Los diarios tuvieron las mejores ventas en años con la historia de Kaveh, el desaparecido esposo de Azar, quien no sólo estaba vivo, si no que declaraba que fue abandonado para morir. El omega habló de la relación abusiva con su esposo y que deseaba iniciar el divorcio. El relato del dolido esposo se iba cayendo a pedazos desde la revelación de que su matrimonio no era lo que él decía. La fiscalía anunciaba que llamaría a declarar a Kaveh una vez el divorcio estuviera listo. Y un divorcio en tiempo récord era lo que todo el mundo hablaba, luego de las declaraciones sobre abusos que sufrió el omega.
Azar fue hasta el nuevo domicilio de Alhaitham en búsqueda de su esposo, Azar solo se retiraba cuando la policía aparecía. Cada vez que el viejo alfa hacía acto de presencia, Alhaitham sabía que debía ir a calmar a Kaveh, el cual siempre se inquietaba con la presencia del anciano. Alhaitham podía ver el miedo en el rostro de su amado y eso lo llenaba de una gran impotencia por no poder hacer más que abrazarlo y decirle que todo iba a estar bien y pronto se iría.
-No dejaré que te lleve a ningún lugar- le dijo Alhaitham. Él alfa prefería morir antes que permitir que Azar se llevará a Kaveh y a su bebé de su lado.
-Lo sé, es a su poder al que temo, y si me obligan a ir con él?- respondió como recordatorio de que todavía podían obligarlo a irse junto al viejo alfa. Aun así Kaveh estaba en paz, pronto se liberaría de su esposo y aquel sueño que se veía tan lejano se haría realidad. Liberarse de Azar, aunque en sus fantasías este sufría un infarto y simplemente moría.
Luego de una semana, después del anuncio de Kaveh, Azar dejó de molestarlo. Usando la excusa de ser el padre del hijo que Kaveh esperaba, busco obligarlo a tener que estar juntos. "Necesita mis feromonas" había declarado. Pero Kaveh era un omega dominante. Las feromonas del padre alfa eran necesarias pero no indispensables. Eso usó a su favor para no tener que regresar con Azar, esto lo enfureció tanto que pidió la custodia completa. Todo aquello ocurrió en las dos semanas más turbulentas que Kaveh hubiera vivido alguna vez.
Solo necesitaba un alivió a su estrés, su lívido nuevamente le estaba jugando una mala pasada. Con todo lo que le había estado ocurriendo, su lívido había disminuido pero ahora que se encontraba más relajado regresaba más fuerte que antes. La semana 18 iniciaba con un vientre más prominente.
Aquella noche las fantasías iniciaron más fuertes que antes y no pudo contenerse más tiempo. Miró al sillón a unos metros suyo, donde Alhaitham estaba durmiendo. Se quedó en su lugar tan silencioso como le fue posible tratando de escuchar al alfa al otro lado de la habitación. Su respiración era tranquila y pausada, finalmente se había dormido, era el momento de actuar.
Usando parte de la ropa de cama se aseguró de hacer la menor cantidad de ruido posible. Con paciencia comenzó a prepararse, primero con un dedo, y se dio cuenta lo desesperado que se encontraba. No había comenzado y ya se encontraba mojado. Se sentía tan bien por lo que introdujo un segundo dedo, masajeando y abriéndose a sí mismo, llegando y acariciando su protasta. Un gemido se le escapó y nuevamente, se aseguró que el alfa estuviera durmiendo. Su corazón latía descolocado, la idea de ser descubierto era tan excitante. Su miembro tembló ante la idea. El líquido preseminal en la punta le decía que había pasado un tiempo desde la última vez que se tocó a sí mismo.
Quería más, quería tanto sentirse lleno y sus dedos por mucho que lo intentaba no lo hacían sentir tan satisfecho como quería. Se perdió en su propio placer hasta que, el lugar al costado de la cama se hundió.
-Es verdaderamente molesto que creas que no soy capaz de escucharte o olerte- le recordó el alfa, el cual colocó ambos brazos al costado de Kaveh dejándolo sin salida. El pánico se apoderó de él por completo- ya hacía un tiempo que no lo hacías.
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You Belong With Me [Haikaveh] +18
FanfictionAlhaitham es un joven alfa que quedó huérfano a una edad temprana. Desterrado de su propio ducado, se juró a sí mismo que recuperaría lo que le habían quitado y viviría en paz y tranquilidad. Fue entonces cuando conoció a Kaveh, el marido omega de s...