Azul [Gojo Satoru X Suguru Geto] [SatoSugu]

Capítulo 10: Cuenta Regresiva.

"¿Qué?"

"Luego de esa acalorada discusión que tuvimos, me entró una especie de duda al respecto también, sobre como llegaste aquí, tengo una teoría y todas mis teorías siempre son acertadas, soy genial ¿Qué te puedo decir?"

Rodando los ojos, se inclinó un poco más hacia adelante, con sus manos juntas en apoyo, lo miró con curiosidad "¿Cuál es tu teoría?"

"Bueno, considerando que hace poco acabamos de aceptar que no éramos los que queríamos, tu deseabas mucho verme ¿No es así?"

Con las mejillas un tanto rojas, desvió la mirada "¿Eso que tiene que ver?"

"Pues, me pasó algo similar"

Suguru abrió los ojos muy sorprendido, inclinando la cabeza hacia un lado, no encontró mentiras en los ojos azules del otro, únicamente un mar azul de esos que te ahogan y te arrastran desde la orilla.

"¿Es así?"

"En este mundo, la hechicería es todo y todo es hechicería, aquellos usuarios con poder maldito, basta con desear algo con todas sus fuerzas para provocar una reacción adversa como consecuencia. Básicamente, es como pedir un deseo a una estrella fugaz y que se te cumpla, lo mismo sucede con los cumpleaños. Aunque esto último se debe a la creencia mística que tienen las personas y sus supersticiones, son las maldiciones encargadas del control de eso. Pero no quiero pasarme a las ramas, lo que digo es, que soy extremadamente poderoso... Y te maldije"

El gato negro hizo una pausa en su concentración, procesó aquellas palabras tratando de que no sean más confusas de lo que ya eran, parpadeó un par de veces y luego inclinó la cabeza "¿Me maldijiste?"

"Así es, verás, no se puede traer muertos de regreso a la vida, va en contra de todo principio y norma de hechicería, todos aquellos capaces de hacerlo, se llaman nigromantes, pero, el cuerpo que traen a la vida, está sometido a un contrato que deberá cumplir con el invocador. Hay muy pocos usuarios de este ritual maldito, hace exactamente veintidós años que no han habido registros"

"Tenías seis años en ese entonces ¿Tiene que ver con esa historia de que casi te matan?"

"Bueno, no es como que lo recuerde del todo, pero aquí me ves, soy el más fuerte"

"Continúa"

El albino se cruzó de brazos inclinando su dedo índice directo al pecho del pelinegro, tarareando "Como tampoco puedo revivir muertos, mis profundos deseos incluyendo los tuyos, tuvieron una especie de convergencia al probablemente ser mundos paralelos, dije en voz alta que quería que estuvieras de regreso y es básicamente lo que sucedió. Fui capaz de maldecirte y ahora, estás aquí"

"¿Cuál es la solución a eso?"

"Romper la maldición"

La pequeña campana de orden sonó y una voz femenina dijo el código de turno, Satoru le arrebató el ticket y corrió en busca de sus órdenes.

Suguru quedó estático tratando de asimilarlo, si la teoría era cierta, entonces realmente podría volver si la maldición se rompía, pero ¿Cómo? ¿Cuánto tiempo tomaría? Satoru volvió con la comida, colocando la bandeja con cuidado sobre la mesa.

"Entonces ¿Qué te parece? No suena muy descabellado ¿Verdad? Solo que aún no se, porqué viniste tu, no eres ese Suguru Geto, pero tampoco cuestiono las capacidades de mi maldición"

"Si la maldición se puede romper ¿Cuánto tiempo te tomaría?"

"No tengo ni la más mínima idea, pero para romper la maldición, primero tengo que aceptar que jamás volverá, que nunca nos volveremos a ver"