Hasta que mis alas desaparezcan

Capítulo 5- Un pasado juntos.

Me encontraba en mi piso en pijama. Sin muchas ganas de hacer otra cosa que no fuese estar tumbada en el sofá. Oh, querido sofá. En una hora vendrían Lía y Nathan a pasar una tarde de perros, en lo que se basa en estar en mi querido sofá viendo películas o haciendo alguna gilipollez.

Pobre Nathan, lo que tiene que soportar.

Picaron a la puerta y me dirigí a abrirla.

-Hola pedorra- Dijo Lía dándome un sonoro beso en la mejilla- Te has puesto preciosa para mí.

Me río y le hago una señal para que pase. Por no hacer, no me había ni peinado. Al poco rato llega Nathan, tiene cara de dormido por lo que supongo que ayer salió de fiesta y de dormir, poco.

Nos encontrábamos en el salón, sentados sobre la alfombra mirando mis álbumes de fotos. Al principio me había dado corte que Lía propusiera verme de pequeña pero al final me gustó la idea, tengo ganas de ver a papá.

Pasan las fotos y Lía va poniendo caretas y diciendo cosas como '' ¡mira que cosa más mona!''. En el álbum no había nada del otro mundo, fotos mías, fotos con mi padre, con mi hermano, dos contadas con mis padres y mi hermano. Fotos con Nathan de pequeños, para ser sincera no habíamos cambiado mucho, Nathan seguía con cara de no haber roto un plato en su vida y yo con mi misma carota de siempre.

Me levanto y me dirijo a la cocina, todo esto de las fotos me hace entrar morriña. -¿Queréis algo para beber? -Esperaba la respuesta que no llegó- ¿Chicos?- Lía se había quedado callada mirando una foto.

Una de Nathan y Alleck.

Me puse roja al instante, mierda, se supone que esa foto no la tengo. Se la ''robe'' a Nathan ara cosa de medio año, me la imprimí y me la puse en el álbum. Creía que nadie la vería. Mierda que vergüenza.

-Amm....-digo mirando el suelo- ¿queréis algo de beber?

-¿Por qué tienes esa foto?- dijo Nathan muy serio- Se supone que esa foto está hasta borrada.

-La habré cogido de algún sitio- Mentí - ¿Coca-Cola?

Nathan se levantó y se fue. Si, lo oído. Se ha ido de mi casa. Intenté correr hasta donde esta él pero no logré alcanzarlo. ¿Dónde estás Nathan?

Volví a casa y Lía está en el sofá mirando la foto extrañada.

-¿Me lo explicas por favor?- Dice con una sonrisa.

-Claro- Me senté junto a ella.- Nathan y Alleck antes eran ''mejores amigos''. Así fue como conocí a Alleck. Lo eran desde que entraron juntos al equipo de futbol. Salían siempre, se iban de fiesta, se lo contaban todo y me lo presentó. Él la verdad es que no me hizo mucho caso, no se molestó ni en recordar mí nombre. Yo era invisible. Fueron amigos por cuatro o cinco años hasta que Alleck le hizo algo a Nathan. Algo por lo que el ya no quiso volver a juntarse con él, ni dirigirle la palabra.

-¿Y no sabes porque es?- Negué con la cabeza.- Pues habrá que saberlo ¿no?

-Si no me lo ha contado es por algo- Ahora que lo pienso, es verdad. Él lo sabe todo de mí y en cambio no se molestó en contármelo. Estoy ¿enfadada?- bueno, le enviaré un mensaje.

Yo:

Feo, ¿Qué ha pasado? Lo siento por tener esa foto. Eres lo más importante para mí y él...bueno él ya sabes. Me gustó mucho tener una foto de vosotros juntos. Por favor vuelve.

Nathan:

Pequeña, perdón por largarme así. Te debo una explicación, bueno os debo.