19[¿𝐐𝐔𝐈𝐄𝐍 𝐄𝐒 𝐋𝐈𝐒𝐀?]

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(Pov Jennie)

No me considero alguien fácilmente enamorable, mucho menos en solo unas semanas. Había alguien que me gustaba, al menos eso creía. Pero ahora estoy conociendo a Kai, y en general las cosas han ido relativamente bien. No recordaba ni siquiera a Lisa... ¿espera, quién es Lisa? Ah, sí, Lisa. ¿Por qué cada cosa que hace Kai me recuerda a ella? Su risa estridente, la forma en que se sienta, cómo habla... había detalles que me recordaban a ella, a mi Lili.

Todo se sentía tan extraño, incluso mi lobo interior estaba confundido. Poco a poco me estaba distanciando de él, ¿por qué? ¿Por qué me estaba alejando de mi destinada, de Lisa? Esa conexión que se suponía era profunda y eterna, ahora se desvanecía como humo entre mis manos.

Cada día era una lucha interna, tratando de entender por qué mis sentimientos estaban cambiando, por qué mi corazón ya no latía con la misma intensidad cuando pensaba en Lisa. ¿Era culpa de Kai y su sutil influencia en mí? ¿O era algo más profundo, algo que estaba en mi propio ser y que había estado ignorando durante demasiado tiempo?

Me sentía atrapada entre el deseo de mantener la lealtad a mi destinada y la confusión de mis propios sentimientos cambiantes. Era como si estuviera perdiendo una parte de mí misma, y no sabía cómo detenerlo.

Me preguntaba si Lisa sentía lo mismo que yo. La veía tan feliz junto a Roseanne, y eso me llenaba de celos y deseo de alejarla de todo, de tenerla solo para mí. Pero ¿y si lo de kai no era verdad? ¿Y si solo era un amor de verano, algo efímero que se desvanecería cuando volviéramos a casa?

La incertidumbre me carcomía por dentro. ¿Seguiríamos siendo iguales cuando regresáramos, o al menos eso era lo que esperaba? ¿O todo cambiaría, llevándonos por caminos separados? No podía evitar sentir una mezcla de ansiedad y anticipación por lo que depararía el futuro.

𓆉𓆝 𓆟 𓆞 𓆝 𓆟𓇼𓆉𓆝 𓆟 𓆞 𓆝 𓆟𓇼𓆉𓆝 𓆟 𓆞 𓆝 𓆟𓇼

Llevo más de una semana en este campamento de verano y no fue tan aburrido como pensaba. Aprendí a hacer pan, a espantar osos y a atar nudos perfectos. Conocí a un montón de gente nueva, incluyendo a Kai. Es súper atractivo, listo y divertido, me recuerda mucho a Jiyong. No tendría ningún problema en salir con él después del campamento. Sé que le llamo la atención, aunque sea un poquito.

Yo estaba en la cabaña 1-O14, una de las más locas, porque ahí estaban unos tipos que, wow, volvieron este campamento loco una vez. Mingyu era mi gran amigo que conocí aquí. Él era el rey de la Cabaña O14, así que de alguna manera me convenía ser su amiga.

¡Estuvo brutal hoy! No siento mis brazos y mucho menos mis piernas, remamos en kayak en el río y llegamos todos exhaustos, excepto Mingyu que ya estaba pensando en gastarles una broma a los de las cabañas F-12, nuestros "enemigos" porque siempre son los favoritos. Su plan era esparcir basura alrededor de todas sus cabañas con la ayuda de Yoongi, un amigo alfa que es aún más travieso que Mingyu. Él es la mente maestra detrás de todas sus locuras.

No quería que les hicieran esa broma porque Kai es el líder de esa cabaña y a el le tocara pagar los platos rotos, él es súper tranquilo. Mi chico no se merecía eso.

¿Mi chico? ¡Acabo de decir eso, ¿verdad? Vaya, se siente genial.

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Bueno, entonces entras tú, Minhyuk, tocas el timbre del líder y Yoongi y yo le tiramos basura por todo el cuerpoMingyu comenzó a reír mientras chocaba los cinco con sus amigos. Yo estaba leyendo en mi cama, y ellos siempre amaban meterse en mi cabaña para molestar, sobre todo porque había una cama vacía. Escuché todo eso, así que decidí avisarle a Kai. Salí por la puerta y los dejé a los tres solos.

Cuando finalmente llegué a la cabaña de Kai, lo encontré sumergido en la lectura de un libro. Ya habíamos entablado una buena relación, así que decidí entrar por la ventana. Me dio mucha gracia ver su reacción cuando puso una mano en su pecho, sobresaltado.

¿Qué haces aquí? Es tardepreguntó, aunque su sonrisa dulce delató que no le molestaba mi visita sorpresa. Yo decidí "mentir", no quería contarle que mis amigos planeaban jugarle una broma.

Es que te extrañé dije con una sonrisa mientras me sentaba en su asiento. La atmósfera era cómoda y familiar, y disfrutaba de esos momentos de intimidad con Kai.

¿En serio? Kai se sonrojó y comenzó a reír. Me acerqué de su asiento a su cama, sentándome a su lado. Él me miraba atento, como si cada parte de mí le fascinara.

Muy en serio, Jongin dije con una voz un tanto seductora, jugando con el tono para añadir un toque de picardía a la conversación.

Kai se quitó sus lentes y se acercaba cada vez más a mis labios. Íbamos a besarnos, a entregarnos a ese momento que parecía tan intenso y prometedor. No podía creerlo, estaba dejándome llevar por la emoción cuando de repente sentimos un golpe bestial en la puerta.

Kai, ¡tenemos una sorpresa!Escuchamos la voz de Yoongi, interrumpiendo el instante que estábamos a punto de compartir. Estoy segura de que cuando salga de aqui, lo voy a matar con mis propias manos.

Me levanté de la cama y fui a abrir la puerta, encontrándome con que Yoongi ya se había marchado, pero sabía que la líder del grupo vendría pronto a verificar que todos estuviéramos en nuestras respectivas cabañas.

Me tengo que ir, ¿hablamos mañana? le pregunté a Kai, mirándolo con una mezcla de anhelo y decepción por la interrupción.

Él me respondió con un dulce sonrisa y se acomodó el cabello antes de asentir.

Sí, mañana hablamos confirmó. Me despedí de él y salí por la ventana, escabulléndome por detrás para no ser vista por la líder ni por nadie más en el camino de regreso a mi cabaña.

Las cosas estaban tan cerca pero a la vez tan lejos, como si el universo conspirara para evitar que eso sucediera, para que Kai y yo no cruzáramos esa línea que parecía tan frágil y tentadora. Cada vez que nos acercábamos, algo nos separaba, ya fuera una interrupción repentina o simplemente el temor a lo desconocido.

Era frustrante sentir esa conexión, esa atracción palpable, y al mismo tiempo tener la sensación de que algo invisible nos mantenía distanciados. Había momentos en los que parecía que el tiempo se detenía y solo éramos Kai y yo, y otros en los que las circunstancias nos recordaban que éramos parte de un mundo con sus propias reglas y limitaciones.

A pesar de todo, la chispa seguía ahí, latente, esperando el momento adecuado para encenderse y consumirnos a ambos en esa llama que tanto anhelábamos pero que, por alguna razón, parecía inalcanzable.

『𝐓𝐃𝐀𝐇」 -Jenlisa-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora