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1. Recuerdos

DICIEMBRE 2023.

Pablo

Hoy es uno de esos días que me gustaría desaparecer, dejar de sentir, tener control sobre mis impulsos y no dejarme llevar por esta ansiedad que se apodera de mi razón y me autodestruye. Hace unos meses Terelu me propuso que cantara en el homenaje de su madre, me pareció precioso, fue un orgullo decirle que si, allá a donde haya música y amor siempre me gusta estar y más si es para homenajear a mi queridísima María Teresa Campos, siempre nos tuvimos un cariño y una admiración mutua, desde mis inicios, cuando nadie confió en mi, ella me animaba a que siguiera, me dijo que en todos sus años de profesión pocos artistas le habían emocionado tanto con su música.

Ayer por fin grabamos la gala, yo ya llevaba unos días sintiéndome raro, nostálgico y algo triste pero preferí no hablarlo con nadie y aislarme en casa con mi piano. Llevaba mucho tiempo sin sufrir una crisis de ansiedad y empezaba a preocuparme porque no quería pasar por ello una vez más. Antonio me notó raro días antes y me excusé contándole que las cosas con Laura no estaban muy bien últimamente y estaba centrado en componer canciones para el nuevo disco, no le di detalles porque no quería preocuparlo, en dos días se iba de viaje a visitar a su hijo a Estados Unidos y estaba feliz por él.

Lo de la crisis con Laura era cierto, por un lado llevaba meses insistiéndome en dar un paso más en nuestra relación, vivir juntos.... y yo la verdad no me siento preparado aún para ese paso. Estoy bien con ella, me atrae físicamente, lo pasamos bien juntos pero ya está. No quiero compromisos, no quiero atarme a nadie. Esto nos ha distanciado y por si fuera poco está Malú, desde que empezamos a grabar la voz está celosa de ella y me ha dicho que cuando la miro parece que sienta algo más que amistad por ella. Cuando empezamos a salir las redes ardían con el tonteo que teníamos y Laura quiso saber si habíamos tenido un romance, si nos habíamos acostado. Yo siempre se lo negué, por supuesto.

Lo que realmente pasó entre Lula y yo solo lo sabemos nosotros y es una historia de idas y venidas, de momentos inolvidables, de encuentros llenos de lujuria, de pasión, de amor.... pero también de dolor, de lágrimas, de reproches por lo que pudo haber sido y nunca fue. En 2018 nos distanciamos más que nunca, justo cuando más unidos estábamos, justo cuando nos planteamos dar un paso más y contar lo nuestro a nuestra familia y amigos. Yo estaba loquito por ella y sé que ella también por mi. Dejó a Gonzalo y yo rompí mi relación con Laura después de 10 años juntos. Pensé que podríamos ser felices, éramos además amigos y confidentes, compartíamos aficiones y la misma pasión por la música. Hubiera hecho cualquier cosa por ella, le hubiera bajado la luna del cielo si me lo hubiera pedido, pero no pude darle, su mayor ilusión, hacerla madre. No me lo pidió directamente, es algo que ella anhelaba, riendo me decía que ya tenia una edad y que se le iba pasar el arroz. En el último tiempo juntos ella dejó de tomar la píldora, no usábamos preservativo, confiábamos el uno en el otro y era increíble poder sentirte tan unido a la persona que amas. Ella me repetía que no había prisa, que simplemente sucedería si tenia que suceder. Pero yo empecé a agobiarme. Malú y yo en la cama siempre fuimos puro fuego, nos compenetrábamos a la perfección, conocíamos cada rincón de nuestro cuerpo y sabíamos como hacer que el otro tocara las estrellas. Me encantaba correrme dentro de ella, tanto como a ella que lo hiciera, era algo que limitamos a nosotros, que no hacíamos con nadie más. Pero desde que dejó de tomar la píldora simplemente me rallé, cuando llegaba el momento y en pleno clímax rompía nuestra unión. Ella me abrazaba y me mostraba su amor y comprensión, pero esto fue el principio de nuestro fin. Un día me dijo que había vuelto a tomar la píldora, que no pasaba nada, que entendía que yo no estaba preparado aún para intentarlo y que podía esperar el tiempo que yo necesitara, me sonrió con ternura mientras me lo decía pero sus ojos brillantes no podían ocultar su tristeza. Y entonces se lo dije, se lo solté sin pensarlo, arrepintiéndome en el mismo momento. Le dije que yo no podría hacerla madre ni ahora ni nunca, porque yo no quería ser padre. En ese momento algo se rompió en ella, lo noté, me maldije por ello, bajó la cabeza para ocultar sus lágrimas. Yo me quedé congelado, sin saber reaccionar. Y tras unos segundos que parecieron eternos, se marchó sin decir nada.