Si pruebas una vez

Capítulo 7

El lunes por la mañana me desperté temprano para ir a la escuela, bajé y me disponía a despedirme de papá.

A dónde vas cariño, replicó mirándome pues a que otro lugar si no a la escuela respondí a lo que añadió lo siento mucho Rei, te dije  ibas a tener que cambiar de escuela; acabo de regresar del Private Girls y oficialmente ya estás dada de baja.

Cómo es que pudiste hacer eso papá, no lo merezco reviré molesta qué va a pasar conmigo ahora, me quedaré sin estudiar hasta que tú te recuperes estallé enfurecida .Por supuesto que no señorita, asistirás a una escuela pública, al salir del Private Girls fui a la Preparatoria Juuban y te inscribí allí, mañana te presentarás.

Qué!!!!!!!!! De inmediato recordé que aquél era el lugar donde había estado el sábado ese sitio es espantoso, no sabes cuánto añadí. No me importa eso Rei, su nivel educativo es excelente y eso es lo que cuenta, tengo muy buenas referencias de allí.

Pues deberías ir tú entonces volví a responder saliendo de casa y dando un azotón de puerta, recordé que no tenía dinero así que furiosa regresé a casa y me encerré en mi habitación; ni siquiera quise decirle una palabra a papá cuando pasé frente a él.

Como a mediodía marqué a Serena para avisarle que ya no podría verla, sin embargo no pude comunicarme con ella así que no tuve de otra más que llamar a papá lo siento Rei, tampoco tengo para seguir pagando tu línea; tendrás que usar otra.

No me puedes fastidiar la vida de ésa manera, dices que yo tengo que hacer sacrificios pero no he visto que tú hagas ninguno. Al oírme contestó crees que no he hecho ningún sacrificio, acabo de vender el coche que tu madre me regaló.

Ése para mí ha sido un sacrificio enorme, tu mamá me dio ése auto poco antes que muriera, dijo que con él siempre la recordaría; así que no digas que no he hecho nada cuando me acabo de deshacer del último recuerdo de tu madre quedé en silencio cuando papá salió de la habitación.

Ahora sabía porqué le tenía tanto aprecio a ése auto, siempre decía que era su posesión material más importante pero nunca supe que era un regalo de mamá. Entonces comprendí lo que había hecho y me hice la promesa que sólo por eso haría el enorme sacrificio de asistir a la Preparatoria Juuban.

Al día siguiente empezaría una nueva vida para mí, pero no sabía cuánto iba a cambiar de entonces en adelante.