III. El portador de las espadas

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—¿En qué estaban pensando?— cuestionó Mitsuki con furia, mirando a Kirishima y a Bakugo

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—¿En qué estaban pensando?— cuestionó Mitsuki con furia, mirando a Kirishima y a Bakugo.

—No es para tanto mujer— murmuró Bakugo mientras ignoraba a su madre, cruzándose de brazos con molestia.

—¿¡Qué no fue para tanto?!— grito Mitsuki acercándose a su hijo —¡Tuve que enviar a mis dos mejores guerreros porque ustedes decidieron jugar al buscador de tesoros!

—Bueno... no fue un tesoro, se trata del posible portador de las espadas y por consecuencia el posible...— Kirishima comentó, pero comenzo a silenciarse cuando sintió la mirada asesina de Mitsuki sobre él —Mejor guardo silencio.

—Sí es así, ¿dónde está su posible portador de las espadas?— cuestionó Mitsuki en tono sarcástico, sin creer aún en las palabras de ambos chicos —¡Entiendo que ninguno de los dos quiere comprometerse aún porque son "almas libres", pero no les queda de otra, ahora son hombres en la tribu y guerreros, deben actuar como tal!— ordenó la mujer tras hacer comillas con sus dedos.

—Cállate ya bruja, no entiendo porqué dices todo eso. Me ha quedado claro lo que tengo que hacer por mi pueblo, nunca dejas de repetirlo— Bakugo comenzó a caminar a la salida del salón principal en la tribu, Eijirou comenzó a mirarlo mientras seguía razonando las palabras de Mitsuki.

—Espere... dijo, ¿comprometidos?— Kirishima se llevó una mano a su cadera y después miro negando a Mitsuki —Quiso decir comprometido ¿no? Pero sabe que jefa Bakugo, no se preocupe yo hablo con Kats...

—Dije comprometidos, Eijirou— la mujer lo miro como una broma, interrumpiendo su hablar y después negó para salir del gran salón.

—Uh... mierda— murmuró Kirishima.

El sol entraba por la ventana de aquel gran cuarto, cubriendo parte de su cara y provocandole molestia

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El sol entraba por la ventana de aquel gran cuarto, cubriendo parte de su cara y provocandole molestia.

Se removió en la cama mientras fruncia sus cejas por la molestia de la luz contra su rostro, y pronto sus ojos se abrieron lentamente intentando acoplarse rápidamente a la luz.

Light Swords: En Busca De La Profecía Donde viven las historias. Descúbrelo ahora