Conserje Manoban | Jenlisa G!P

ⅩⅩⅡⅠ. SUFICIENTE... ¿PARA SIEMPRE?

Pov Jennie [💋]

—Lisa —dije muy bajito. Me miró con tanto cariño, creí que no resistiría tanta felicidad.

—¿Ha sucedido algo? —Llegaron dos sobrecargos preocupados. Uno de ellos me tendió su mano para ayudarme a levantar.

—Sólo tropezamos —dijo Lisa con seguridad— Una feliz coincidencia pues nos conocemos hace tiempo. ¿Estás bien, Nini? —Me sonrió ya levantada.

—Sí —dije apenas regresando a mi lugar. Lisa me siguió después de tranquilizar a los tripulantes que parecían alarmados.

—¡Por fin te encontré! —Quise decir algo, pero uno de sus dedos se posó en mis labios para callarme— No sabes cómo te he buscado, Jennie. Creí que no volvería a verte. Fui a tantos lugares y no podía hallarte —Tomó mis manos y me estremecí— Tú eres mi vida, todo lo que tengo. No sabes el infierno que fue vivir sin ti. ¿Podrás darme una oportunidad para ganarme tu perdón?

Mis ojos se humedecieron al oírla. ¿Ganarse mi perdón? Dentro de mí ya la había perdonado. Entonces sí me amaba, me había buscado, me extrañó, quizás tanto o más que yo. Estaba tan feliz al escucharla.

—¿Me buscaste? —pregunté. Era lo que más curiosidad me daba.

—En Miami, dónde vivías con Jackson. En Nueva Zelanda, con tu madre. Contraté a alguien para que me ayude a rastrearte... incluso llegué a Toulouse —me confesó. Eso me dejó algo perturbada. ¿Me rastreó? ¿Estuvo en Toulouse?

—Fuiste a Toulouse... ¿Cuándo?

—El investigador que contraté me envió una fotografía por email, inmediatamente salí para allá, pero llegué cuando te habías marchado. Conocí a tu abuelo, no me recibió bien, aunque creo que después de conversar, entendió —Su mirada era la misma de siempre, tan enamorada, como si yo fuera la cosa más preciada para ella.

—¿Conociste a Jung-jae?

—Sí, me dijo que habías vuelto para una audiencia. No sabía de qué se trataba, el investigador no me lo había dicho. Tomé otro avión para volver y encontrarte, pero el mal clima hizo que me detuviera en Francia un día. Le llamé a Olivia para que te esperara en el aeropuerto, pero no apareciste... —¿Cómo que no aparecí? Esa vieja no le dijo que me vio.

—Yo me encontré con Olivia, tropecé con ella, sin querer —Ella sonrió al escuchar eso— Pero no me dijo nada —añadí, su mirada cambió. Ojalá se diera cuenta que su prima en realidad lo que quería era que siguiéramos separadas.

—¿En serio? Ella dice que no te vio. Debe haberse confundido —Lisa siempre era confiada, ya me iba a encargar yo de que abriera los ojos.

—No se confundió, sí me reconoció —Lisa seguía perturbada, pero cambió de semblante para continuar con su relato o confesión, no lo sé. Lo único de lo que estaba segura era que me hacía muy feliz saber que siempre me estuvo buscando.

—Llegué al juzgado cuando ya te habías ido. Yo sólo quería verte, pensé que tú ya no me querías cuando te marchaste de allí —Ahora estaba triste.

—Me asusté —le confesé.

—Toda esta tarde he ido de un lugar a otro. Dónde Catelyn, a casa de Alexa y a la mecánica. El hijo de Harry me dijo que te vio salir con Jin —El tono de sus voz se hizo duro. Ella no veía con buenos ojos a mi amigo.

—Yo confío en, Jin. Es mi amigo —Hizo un gesto de fastidio casi imperceptible. Iba a ser difícil conciliarlos, pero no me importaba, yo le demostraría a Lisa que Jin no era el mal elemento que ella creía.

—Bueno, lo importante es que te encontré al fin. ¿Podrás perdonarme Jennie? ¿Tengo al menos una oportunidad de lograr hacerte olvidar todo lo mal que me porté contigo?