Alhaitham notó que de un día para el otro Kaveh empezó a evitarlo y se escondía de él. Su trabajo de oficina se había incrementado y había tenido que pasar más tiempo en la ciudad que en el pasado. Pero no podía fingir demencia cuando el primer día de su distanciamiento, Kaveh había pasado encerrado sin salir, incluso si tenían planeado hablar sobre un autor del cual ambos habían leído. Alhaitham se quedó con el libro, el cual había marcado en las partes que necesitaba para que Kaveh le diera la razón. Lo había esperado y aquel día el rubio no dio casi señales de vida.
Y tampoco podía fingir que no vio el moretón en la mejilla del rubio, cuando finalmente lo cruzó. Decidió no pensar demasiado en ello, tal vez finalmente podría sacar información valiosa para sus planes. Kaveh debía de estar sumamente vulnerable ahora y hablaría si Alhaitham era lo suficientemente amable con él.
Ese día después de casi dos semanas sin hablarse decidió que era él momento oportuno. Azar se había ido a la ciudad a una fiesta que organizaba un noble. Se miró al espejo listo para hacer su movimiento con el omega.
Como era de costumbre el omega se encontraba en los jardines para la hora del té en el lugar de siempre. Alhaitham se acercó sigiloso, estaba solo, eso era inusual. Y nuevamente apestaba al viejo alfa. Kaveh siempre lo recibía con una sonrisa, pero ese día sus ojos se veían tan apagados y tristes como la primera vez que lo conoció. Alhaitham sintió una molestia en el pecho cuando vio al omega en semejante estado, se había acostumbrado a la forma en la que sus ojos brillaban cuando se apasionaba cada que hablaban sobre algún tema. Tomó asiento junto al otro y esperó a que Kaveh dijera algo pero cuando esto no pasó, supo que debía dar el primer paso.
-Ha pasado un tiempo no te parece? - inició la charla tímidamente, iba a ser difícil al parecer. Si jugaba sus cartas correctamente tendría al omega comiendo de su palma. Kaveh solo lo miró por una fracción de segundo y continúo con la mirada pérdida en sus pensamientos y en el hermoso jardín frente de él.
-Mira seré honesto, extraño hablar contigo, es difícil encontrar a tan buen rival. Disfrute de nuestros debates- Alhaitham se quedó en silencio esperando la respuesta del rubio el cual parecía al borde de las lágrimas.
-No podemos Alhaitham. Azar sabe de nuestro pasatiempo. Y aunque es una actividad totalmente inocente. Mi esposo no cree lo mismo, es esa la razón por la que no te he hablado- finalmente dijo y Alhaitham se quedó perplejo. Sabía que lo podrían descubrir pero creía que ambos habían sido muy discretos, entonces ¿cómo lo supo el viejo alfa? Kaveh se paró de su asiento y se marchó del lugar pero no sin antes decirle al joven alfa- yo también te he extrañado.
Alhaitham sabía que debía hacer algo, no podía simplemente quedarse ahí sentado cuando el otro se marchaba de esa forma. Kaveh solo era una herramienta para un objetivo, no era nada más que eso para él pero aún así se sentía tan impotente ante aquella situación. Y lo siguió, hasta una fuente que se encontraba en el jardín y vio al omega desmoronarse. Alhaitham se acercó y vio como Kaveh daba puñetazos hasta lastimar sus manos, el peli gris corrió y lo detuvo para evitar que se hiciera más daño.
-Crees que quería casarme con alguien como Azar? Tantos alfas deseaban casarse conmigo, yo no desee esto Alhaitham y ahora no puedo huir- gruñó, su frustración era palpable- por mucho que lo desee, estoy atrapado aquí. Extraño a mis amigos, y extraño a mi familia.
Alhaitham se arrodilló al lado del omega y tomó su mano y acarició sus nudillos lastimados.
-Estoy aquí Kaveh no iré a ninguna parte.
-Deberías irte, Azar te mantiene aquí solo por su propio beneficio, "Oh miren al duque en función que amable que es con el legítimo heredero, es una maravillosa persona" él ama que piensen así de él. Y también quiere tenerte vigilando. Realmente desea tenerte vigilando.
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You Belong With Me [Haikaveh] +18
FanfictionAlhaitham es un joven alfa que quedó huérfano a una edad temprana. Desterrado de su propio ducado, se juró a sí mismo que recuperaría lo que le habían quitado y viviría en paz y tranquilidad. Fue entonces cuando conoció a Kaveh, el marido omega de s...