El error mejor cometido

6. Nate Brown

Hola, soy Nate.

Mis días son bastantes aburridos, todas las personas piensan que son muy cool, pero no lo son.

Siempre me despierto temprano, desayuno solo, ya que mi madre y mi padre siempre trabajan.

Ser la alcaldesa, es algo complicado. Bueno, lo parece.

La verdad necesito alguien que me haga sentir feliz y me haga mis días hermosos. Algo así como una pareja.

Tengo amigos, pero siento que no están conmigo porque les gusta ser mis amigos, siento que es solo por el dinero.

Necesito amistades que realmente les divierta estar conmigo y les guste pasar tiempo junto a mi.

En los últimos años he estado cambiando de casa, eso realmente no me gusta, quisiera quedarme solamente en un solo lugar. Hago amigos en alguna parte y luego me tengo que ir de esa ciudad.

Siempre me dediqué al deporte, sobre todo al fútbol americano. Me encantaba estar en las canchas, tomando ese balón y anotando. También me gustaba tener buenas calificaciones, para que mi mamá no se molestara y también porque me importaba.

Había una materia que realmente odiaba, matemáticas, soy muy malo en matemáticas.

Debes en cuando salía de fiesta con mis amigos, pero no me sentía cómodo, no era el lugar donde me gustaba estar.

Odiaba tener una casa grande, solamente éramos mi papá, mi mamá, mis mascotas y yo. Bueno también las personas que trabajan en mi casa. Si, soy hijo único.

Es horrible. Se que algunos de ustedes desearían ser hijos únicos, pero no saben lo que dicen, me encantaría tener una o un hermano, así podía jugar o pelear con ellos.

Pero no puedo hacerlo.

Cuando salía con mis amigos decía que ya no era virgen, pero en realidad si lo era, no es nada malo, pero ellos lo tomaban algo chistoso.

Tuve 3 novias en las otras ciudades en las que estuve, a las tres las tuve que dejar, ya que estábamos cambiando de casa y eso de la distancia no me gusta.

...

Comencé alistarme para salir a pasear un rato a mi perro y para salir a despejar la mente. Pero antes debía desayunar algo.

—Hola, buenos días señora Erica — dije.

—Buenos días Nate.

—¿Gustas algo de desayunar? — preguntó.

—Si por favor, me gustaría una ensalada.

Tengo que mantenerme en forma.

—En un momento te la hacemos.

—Esta bien, gracias — le dije.

Mientras mi ensalada estaba lista, yo me estaba poniendo mi outfit para ir a correr y después ir al gym.

Me iba a poner una camisa de compression, un short y unos tenis. Todo el outfit era negro.

—Nate, esta lista la ensalada — me grito la señora Erica.

—Ya voy — grite mientras bajaba las escaleras.

—Se ve deliciosa — dije mientras me sentaba.

Para mi la señora Erica, ya era de la familia, porque ella siempre estaba en casa y era con la persona que mas hablaba todos los días.

Me encantaba que cocinaba riquísimo. Mi comida favorita eran las enchiladas, sabían deliciosas, lo mejor que he probado en toda mi vida.

𝟏𝟎:𝟎𝟎 𝐚. 𝐦.