10[𝐔𝐧𝐚 𝐏𝐢𝐳𝐜𝐚 𝐃𝐞 𝐒𝐮𝐞𝐫𝐭𝐞] pt.1

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La omega consumó la acción, meticulosamente, ingirió las pastillas una a una. Con cada instante que transcurría, experimentaba una creciente sensación de mareo, acompañada de una pérdida gradual de aliento. A pesar de ello, esbozaba una sonrisa, consciente de que este momento podría finalmente ser considerado como un tan anhelado descanso, uno que había ansiado durante años.

Cuando finalmente yacía en el suelo, Lisa se encontraba en un estado liminal entre la vida y la muerte, mientras nadie advertía su situación. Experimentaba una intensa sensación de dolor, sin embargo, su felicidad era palpable. En ese instante, vislumbraba la posibilidad de encontrar paz, tanto con los demás como, y aún más crucial, consigo misma.

—¿Hola?, escuché un ruido y vine a ver...—¡Oh, Dios mío! ¡Niña, niña, estás bien!—Un estudiante de séptimo grado, que pasaba por la biblioteca, escuchó el estruendo cuando Lisa cayó al suelo. —Espera aquí, buscaré ayuda—dijo mientras ponía su cabeza suavemente en el suelo y salía gritando sin control por los pasillos. No pasaron muchos minutos antes de que profesores y enfermeros llegaran al lugar. Lisa yacía morada y desmayada, los enfermeros del instituto la trasladaron rápidamente a la ambulancia designada para llevarla al hospital más cercano.

En el ambiente rumoroso de un instituto, los chismes se propagan con rapidez. El reciente escándalo del joven generó un alboroto entre los estudiantes, quienes comentaban el suceso. La partida de la ambulancia despertó preocupación en muchos, hasta que la noticia llegó a los oídos de Jennie de la manera más desafortunada.

—Eres es una persona de mierda¡ te detesto—Rosé llegó furiosa al lugar donde Jennie estaba leyendo un libro tranquilamente. Su novio, Jiyong, se había ido a comprar algunas cosas al restaurante, y probablemente él también se había enterado de la situación. Jennie, sorprendida, vio cómo Rosé se abalanzaba sobre ella, propinándole golpes repetidos que, con dolor, trataba de esquivar. Jennie estaba asustada, sintiendo miedo, y comenzó a gritar de dolor. Varios estudiantes acudieron al lugar y separaron a Rosé de ella, quien aún estaba furiosa. Jennie estaba sumamente lastimada; su labio inferior sangraba, al igual que su nariz, y su ojo izquierdo empezaba a mostrar signos de morado.

—¿Qué demonios te pasa, idiota? ¡¿Por qué me golpeas?!—La alfa expresó visiblemente alterada.

—Para que lo sepas, Lisa intentó poner fin a su vida. Para que lo sepas, estaba tan triste y sola, y tú, como su mejor amiga, deberías haber estado allí para ella. Pero no, solo te preocupaba estar chupandole la polla a tu novio Jiyong. Mientras Lisa se apagaba lentamente,—¿qué tipo de amiga eres, imbecilidad total?— Roseanne gritó todo esto, observando cómo la expresión de Jennie cambiaba de enojada a asustada y preocupada.

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—¿Qué le pasó a Lisa?—Los ojos de Jennie adquirieron un tono rojo sangre, señal inequívoca de que la situación no era para nada buena. Su mirada, llena de temor, indicaba que estaba a punto de desencadenar su furia. Los colmillos y garras de Jennie se hicieron visibles mientras Roseanne, como alfa, también manifestaba estas transformaciones, aunque sus ojos adquirieron un tono rosa brillante.

—¡¿Dónde está Lisa?!— Jennie exigió con furia. Se abalanzó contra Roseanne con intenciones de golpearla, mientras los estudiantes emitían gritos desgarradores al presenciar la escena.

En un instante, la tensión en el aire se volvió palpable, las miradas desafiantes de Jennie y Roseanne convergieron en un enfrentamiento inminente. Los ojos de Jennie centelleaban con un rojo profundo, reflejando la furia que ardía en su interior. Mientras tanto, los iris de Roseanne resplandecían en un tono rosa vibrante, señal de su condición alfa.

—¿Qué le pasó a Lisa?—gritó Jennie con una mezcla de desesperación y furia, sus colmillos y garras resaltando su transformación. Roseanne, sin retroceder, respondió en un tono desafiante, —¿Enserio te importa ahora?—

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La explosión de violencia fue inevitable. Jennie se lanzó hacia Roseanne con una velocidad asombrosa, desatando una serie de golpes certeros. Roseanne, hábilmente, esquivaba algunos y respondía con movimientos ágiles propios de su estatus alfa. Los sonidos de colisiones y gruñidos llenaron el espacio, mientras los estudiantes observaban horrorizados.

La ferocidad de la pelea se intensificó con cada momento. Jennie, alimentada por la ira y la preocupación por su amiga, canalizaba su energía en cada golpe. Mientras tanto, Roseanne, con astucia y fuerza alfa, no se dejaba vencer fácilmente. La sala vibraba con la energía de su enfrentamiento.

Los testigos, aterrorizados, no podían apartar la mirada de la contienda. Gritos y exclamaciones llenaban el espacio, creando un caos de emociones. La lucha continuó, una danza caótica de fuerza y agilidad, hasta que finalmente, agotadas, las dos figuras se separaron, respirando agitadamente.

La habitación quedó en silencio, el eco de la pelea aún resonaba en el aire. Los ojos ardientes de Jennie y los destellos rosa de Roseanne reflejaban la tensión que persistía, dejando a todos preguntándose sobre las consecuencias de esa encarnizada batalla.

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Ambas contendientes se encontraban visiblemente heridas, si bien Jennie aún mantenía su resistencia. Con su último aliento, procuró transformarse en lobo para rastrear el aroma de Lisa y localizar el hospital donde se encontraba. Ejecutó la tarea con precisión, siguiendo el rastro olfativo a la perfección, hasta llegar a su destino. Una vez allí, volvió a su forma humana, notando que sus heridas habían sido curadas gracias a su capacidad lobo.

Al adentrarse en el hospital, solicitó información acerca de Lisa Manobal. Le indicaron que ocupaba una habitación en el tercer piso, por lo que se encaminó hacia allí. Al entrar, su corazón se partió en dos al presenciar la situación que le aguardaba.

—Lilie?...

『𝐓𝐃𝐀𝐇」 -Jenlisa-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora