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Jisung se sacudió, la ajustada sudadera con capucha que cubría su cuerpo mientras su cabello goteaba agua. Se cambió rápidamente y se dio la ducha en el hospital más que agonizante porque Aeri le derramó el todo el café encima.

Pero tan pronto como salió, una mano le arañó el brazo y lo arrojó hacia la apartada zona de mantenimiento del hospital. Sus ojos se cerraron con fuerza cuando su espalda golpeó la pared con un fuerte golpe, su respiración se entrecorto por el impacto.

Pero al abrir los ojos, vio al reportero, con el ceño fruncido y los ojos ahogados en veneno. —Se suponía que ibas a morir. — Inho disparó, manteniendo la voz baja en caso de que alguien pasara por allí

— Bueno, gracias. — Jisung se enderezó, dándose cuenta, su cabeza hizo clic. Ahora sabia por qué Aeri le quitó el café de las manos, y ahora sabía con certeza quién fue la causa de ello.

— Aeri no bebe café... así que por eso...  Tú... — Este apuntó un dedo hacia él, a lo cual el más bajo se hizo a un lado, con una mirada psicópata en sus ojos.

— Ella es algo que me pertenece, nadie se interpondrá en mis planes. — sus labios comenzaron a derramar palabras de furia y venganza, sus ojos se entrecerraron hacia Jisung como si buscara el mejor lugar para apuñalar.

— Ella no es un objeto. — Jisung no iba a perder contra el verdadero monstruo que vivía dentro de Inho.

— Ella es un jarrón: bonita y buena para decoración. Un jarrón hecho de porcelana pura y bordeado de oro. Ella es la riqueza y la autoridad que necesito. — Inho apretó el cuello de Jisung, pero por el simple hecho de que Jisung se elevaba sobre Inho, no se veía tan intimidante.

— No te das cuenta de lo repugnante que eres. — Jisung agarró su camisa con la mano y lo alejó bruscamente.

— He intentado matarte dos veces, si no fuera por ese estúpido niño que me detuvo anoche...

— ¿Intentaste asesinarme anoche? — Jisung  se burló. — No soy un objetivo tan fácil.

— pero sigues siendo mi objetivo. Te mataré, un día u otro. Mataré a todos mis obstáculos. — Inho puso un dedo en el hombro de Jisung —  Te mataré, así como maté al resto.

***

— ¡¿Vas a dejar de lado el hecho de que ese psicópata está planeando asesinarme?! — Jisung la persiguió cuando entraron al campo de carreras. Habían detenido toda actividad de carreras callejeras por un tiempo, pero debido a la necesidad de dinero, tuvieron que reanudarlas.

El número 8 también había guardado silencio, cancelando todos los planes de carrera y cayendo lentamente en las listas. Sin embargo, nunca fue colocado oficialmente en las listas debido a que violó las reglas, por lo que Aeri seguía ocupando el primer lugar en general.

Deberían haber desterrado a Número 8, pero no lo hicieron, porque si lo hacían, él encontraría el camino de regreso.

— ¡Lo que quiero decir es que me va a asesinar! — gimió Jisung — ¡te llamó florero! ¡ya sabes! ¡El que se ocupa para las flores!

—Agradécele de mi parte. — Aeri asintió hacia Jisung, observando cómo el tiempo de las carreras se acercaba cada vez más.

— Él te robará y ganará dinero contigo. ¿¡No estás preocupada en absoluto por tu propio bienestar!? — Jising estaba muy sorprendido.

— Todos ganan dinero conmigo. — Ella le dio una palmada en el hombro. — incluso tú.

— Es por eso que no puedo tener una sola conversación adecuada contigo. — Jisung suspiró, admitiendo su derrota mientras arrastraba sus ojos hacia la enorme pantalla qué ya estaba llamando a todos los concursantes a empezar a prepararse. Jisung se fue sin decir una palabra más para entrar al baño a vestirse.

𝐃𝐄𝐀𝐓𝐇 𝐖𝐈𝐒𝐇 𝐩.𝐣𝐢𝐬𝐮𝐧𝐠Donde viven las historias. Descúbrelo ahora