14_ Mí algo

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Cómo todos los días, abri mis ojos...

Pero no era todos los días que uno se despertaba afuera, acostado en una reposera y siendo despertado por la luz del sol y con los ojos de cierto salteño galán.

-Buenos días primo.- saludé y me escondí del sol en su pecho.

-Hola Agu'- sentí sus manos apresarme en un cálido abrazo.

Cada día me acostumbro un poco más a despertar al lado de un hombre.
Quizá ayuda el echo de que ese hombre me saque algunos centímetros, que este fuerte... Que me genere seguridad.

Para colmo, que sea algo celoso a veces con mi amistad es reconfortante. Pero claro, solo tenemos una hermosa amistad.

-¿Vamos a desayunar Marquitos?- sentí su mano posarse en mi muslo, acariciándolo lentamente.

-¿Y si nos quedamos acostados un rato mas?- me sonrio mientras me veía fijamente con esos ojos color cafe tan... Convincentes.

-Una fiaca tenés primo.- me queje, pero fui el primero en acomodarme en sus brazos nuevamente antes que hablara devuelta.

-Como lo quiero primo...-

Al pasar de los días ya no me queda otra que admitir que me gusta Marcos. Me gusta su cuerpo, me gusta su cara, me gusta su actitud, me gusta su forma de ser solo conmigo...

Me gusta.

Pero no puedo simplemente admitir mis sentimientos, no después de tantos besos sin significado. Aún que para mí, algunos si lo tenían.

-Yo te quiero más.- afirme.

-Deje de mentir primo, yo lo quiero más.-

-¿Pero yo no voy a saber lo mucho que te quiero?- me separé del abrazo y me acerque a el, quedando a poca distancia.

-¿Y yo no?- nos retamos con la mirada.

¡¡AGUANTE MARGUS!!

Las locas de Twitter...

Tan pronto oí el gritó, no pude evitar sonrojarme, sobretodo por la corta distancia que yo había provocado.

-¿Que es mar...gus?- entrecerró los ojos unos segundos hasta que me miró con el mismo nerviosismo que yo.

-Ya apodan nuestra amistad y todo...- traté de justificar el grito.

baje mí mirada, encontrándome casi encima de marcos, claramente cualquier pensaría que estaba por pasar algo.

-Yo lo quiero más primo.- dijo Marcos, levantándose de allí a paso rápido.

Supongo que la situación lo habría incomodado.

Aproveche el silencio y que la mayoría de la casa dormía para hablar con la gente.

-Gente, por favor, no vengan a gritar esas cosas... Amo que nos quieran apoyar en el juego y todo, pero Marcos es heterosexual. No digo que quizás no sienta nada por el... Pero no podemos forzar algo que no se da.-

Me quedé en silencio un rato hasta que llegó Marcos.

-¿Y bien?-

-¿Que?- pregunté curioso.

-¿Osea que no me vas a decir que me querés mas que yo?- fingió enojo, a punto de irse.

Rápidamente me levanté y lo tome del brazo, ocacionando que se gire hacia mí.

-Por supuesto... Que te quiero más primo.- instintivamente baje la mirada al ver cómo se había girado.

El comenzó a reír con esa tonada suya, como si en verdad estuviera de lo más tranquilo.

ESTRATEGIA (Margus)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora