Algodón De Azúcar - Paul Lahote

Prólogo

"Prólogo"

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Cassy suspiró profundamente acariciando la espalda de su amiga.

Pobre e ilusa Isa, creyó que podría contra Mr. Problemas y ahora sufría de la peor catástrofe, un corazón roto.

Cassy se lo había advertido en múltiples ocasiones siendo tachada por su grupo de amigas como envidiosa y egoísta pero ahí estaba frotando su espalda dándole palabras de ánimos para que finalmente saliera de su cama.

Y finalmente, luego de cuatro días sin salir de casa, Isabella aceptó volver a la escuela.

La vió vestirse con una falda rosa tableada junto con un top blanco y un suéter, y eso la hizo sonreír. Ambas eran muy distintas, ella iba vestida con un pantalón rasgado y enorme que colgaba de sus caderas junto a varias cadenas que decoraban su cintura, en la parte de arriba un top negro y una campera color blanco le daba el toque de color que su madre exigía.

Acomodó su gorra negra en la cabeza al despedirse de los padres de Isa y emprendieron rumbo a la escuela preparatoria.

El camino era corto por lo que cuando menos lo pensaron los murmullos empezaron.

—Hey, Cassy.—Saludó Jacob al verla llegar y una sonrisa la recorrió antes de lanzarse contra sus brazos.

—¡Primo! ¡Volviste! ¿Ya te encuentras mejor?

Jacob sonrió.

—Sí, sí.

—Estaba tan preocupada, Jake, tío Billy no me permitió visitarte dijo que era contagioso.

—Eh.... Sí...

—¡Y te cortaste el cabello! ¿Cómo te atreves?

— Cassy, que verguenza...—Dijo con las mejillas sonrojadas,  Embry rió ante la preocupación de la chica.

— ¿Y tú? Oí que la pasas detrás de Uley.

Ambos chicos se tensaron pero la chica ni siquiera lo notó, se giró tomando la mano de Isa quien miraba al suelo sonrojada.

—Nos vemos en el almuerzo, mocosos.—Despeinó el cabello ahora corto de ambos.

— Eh... ¿Isa, verdad?—Dijo Embry deteniendo la huida de ambas, la chica dió un paso atrás mirando al pecho del chico, evitando sus ojos.

—¿Eh, si?

—Llevamos juntos álgebra II y aritmética, ¿Podrías darme los apuntes?

La chica suspiró profundamente empezando a buscar dentro de su bolso.

Cassy, por otro lado, tomó la camisa de su primo y con los labios entre abiertos subió la manga dejando a la vista un tatuaje.

—¡Jake!

Embry rió antes los regaños de la prima de Jacob al chico antes de volver a centrarse en Isa, quien empezó a explicar los deberes dejándolo confundida.

—A ver, a ver, ¿Son cien preguntas? ¿Hablas en serio?

—Sí.—Rió con más con confianza, por primera vez sus ojos risueños se encontraron con los de Embry y lo vió temblar.

Embry sintió como perdía cualquier atadura que lo mantuviera en tierra y empezaba a flotar perdido, pero esa chica de piel pálida y ojos oscuros se volvió su centro, su punto de gravedad y su mundo entero.

Isa se convirtió en su ancla.

Y aún así nadie se esperaba que el chico cayera de rodillas frente a ella, dejando caer a su paso los apuntes y asustando a la chica.

—¿Estás bien?

Embry asintió lentamente mientras Jacob lo tomaba por el hombro.

—Creo que debo llevarlo a casa.—Dijo Jacob con nerviosismo, a lo lejos Jacob y Paul miraron la escena.

Ambas asintieron viéndolos irse.

—¿Dónde estaban metidas?

Cassy suspiró, ante ella Anto parecía furiosa ante la falta de ambas.

—Con mi primo.