La hija de Scaloni {Emiliano "Dibu" Martínez}

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Emiliano
Al otro día me levanté temprano porque ya no tenía más sueño, bajé al jardín y me senté debajo del arco con una pelota en mis manos. Quería practicar penales pero no tenía con quien

–Hola Emi –se acerca a mi lado y me saluda con un beso en la mejilla–

–Hola Ariana, ¿qué te trae tan temprano por acá?

–Estaba aburrida en mi habitación y decidí bajar, ¿y vos?

–También –río– los otros flojos todavía están durmiendo y no tengo con quién practicar penales –hago un pucherito con mis labios– ¿queres practicar conmigo?

–Pero no tengo idea de fútbol –ríe–

–Solo tenes que patear la pelota y yo atajar, no es difícil –río a la par de ella– 

–Bueno dale –agarra la pelota y la pone en el suelo–

–Hagamos 5 tiros, ¿queres? –pregunto y asiente– apuesto a que no me haces ningún gol 

–¿Estás seguro? –arquea una ceja y ríe–

–Más seguro imposible

–Que agrandado resultaste ser –ríe y golpea suavemente mi hombro–

–Hasta me animo a apostar si queres

–Mmm bueno dejame pensar la apuesta

–Pensa tranquila

–¡Ya sé! Si te hago un gol de los cinco me tenes que acompañar a comprar ropa

–¿Y yo qué tengo si te atajo todo?

–Nada –ríe–

–Ja ja, qué graciosa –río– si atajo todo tenes que subir una historia conmigo a tu instagram, ¿te parece?

–Bueno dale, trato hecho –estrechamos nuestras manos y cada uno se va a su posición–

–Tirala cuando quieras eh –bromeo ya que estaba tardando demasiado–

–Espera que tengo que prepararme –toma aire profundamente y patea la pelota hacia el arco– la puta madre –se queja al ver que se la había atajado. Sigue pateando los cuatro tiros que le quedaban y logro atajar todos– no se vale, con estas zapatillas no se puede –se cruza de brazos y hace pucherito con sus labios totalmente besables, basta Emiliano pensa en otra cosa– se cancela la apuesta –ríe–

–¿Ah si? –me acerco a su lado– ¿así que se cancela la apuesta? –arqueo una ceja–

–Si porque estabas en ventaja, era obvio que ibas a atajar todo

–¿Segura? –me acerco más a su cuerpo, pongo mis manos en su cintura y empiezo a hacerle cosquillas–

–No Emiliano, p-para –ríe fuertemente–

–¿Cuál es la palabra que busco? Mmm, ah ya sé, NO –río y sigo haciéndole cosquillas hasta que se tira al suelo y me tiro con ella para seguir haciéndole cosquillas–

–No p-puedo más Emi, para p-por favor –dice entre risas–

–¿Vas a cumplir la apuesta entonces? –pregunto sin dejar de hacerle cosquillas–

–S-sí –responde entre risas–

–Perfecto, espero la historia entonces –sonrío– no te olvides de etiquetarme eh –dejo de hacerle cosquillas y nuestros rostros quedan tan cerca que hasta podía sentir su respiración cerca de la mía, estaba por dar el primer paso y besarla cuando nos separa un grito de el Kun, la puta madre, ¿justo ahora tenía que aparecer este boludo?–

–NO PUEDO CREER LO QUE MIS OJOS ESTABAN A PUNTO DE VER –dice emocionado mientras se acerca a nosotros–

–Lo hubiésemos podido ver si no interrumpías tarado –agrega Cachete–

–No sean idiotas –dice Ariana riendo mientras se levanta rápidamente del suelo–

–Veni acá que tenemos que hablar seriamente pequeña –dice el Kun al mismo tiempo que la abraza por los hombros– pero en privado y sin chusmas de por medio –ríe y se alejan de nosotros–

–¿Que queres, Sergio?

–No te hagas la boluda que ya sabes de lo que quiero hablar –ríe– ¿que tenes con Emiliano? –pregunta sin rodeos–

–Nada –respondo nerviosa–

–¿Esperas que me crea esa respuesta después de lo que vi? –pregunta riendo–

–No pasó nada boludo –río nerviosa–

–Porque justo llegué yo, sino se besaban

–B-bueno n-no sé que me pasa la verdad –me sonrojo–

–¿Te hubiese gustado que te bese?

–S-sí –me vuelvo a sonrojar–

–Prometo no interrumpir la próxima vez –ríe– pero tene cuidado con Emiliano

–¿Por? –pregunto extrañada–

–No quiero que salgas lastimada

–¿Y por qué saldría lastimada? No entiendo

–Porque es un hombre y todos los hombres son pajeros y me incluyo en la lista

–Que idiota –río y lo empujo suavemente–

–Hablo en serio, tene cuidado porque te quiero mucho y no quiero verte mal por un hombre

–Está bien, gracias Kuni, yo también te quiero –lo abrazo–