Los compromisos con ajenos no es divertido, la gran mayoría logra acabar en buena relación, los otros simplemente no pueden decir lo mismo, y otros, que amaban desde el minuto cero, el que ahora sería por siempre su destino..
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Las cosas para ese día pintaban mucho mejor.
Los cuatro se encontraban tomando el desayuno en un silencio bastante pesado, el más joven miraba a todos los presentes, quienes parecían tan metidos y confundidos con sus pensamientos, que no parecían saber que estaban en compañía de alguien más.
—¿Que se hará con el prisionero? —Preguntó el segundo principe tomando su copa, mientras evitaba mirar a su hermano, a quien no le pareció oportuna la pregunta— ¿Qué?
—Sabes que esos temas no se pueden tocar en la mesa... —Soltó con simpleza mientras tomaba un pedazo de fruta, era lo único que había tocado esa mañana.
—¿Que tiene de malo que los de más alto rango discutan sobre ello? —Llamo nuevamente la atención— Dos de nuestros guardias están en los calabazos desde anoche, Sharp regresó y ni siquiera con todo su bando, los prisioneros no han hablado, todos los guardias están con armas y caras de querer matar a alguien.... Esto está demasiado descabellado.
Axel miro fijamente a su hermano, quien hasta ahora le sostenía la mirada, casi queriendo desafiarlo, cosa que no podía acabar muy bien.
Sharp quien junto a Foster y Greenway se encontraban en la sala, miraban con seriedad el suelo, no podían ni siquiera opinar del tema, el primer príncipe parecía querer matar a alguien.
—Segundo principe, le pido que guarde silencio.—Celia habló, mirando al mencionado quien se sorprendió por aquello.
Esa participación ninguno de los tres la esperaba, ambos miraron a la princesa de la luna, quien se mantenía con la mirada fija en él segundo principe del imperio, el cuál se mantenía en su lugar, en completo silencio.
—Usted tiene toda la razón, la situación dentro del palacio está bastante alterada, todos nos encontramos angustiados por lo acontecido, pero su alteza está en lo cierto, no es el mejor lugar para hablar de eso, agradecería que se comportará y se mantenga en silencio. —Pidio Celia con plena seriedad, cosa que llamo bastante la atención.
—Pido una disculpa, Princesa.. —Se disculpó él, era verdad, no era el momento, y lo sabía, únicamente queria molestar más a su hermano con el tema, no pensó que ella saliera a la defensiva con dicho tema, se sentía patético.
Greenway rápidamente sonrió mientras miraba sus pies, su princesa había tenido un gran avance en todo lo que a ella y a su desarrollo respecta.
¿Quien diría que era la misma que llegó con apenas un habla en la mano?
Estaba orgulloso, pero no solo él.
Axel también se había asombrado ante tales palabras, estaba bastante emocionado y aliviado de ser participe de aquello, hasta su hermano se veía intimidado, y no era fácil ponerlo así.
—Pues a mi si me gustaría hablar de lo acontecido anoche... —La princesa Camelia habló, llamando la atención hacia ella, Caleb rodó los ojos mientras que Erik y Mark se miraban, estando también en compañía con su altezas por seguridad.— ¿Dónde se encuentran la prisión?
