Azul [Gojo Satoru X Suguru Geto] [SatoSugu]

Capítulo 17: El Otro Suguru

La mandíbula del albino se tensó tan pronto escuchó aquellas palabras. ¿Siquiera podía considerar la posibilidad de ello? Que el otro Suguru siguiera con vida implicaba demasiado, pero estaba seguro de que el mismo lo asesinó esa vez... En el desfile maldito.

—¿Qué? —Shoko fue la primera en romper el silencio sepulcral que se había formado tan pronto había pronunciado esas palabras.

Suguru soltó un suspiro apoyando sus manos en la camilla metálica de Shoko, su mirada inevitablemente se dirigió al más alto de los tres, que contemplaba al parecer su propia existencia en el silencio de su disociación. No podía adivinar la expresión que tendría, la venda dificultaba siquiera poder predecir como acostumbraba las reacciones del más alto.

—Por eso, pregunté lo del Nigromante... —Dijo tratando de poner su mano en el hombro del albino, pero fue imposible siquiera. Disimuló su mueca de disgusto y miró a la mujer casi tan perturbada como Satoru —Se perfectamente lo que sucedió en el desfile maldito, también se que Gojo Satoru fue el encargado de matar a Suguru Geto. Sin embargo aquí estoy hablando con ustedes ¿Por qué sería tan descabellado que el otro siguiera con vida?

Satoru dio un golpe en la mesa metálica que hizo que el silencio volviera —Porque yo mismo lo asesiné, yo lo enterré, yo...

—Aún así, no es tan loco. Que alguien haya profanado su tumba... ¿Qué sabes exactamente Suguru? —Dijo la castaña tratando de calmar la creciente rabia que subía en el más alto.

Los puños apretados del hechicero más fuerte no pasaron desapercibidos por ninguno de los que ahí estaban.
El pelinegro ni siquiera sabía que decirle, sabía perfectamente que solo era el reemplazo del real, aún así dolía siquiera tratar de ver la reacción del contrario.

—Hace poco, me infiltré en la oficina de Yaga, encontré unos informes sobre absolutamente todo lo relacionado conmigo... Con él. La masacre de todo un pueblo, el desfile, el accidente de Yuta, mi... Su muerte, mi repentina llegada, mi falta de energía maldita, mi presunta amnesia—Dijo soltando un suspiro mientras hacía el típico ademán que solía hacer en secundaria, su pulgar invertido contra su frente. La situación lo tenía estresado y algunas cosas simplemente no se iban.

Dio un respingo cuando sintió la mano de Satoru sujetarlo con fuerza, el albino simplemente lo soltó luego de decir que no hiciera algo como eso otra vez. Soltó una pequeña risa amarga mientras asentía y al mismo tiempo se disculpaba.

—Pero, había en el informe algo más, la posibilidad de que Suguru Geto, siguiera con vida. La supuesta colaboración de un humano con maldiciones de grado especial que pueden comunicarse con nosotros, uno con forma de volcan, otro con apariencia humana, una capaz de controlar las plantas, otro que parece un pulpo y uno... Encontré imágenes de mi o al menos eso creo, reconocería mi nariz donde fuera, incluso con una capucha puesta.

El albino salió apresurado caminando con toda prisa en dirección al instituto, tenía que encontrar al director en cuestión. Las venas de su cuello se marcaban y a eso sumaba la microexpresión que tenía en su boca al fruncirla ligeramente.

Si Suguru estaba vivo... ¿Porqué demonios no le habían dicho nada? ¿Mantenerlo oculto? Él fue el que finalmente le dio un alto a todo eso, manchó sus manos con la sangre de su mejor amigo y todo para que al final ¿Información tan valiosa como esa se fuera al demonio?

Ni siquiera pudo avanzar más ni usar su teletransportación, el pelinegro se puso al frente mirándolo de aquella forma que sabía se avecinaba un regaño, quiso rodearlo pero Suguru nuevamente se puso en frente —¿Quieres que me maten de nuevo?

Eso lo detuvo, bajó su venda mirándolo con incredulidad ¿se lo decía enserio? Quiso abrir la boca pero tan pronto lo hizo, Suguru le lanzó su celular encendido, con una imagen en él <<Ejecutar al hechicero de grado especial, Suguru Geto>> —La orden sigue ahí, me confunden claramente con un muerto ¿No te parece que moriré si se enteran que se lo que hacen? A los altos mandos nunca les interesó la paz Satoru, nunca se trató de la razón. Lo sabes. Piensas ir con Yaga ¿Para que? Los altos mandos ¿Para qué? ¿Dialogar? ¿Cuestionar?