Capítulo 24: Un Nuevo Comienzo Juntos

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Ha pasado un tiempo desde que Jack se graduó, y ahora, con el dinero suficiente, se dispone a mudarse con Azumi a su propio hogar. Empacan sus pertenencias mientras reflexionan sobre los momentos vividos en ese lugar.

Azumi: Es genial que podamos tener nuestra propia casa.

Jack: Sí, estoy emocionado. Aunque aquí vivimos muchas cosas interesantes.

Azumi: Pero es hora de hacer nuestro propio hogar.

La madre de Jack toca la puerta mientras recoge sus cosas.

Madre: ¿Con quién hablas, hijo?

Jack: Estoy hablando por teléfono. Luego te llamo.

Madre: Pasa, mamá.

La madre entra y ve la habitación casi vacía.

Madre: Nunca pensé que te irías tan rápido.

Jack: No me voy del país ni de la ciudad, mamá. Siempre podrás visitarme.

Madre: ¿Estás seguro de que quieres irte? Estarás solo en tu nuevo hogar.

Jack: No estaré solo. Siempre tendré compañía a mi lado.

Azumi aparece detrás de la madre.

Madre: Bueno, pero extrañaré no verte por las mañanas.

Jack: También te visitaré más seguido. Es una promesa.

La madre abraza a Jack antes de salir y preparar el almuerzo. Más tarde, Jack y Azumi se dirigen a su nuevo hogar.

Azumi: ¿Aquí vamos a vivir?

Jack: Sí, ¿quieres ver la habitación?

Azumi: ¡Sí!

Suben y descubren una amplia habitación con una gran cama.

Azumi: Mira la cama.

Azumi se lanza sobre la cama para probarla.

Azumi: Es muy grande.

Jack se une a ella.

Jack: Y cómoda.

Azumi: Sí.

Mientras se miran, Jack acaricia el rostro de Azumi.

Jack: Te ves hermosa.

Azumi: No lo soy, al menos no según los demás.

Jack: Porque no te conocen como yo. Sé que eres hermosa.

Ambos se acercan y comparten un apasionado beso. La atmósfera se carga de deseo y afecto, y comienzan a abrazarse.

Azumi: Te amo.

Jack: Yo también te amo.

La pasión crece, pero alguien toca la puerta. Aunque intentan ignorarlo, finalmente Jack decide abrir.

Jack: Si no abro, seguirán molestando.

Azumi: Sí.

Jack: Lo siento.

Jack se levanta y va a ver quién está tocando, dejando a Azumi sola en la cama.

Azumi: Diablos, estuve a punto. Será para otra ocasión.

Azumi lame sus labios.

Azumi: Pero sus labios me tienen loca. Lo adoro, lo amo.

El Legado Del Amor EternoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora