Kei Tsukishima y TN Kageyama (paso a paso)

Kageyama Tobio

Mi hermano es curioso. Curioso en el sentido que es la persona más atenta y cálida del mundo pero con otra gente es tan repelente y amargado que parece que no le conociera. Ama el voleibol, le gusta el curry, las magdalenas, la leche de cajita y por más que le diga que es mala para la salud la sigue tomando, le gusta los bentos que le preparo aunque sean bolitas de arroz rellenas de cualquier cosa que pueda poner dentro y los nigiris rellenos de aguacate y cangrejo. El aprecia a Hinata aunque sea un cabeza dura que no lo demuestra.

Cuando tenía 11 años nuestros padres compraron una casa en Tokyo, nosotros pensamos que era para vivir todos allí. Pero fue todo lo contrario, nuestro abuelo Kazuyo cuidó de nosotros hasta los trece. Fueron dos años efímeros, rápidos, irrecordables. Apenas puedo recordar las cenas en familia, solo a mi abuelo entrenando con Tobio y yo preparando la comida, así er nuestra vida, tranquila... pero con una horrible oscuridad.

Tobio siempre ha sido más alto que yo, pero hubo una época donde éramos como Diper y Mabel de Gravity Falls, todo era una continúa pelea y competitividad. Quién sacaba mejores notas, o quién corría más rápido, hubo una vez que después de las clases de natación llegamos casi a las diez de la noche a casa porque nos quedamos a ver quién duraba más tiempo aguantando la respiración bajo el agua. Claramente duró más el, mis problemas cardíacos no me permiten durar mas de minuto y medio.

Hormiguita, ese apodo surgió el día que teníamos una obra de teatro, a él lo habían elegido como el bello príncipe azul y a mi como la fiel hormiga que le daba consejos: "no creo que eso sea correcto señor" - tenía que hablar de manera insegura y chillona, teníamos unos 8 o 9 años, esa obra fue la única que nuestros padres llegaron a ver... Y con ver me refiero a estar los dos primeros actos y al final nos llevaron a comer con unos amigos. Hormiguita, es el apodo que pido al cielo que nunca se le olvide.

Su adolescencia fue algo... dura, cuando perdimos a nuestro abuelo el remordimiento creció de manera preocupante en nuestros corazones, yo me negaba a aceptar que nuestro abuelo de tan solo 78 años había muerto. Solo no era posible. El por otro lado fue todo lo contrario, se volvió serio, frío, cada cosa que yo hiciera le estresaba, por un momento pensé, no, no pensé confirmé dolorosamente de que él me odiaba: "¡para ya tonta! ¡¿Por qué existes?! ¡tu sonrisa es igual a la de él, te odio!" - ese día estábamos en el cementerio visitando a Kazuyo, y en un momento para animarle recordé lo que solíamos hacer en las tardes con el abuelo. Justo en el momento que sonrió para verle su expresión de odio atraviesa mi corazón. Hermanito, dueles, no sabes como duele quererte, pero seguiré a tu lado.

Aparte de la muerte de nuestro abuelo, las chicas le llovían una tras otra, yo en ese momento tenía a Oikawa de novio, y su popularidad con la de Tobio me volvía el centro de atención negativa. Yo no soy celosa, no con mi hermano, pero sé cuando hay que protegerlo. Ahora me acuerdo el día que unas chicas de clase comenzaron a acosarme porque pensaban que era novia de Tobio y Toruu a la vez, recuerdo los días dónde jalaban de mi cabello y golpeaban mis piernas con piedras. El dolor que me causaban era tan poco, no me importaba, todo era mentira. Todo era mentira.

Los días que Oikawa venía a cenar solíamos, casi siempre, dormir juntos los tres en la sala, Tobio en el sofá y nosotros en el suelo abrazados, Toruu era de esos que en plena noche te robaba un profundo beso y mordía alguna parte de tu cuerpo, pero no le gustaba que nadie las viera. El era mayor, un año o dos mayor que yo, pero la "inocencia" de mi yo pasada lo volvía loco.

Recuerdo que Tobio me dijo que quería tener una novia, y nosotros decididos fuimos al centro comercial de las afueras a conocer chicas, éramos tan tontos. Yo les decía a las chicas lindas que me encontrará que había un chico alto demasiado atractivo que buscaba novia pasando por aquí, fue tal el revuelo que tuvimos que irnos Tobio y yo a una tienda de ropa para cubrirnos, un grupo de chicas nos perseguían. Y así descubrimos la radiante belleza que emitimos los dos, por lo menos unas cinco chicas fueron por él y unas dos por mí: "nuestro nivel de hermosura es alto hermanito" - fue una tarde llena de risas y adrenalina.

Hubo una vez que él se enojo tanto con mis padres que estuvo días y días sin salir de su cuarto, yo le traía comida y siempre apoyaba y defendía. Y hubo más de una vez que el me decía que algún día ese cariño que le tengo a mis padres se esfumará... Y ciertamente no ha pasado, les sigo queriendo y respetando, solo que los quiero cuando no están en casa :)

Tobio es de esos chicos que cuando se enfoca en algo no para hasta conseguirlo, y así fue como logró que mis padres lo dejaran ir a una "reunión" mixta de su equipo, dónde días después el me contó que dio su primer beso y probó el alcohol.

Hace unas semanas descubrí el diario de mi querido hermanito, no sabía que tenía uno, pero me gustó el hecho que el se expresara así. Leí un par de páginas y la mayoría eran sobre entrenamientos y jugadas. No era un diario dije, pero cuando llegué al día que falleció nuestro abuelo, pensamientos oscuros habían invadido la mente de Tobio de hace cuatro años. Expresaba que mi existencia le recordaba al abuelo y que no soportaba ver mi rostro sin querer llorar; mencionaba mucho sus sueños. O mejor dicho. Pesadillas, cada una de ellas era apuntada, no había día que no escribiera, y todos tenían la firma Tb Kg con su elegante calígrafa. Uno de los sueños llamó mi atención de manera preocupante 

"Hormiguita padece de autismo, tengo miedo de que padre y madre se deshagan de ella, es horrible pensar lo fríos e imbéciles que pueden llegar a ser. Hormiguita, eres todo para mí, y tu autismo no me apartará nunca de ti, o eso espero. Tal vez si padeciera de autismo entendería mejor el mundo, siento que todos en el mundo necesitamos ser autistas. Los humanos; insensibles, enfermizos, ignorantes, incoherentes, todos los humanos son mierda, yo soy mierda. Pero en esa mierda humana está el equipo y mi hermana, que me hacen olvidar por completo la maldad del mundo. 

A veces pienso que hubiera sido mejor que yo muriera en lugar del abuelo, TN tiene muchos problemas y nuestros padres son la mayoría de ellos, seguro que con el abuelo hubiera vivido mejor su vida. Últimamente ese sueño de el cuerpo del abuelo siendo consumido por larvas y todo tipo de plagas en la tumba me atormenta, tanto así que tengo miedo a dormir"

Tobio ha sido siempre un chico cerrado, pero su manera de cerrarse me causaba y sigue causando una cierta incomodidad. Su mirada llena de estrés en los entrenamientos, los puños siempre siendo apretados, y los golpes que ha recibido entrenando. Pero está ese rayo de luz, de felicidad que atraviesa sus bellos ojos azules, ese rayo que se dibujaba cuando jugaba con el abuelo, ese rayo es Hinata... no yo. Yo le destruyo. 

Te amo Tobio, eres único hermanito, perdón por haberte hecho sentir así tantos años.

Amo hacer este tipo de capítulos, espero que les haya gustado, dewww