𝔉𝔞𝔱𝔢 -𝔈𝔫𝔥𝔶𝔭𝔢𝔫

𝕿𝖆𝖒𝖊𝖉 -𝕯𝖆𝖘𝖍𝖊𝖉

Songhyeon tenía la mirada perdida en la ventana de su habitación, su mente divaga por los recuerdos de aquel sueño extraño que tuvo la noche anterior. Esa mujer de cabello pelinegro con un deslumbrante brillo en sus ojos azules, había vuelto a aparecer con una mirada preocupada junto a las palabras que decía mientras la tomaba de la mano corriendo en un pasillo oscuro. Podía notar como la mujer estaba aterrada y parecía escapar de algo mucho más fuerte que ella.

«El tiempo se agota, la tragedia no puede volver a ocurrir...»

«No dejes que el tome el control de esta dimensión, debes proteger al altar, antes de que sea demasiado tarde..»

Mientras decía todo eso vio como algo se abría en el aire del lugar, como un portal o una luz cegadora que la envolvía. La mujer pelinegra le indico unas palabras que no pudo escuchar para luego enviarla hacia dentro de ella, lo último que pudo ver fue como está era consumida por una densa niebla negra. Cuando despertó estaba tirada en el suelo del bosque, sin saber  cómo regresar. Así caminó por horas con el cuerpo adolorido hasta que encontró la mansión cerca de ahí, trato de pasar desapercibida, pero no contaba con que ya alguien la había esperado frente a la puerta de su habitación.

— ¿Qué haces aquí?— La castaña pregunta al ver quién estaba frente a ella.

El chico suspiró pesadamente para luego avanzar hacia la menor y le dió un pequeño golpe en la cabeza.

— ¿Dónde has estado?— El pelinegro mostraba cierta preocupación al ver a Songhyeon— ¿Sabes lo que preocupado que estaba?

La menor encara una ceja con el rostro divertido, aunque todavía seguía muy débil no iba evitar que sonriera un poco.

— Así que el solitario Park Sunghoon se preocupo por mí— Se rió causando que Park terminará por sonrojarse por la vergüenza— Que dulce de tu parte, pero estoy bien, no tenías por qué preocuparte.

Park la analizó de arriba a bajo— Esos rasguños no dicen lo mismo Songhyeon—Se acerca a ella y empieza a revisar sus heridas— ¿Dónde estuviste para acerte este tipo de heridas?

Songhyeon no dijo nada  solo atino a perder su mirada en otra dirección, ni ella misma sabia como había llegado a el bosque o que significaban los sueños con esa mujer. Todo era tan confuso y estresante para ella.

Lo peor tenia miedo a contarles algo a los chicos, tenia temor a que no solo fueran simples sueños y terminara siendo la realidad. Que ella terminara perdiéndose en un abismo sin alternativa de escapar.

Park al ver su comportar decidió no preguntar más y abrazarla como un calmante para el mismo.

La castaña al no esperar esa acción, termino con los ojos muy sorprendida, no sabiendo como reaccionar. Parecía que le tiempo se había parado y en eso un recuerdo llegó.

«¿Qué es lo que haces Sunghoon?» Una joven añiñada de unos 15 años preguntaba entrelos brazos del joven aprendiz de caballero.

«No, no, no quiero. No puedo permitir que te hagan daño, me niego» Sunghoon la apretaba contra su pecho sin querer soltarla.

Estaban en una habitación antigua y muy hermosa, con grandes decoraciones y lujos. No había nadie más que ellos dos solos.

La dulce niña no tuvo de otra que suspirar y forzar a levantar la cabeza y tomar la mejilla del contrario—Sunghoon, mírame todo estará bien. No me harán daño, solo tengo que tomar un nuevo tratamiento para controlar mis poderes.

Al terminar ese borroso recuerdo sintió un leve mareo agarrándose fuerte de Park, confundiendolo en demasía. Al verla de esa manera no pudo evitar preocupaciones.

—Songhyeon, hey, reacciona— Trato de hacer que reaccione, pero al ver como se desvanecía en sus brazos no pudo evitar alterarse— Hey, Hyeon...¡Heeseung hyung, Jay-ah!

No tuvo otra alternativa que llamar a los mayores que al escucharlo no duraron en llegar corriendo encontradose con Sunghoon con la castaña entre sus brazos mientras la cargaba.

Heeseung fue el más rápido en reaccionar— ¿Qué fue lo que sucedió?

— No lo sé, estábamos hablando hasta que se puso algo extraña y luego terminó desvaneciéndose, hyung creo que recordó algo, pero no sé qué es— Se dirige a Heeseung preocupado.

Jay viendo todo decide intervenir— Primero cálmate Hoon, segundo hyung creo que es necesario de que mires sus recuerdos o entres a su mente, para ver lo que sucedió.

Lee suspira y asiente— Primero necesito que la dejes sobre su cama, parace estar muy cansada algo debe de haber apsado sin que lo supieramos— Ordena a lo que el peinegro acepta.

Los tres vampiros se adentran a la habitación de la castaña dejándola sobre su cama. Seguido de ésto Heeseung se acerca y pone su palma cálida en la frente de la menor con los ojos cerrados para concentrarse mejor.

Cuando los vuelve a abrir su conciencia estaba en los recuerdos de Hyeon. Dónde todo pasaba como una película hasta que llega el momento donde ve algo inesperado que nunca pensó ver.

Ahí estaba ella...tan deslumbrante y linda como siempre, con aquel vestido blanco y el cabello lleno de flores sus ojos castaños estaban apagado en tristeza, su cabello hecho un desastre su rostro lleno de lágrimas, el vestido roto y destrosado, frente a ella estaba aquella princesa que amo y ama hasta la actualidad. Solo que está trataba de consolar a la castaña mientras que ella lloraba al ver a sus caballeros con heridas en el suelo.Mientras una aura blanca muy poderosa las rodeaba, atormentando la cuando se volvio en oscuridad.

Ahí es donde comprendió todo Songhyeon era atormentada por su magia, por aquel poder que consumia su energia vital y todo su alma, aquel poder que llego a matarla en el pasado...