cierre del pantalón y el otro se acercaba. Jimin veía todo borroso y escuchaba poco. Quizás ese era el fin, Jimin estaba por ser abusado.
La sombra que pudo percibir Jimin, vestía de negro. Escuchó un estruendo y uno de ellos calló al piso, los pedazos de vidrio salieron esparcidos y con el segundo hombre pasó lo mismo. Ambos se quejaban tirados en el piso.
-Maldita perra. -Maldijo uno de ellos.
Jimin veía la figura acercándose, sintió las manos en sus hombros y así lo fue arrastrando.
-Ayúdame quieres... No hagas más tonterías. -Escuccho eso a lo lejos.
Su cuerpo se dejó de mover, aunque aún estaban en alguna parte de ese callejón. La sobra que Jimin veía borrosa se acercó. Sus rostros quedaron serca.
-Aléjate de ellos. - Sus ojos parecían diamantes, muy azules y grandes. Eran los ojos más hermosos que Jimin alguna vez había visto. Se podían confundir con la belleza de la profundidad del mar. -Aléjate de Jeon Jungkook. -Eso último lo había escuchado claro y Perfecto. Una dulce vos, angelical y tierna.
Antes de que Jimin pudiera decir algo, se fue quedando dormido.
...
Todo pudo confundirse con algún tipo de sueño extraño, sin embargo el dolor de cabeza por la resaca le decía a Jimin que nada fue un sueño.
-Donde estoy? -Se preguntó. Un cuarto con paredes blancas y color piel que claramente no era el de él. Era un edificio, la ciudad se veía.
Jimin se puso sus zapatos que estaban a un lado de la camina y decidió salir. El olor a comida se sentía exquisito. De espaldas estaba alguien, con una cuchara en manos y sin camisa. Jimin podía asegurar quien era.
-Por fin despiertas! -Hablo aún sin darse la vuelta.
-Qué hago aquí y como llegue?
Taemin se dio la vuelta.
-El desayuno ya estará listo, espero que te sigan gustando los huevos con vegetales.
-Responde!
-Qué fastidioso! -Volvió a girarse para batir los huevos. -Ayer te encontré tirado a mitad de un callejón y decidí traerte.
-Tirado? Yo estaba solo...
-Estabas solo, de seguro por la borrachera te desmayaste o algo parecido.
-Una mujer ella...
-No había nadie Park, de seguro alucinaste!
Jimin se acordaba, sabía que lo había salvado, una mujer lo salvo.
-Y que bueno que despiertas. -Ests vez lo miró. -Jungkook no paraba de llamarte...
-Jungkook...
-Si, Jungkook. Ese maldito. No te preocupes, le respondí y le dije que estás aquí conmigo. -El rostro de Jimin se palideció . -Dijo que vendría por ti, pero no parecía de buen humor...
-Qué hiciste! ¿Estas pendejo o que?
-Cálmate, no es para tanto.
-Lo hiciste a propósito! Maldito.
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Una noche más? KOOMIN
Teen Fiction-Te juro que yo no lo hice, tienes que creerme Chimchim- Su intento de acercarse fue en vano cuando el rubio dio un paso atrás y lo miro con odio. -Te di muchas oportunidades Jungkook y este fue mi límite..