La Oportunidad De Rhaenyra

Capítulo 11

Melissandre obsevaba los cuatro niños con curiosidad, Jacerys un niño tranquilo y amable, su gemela Visenya era todo lo contrario inquieta y caótica como solo podía ser la reina dragón, Lucerys un niño alegre y conversador mientras que Daenerys tímida y cariñosa.

Era asombroso como la crianza cambiaba a los niños, su escencia estaba allí pero su educación era diferente, Visenya seguía siendo tal cual era en su pasado solo que más amable con sus hermanos y hasta cariñosa mientras que Daenerys brillaba, alegre, tímida pero conversadora, la niña tenía el buen corazón que en su pasado tenía.

Los entrenamientos eran observados por el rey, Visenya, Jacerys ya entrenaban hace tiempo, la primera mostraba su nata habilidad con la espada mientras su hermano aprendía acorde un niño de su edad, Ser Harwin se encargaba de enseñarle a los niños lo que Ser Criston no hacia, mientras que Aegon, Aemond y Daeron eran instruidos por el escudo juramentado de su madre.

Al terminar los entrenamientos cada niño se ducho y vistio para sus clases con el maestre quien los esperaba impacientemente, Daeron, Visenya y Jacerys compartían clases ya que tenían la misma edad mientras que solo Daenerys y Lucerys tenían su compañía los demás estudiaban aparte.

-Madre entro en parto- informo Jace- Falta para que el bebé nazca

-Vamos

Visenya se metió por los pasadizos secretos seguida de su hermano, al pasar el tiempo se sabían todos los caminos de memoria por lo que no fue un problema llegar hasta la habitación de su madre y apoyar sus orejas en la puerta.

-Debe mantener la calma Princesa

-¿calma? Mis hijos pueden morir perra... Laenor quiero que encuentres al culpable

-No dudes que lo haré Nyra... iré por los niños y los dejaré a salvó

-Los niños- Rhaenyra dijo en voz alta- ¿Y si también fueron envenenados?

Jace y Visenya se miraron unos segundos antes de salir corriendo lo más rápido que se les permitían, sin importar protocolos o interrumpir algo importante entraron a la sala del maestre donde sus hermanos estaban allí.

-¿Están bien?- pregunto Jace abrazando a Dany y a Luke- ¿Se sienten bien?

-Si Jace ¿que paso?- pregunto Luke confundido- Estoy aburrido pero no es un problema para los adultos

-Debemos irnos ahora- ordeno Visenya

-¿por qué?- pregunto Daenerys

-Principes han interrumpido la enseñanza de los príncipes

-Esto es más importante que su inútil enseñanza- gruño Visenya- Vamos

Los cuatro niños fueron encontrados por Laenor en los aposentos de Visenya, el joven Velaryon noto que sus niños mayores sabían lo que sucedía y habían alejado a sus hermanos, no pudo evitar sonrier con orgullo al ver lo protectores que eran.

-Padre- Luke se levantó- ¿podemos ir a la fosa?

-Los bebes necesitan un huevo- afirmó Daenerys también levantándose

-¿Podemos padre?- pregunto Jace- Yo cuidare de mis hermanos

-Si... si pueden... Ser Harwin los acompañará y deben obedecerlo

Tanto Jace como Visenya hicieron una mueca y no porque no les agradará Ser Harwin sino porque ya habían oído de los rumores que corrían por la fortaleza, había una pequeña posibilidad de el sea su padre y eso los incomodaba en especial por el insulto que representaba.

Al llegar a la fosa los cuatro niños se dirigieron a la cueva de Syrax donde había puesto una nuevo nido, con cuidado de no molestar ni irritar a la dragona de su madre tomaron los tres huevos de dragon y se retiraron lo más rápido posible.

-No le digas a Aemond que hay tres- ordeno Luke- Vamos a darle una sorpresa

-Si por favor- pidió Dany- Un dragón es lo que más desea y si lo sorprendemos se podrá feliz

-Esta bien- cedió Jace- guardenlo bien

Al llegar a la fortaleza lo primero que hicieron fue intentar ver a su madre pero no sé lo permitieron por lo que los cuatro niños de dedicaron a preparar la sorpresa para Aemond quien estaba muy desilusionado al enterarse que solo dos huevos de dragon salieron de la fosa.

-¿que es eso?- les pregunto Viserys

La familia se encontraba en el pasillo esperando respuestas de los maestres, el rey, la reina y sus hijos estaban allí, los niños Velaryon caminaban hacia ellos llevando una caja de madera entre los cuatro.

-Una sorpresa para Aemond- informo Luke-  Espero te guste

-Lo elegimos especialmente para ti- Daenerys sonrio emocionada

Aemond se acercó a la caja y la abrió con desconfianza al principio, al ver el contenido en el interior de la caja estuvo a punto de llorar, allí había un huevo de dragón color celeste, con emoción lo tomo en sus manos y lo abrazo.

-Gracias

Con un brazo rodeaba el huevo y con el otro abrazo uno a uno a sus sobrinos los cuales devolvieron el gesto emocionados

-¿Te gustó?- pregunto Daenerys negandose a su lado

-Si... Gracias

-Fue muy amable de su parte- afirmó la reina entre dientes

-¿No habían salido solo dos huevos de dragon?- pregunto Viserys confundído

-Mentimos- admitió Visenya

-Queriamos sorprender a Aemond- afirmó Jace al ver la mirada asesina de la reina

-La desilusión valió la pena- afirmó Aemond

-Debes ponerlo en un lugar caliente- Jace hablo- El de nuestros hermanitos ya se está calentando y para el tuyo está en tus aposentos

-Ire a llevarlo

-¿Puedo ir?- pregunto Luke- ¿que tal si lo llamas Boash? Cómo

-Luke es grosero ponerle nombre a un dragón que no es tuyo- regaño Jace

-Esta bien... Los bebés seguro me harán caso... Vamos Mond

Cuando ambos principes volvieron, Rhaenyra aún no había dado a luz, el cansancio comenzaba a invadir a los príncipes tras la larga espera, fue Aegon el primero en darse cuenta lo que sucedía, miro fijamente a su sobrina mayor, los ojos de Visenya sangraban al igual que su nariz

-¿Visenya?- al llamarla la niña levantó la cabeza antes de cerrar sus ojos y tambalearse en su lugar, rápidamente Aegon la sostuvo antes que callera, Aemond sostuvo a Daenerys mientras que a Luke lo sostuvo de su ropa y a Jace atrapaba Helaena.

-GUARDIAS

El rey grito al ver a sus cuatro nietos desmayarse, todos bajo la misma condición, ojos y nariz sangrando

-BUSQUEN A LOS CUASANTES DE ESTO