3. El chico nuevo

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Escuchaba el ronroneó de mi gatita Duquesa en mi oído. Eso causó que me despertara.

Aún era temprano, eran las 𝟔:𝟐𝟎 𝐚. 𝐦. Así que tenia mucho tiempo para alistarme.

Estaba buscando ropa en mi armario, cuando recordé que me había llegado una notificación de  𝙇𝙖𝙨 𝙢𝙖𝙡𝙖𝙨 𝙡𝙚𝙣𝙜𝙪𝙖𝙨 sobre que había hecho un post.

Fui a tomar mi celular para ver que era lo que había subido, me metí a la cuenta de instagram.

Solo había sido un post de bienvenida donde decía:

"Hola Instituto royal school. El juego comienza"

No era algo revelador, me lo imaginé tirando hate a los estudiantes, pero no fue así.

Le mande mensaje a Sara a ver si ya se había despertado.

𝐀𝐥𝐞𝐱

~Holi, chica linda, ¿como amaneciste?.

~¿Miraste el post que subió la cuenta de 𝙇𝙖𝙨 𝙢𝙖𝙡𝙖𝙨 𝙡𝙚𝙣𝙜𝙪𝙖𝙨?.

Ya habían pasado 40 minutos

                                                                                      𝐒𝐚𝐫𝐚

~Hola Alex lindo, muy bien, ¿y tú?.

~Lo acabo de mirar, parece que viene con ganas de jugar, eso da miedo.

𝐀𝐥𝐞𝐱

~Hasta que contestas bella durmiente.

~Amanecí muy bien~ (le mande un emoji de corazón).

~Si. Me da miedo que me saque del closet, sabes que mis padres no tolerarían mirar chismes míos en redes sociales. Chismes que son realmente ciertos :(

                                                                                     𝐒𝐚𝐫𝐚

~Sabes bien que mi alarma está puesta a las
7:00 a. m.

~No creo que haga eso, solo intenta verte un poco hetero cuando pases por los pasillos.

𝐀𝐥𝐞𝐱

~Lo intentaré.

~Bueno te dejo porque voy alistarme.

𝐒𝐚𝐫𝐚

~Yo igual, adiós.

—Te veo en la preparatoria.

𝐀𝐥𝐞𝐱

~ Sip, adios.

Estaba buscando que era lo que me iba a poner, no tenia ni la menor idea. Pero tenia que llevar algo bonito, por si llegaba a mirar a Nate Brown.

Lo primero que hice fue poner música, empezó a sonar 7 𝓇𝒾𝓃𝑔𝓈 𝒹𝑒 𝒶𝓇𝒾𝓃𝒶 𝑔𝓇𝒶𝓃𝒹𝑒. Me motive mas con su ritmo a irme lindo a la preparatoria.

Me puse un lindo outfit y baje las escaleras para ver si ya estaba hecho el desayuno.

—Buenos días mamá— dije mientras me sentaba.

—Buenos días Alex— Dijo sonriendo.

—¿Y mi papá y Mia?.

—Están en su habitación. Les puedes hablar por favor.

El error mejor cometido Donde viven las historias. Descúbrelo ahora