Capítulo Diez.

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CAPÍTULO DIEZ:
El puma ha muerto.

Derek tomó mi mano, subió rápidamente las escaleras y nos metió en una habitación donde nos quedamos en silencio, y muy pegados, pegó mi espalda a la pared y tuve que levantar la cabeza para concentrarme en sus ojos y no en su torso desnudo rozand...

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Derek tomó mi mano, subió rápidamente las escaleras y nos metió en una habitación donde nos quedamos en silencio, y muy pegados, pegó mi espalda a la pared y tuve que levantar la cabeza para concentrarme en sus ojos y no en su torso desnudo rozando el mío.

Lamentablemente reconocí uno de los olores y mi pulso se aceleró llamando la atención del hombre lobo, Derek me dió una mirada entre curiosa y preocupada, de seguro olió mi miedo y ansiedad.

-¿Hay alguien en casa?- preguntó uno de los cazadores.

-Sí..está aquí.- afirmó una de las personas más detestables que conozco, inconscientemente tomé los brazos de Derek.- Pero no se siente muy hospitalario.

-Tal vez está afuera.- dice divertido un tercer cazador.- Enterrando un hueso en el patio.

-¿En serio? ¿Una broma de perro?- preguntó Kate Argent.- ¿Vinimos aquí y es lo mejor que tienes? Si quieres provocarlo di algo como...Qué lástima que tu hermana murió antes de que pudiera morder.- sentí a Derek tensarse y busqué su mirada negando con la cabeza, dando caricias con mis dedos en sus brazos para relajarlo.- ¡Qué lastima que lloró como una cobarde cuando la mutilamos!- no aguantó más y se convirtió con un rugido y salió del escondite.

Escuché el grito de uno de los cazadores seguido de un golpe, volvió a rugir y se escuchó otro golpe, supongo que noqueó a los dos cazadores hombres.

-Wow, creciste con muy buena forma.- como odio a esa mujer, en serio. Puedo escuchar a Derek quejarse de dolor.- No sé si deba aniquilarte...o acariciarte.- gruñí molesta, realmente no la soporto, hasta su olor se me hace repugnante.

Bajé despacio y tratando de no hacer ruido, saqué mis garras en caso de que deba enfrentarla. Me asomé y vi a Derek arrastrarse por el suelo y cuando llegó a un sillón la bruja Argent volvió a electrucutarlo, volví a esconderme tratando de relajarme, si pierdo el control de mi transformación no podré ayudar en nada, pero la risa de Kate solo me hace enojar más. Volví a asomarme.

-900.000 voltios.- se deleitó viendo su arma.- Nunca fuiste bueno con la electricidad, ni con el fuego.- se burló, juro que la mato.- Por eso te haré saber un secreto, y quizá podamos ayudarnos.- no me gusta lo cerca que está del hombre lobo.- Sí, tu hermana fue cortada en pedazos y fue usada como anzuelo para atraparte. Desagradable. Y honestamente parecido...a la masacre de Texas para mi gusto.- Derek alcanzó a verme y negó con discreción.- Pero es cierto. Ahora, esta es la parte que tal vez te haga enojar.- le habla como si fuera un niño pequeño.- No la asesinamos. ¿Crees que miento?

-No sería la primera vez.- le contesta, él emana un olor a tristeza y traición.

"¿Qué pasó entre estos dos?" Pensé asomándome un poco más aprovechando que Kate me da la espalda.

Metanoia (Teen Wolf)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora