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↳ Yo soy el gatoy tu la curiosidad que ruego me mate a besos — Andrés Ixtepan

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Yo soy el gato
y tu la curiosidad
que ruego
me mate a besos
Andrés Ixtepan




















— Déjame besarte por esta noche, Julie. Seamos dos átomos más de estrellas, quiero besarte, lo anhelo, dame permiso de besarte, de aplastar esos labios tan preciosos, finos y carnosos... déjame besarte nena.

Sus respiraciones estaban entre cortadas. Enzo la tomaba con firmeza, su mano cálida, grande, delgada y venosa se posicionó entre el cachete izquierdo de ella, y con suavidad comenzó a acariciar su piel, mirando los labios de la chica.

Julie cerró sus ojos ante el tacto de Enzo, era tan suave, tan tranquilo, no había prisa. El sentimiento que la invadían estaban acumulados causándole el efecto mariposa en su abdomen, trago en seco cuando el pulgar de Enzo acarició el labio inferior de la chica, por inercia, ella abrió un poco su boca, despegando sus labios, abriéndole el paso a Enzo para que los acariciara mejor.

— Verte tan tranquila me está matando Julie... —murmuró el chico, apartó su pulgar de sus labios para comenzar a acercarse a ella.

— Enzo... ¿estás seguro de esto? —hizo que el chico parara, para apartarse un poco y mirarle.

— Jules, estuve seguro desde que te dije ese hola, ahora, necesito que me beses —ella sonrió.

Los corazones de los dos jóvenes palpitaban sin parar, las manos de Julie estaban hirviendo y estaban sudando, ella posó su mano en el pecho de Enzo, mientras más se acercaban, más escuchaban sus respiraciones chocar.

Enzo inclinó un poco su cabeza, recordando las palabras que le había dicho Matías, dándole así una explicación de cómo besar, ¿por qué se acordaba de eso? Si él ya sabía como besar, tal vez, por los nervios que le causaba el simple hecho de que iba a besar a la chica de la cual se había enamorado hace un mes... ¿y medio? No llevaba la cuenta pero pasar el rato con ella le devolvía sus momentos felices.

Un centímetro, solo un centímetro cerca del otro, los dos con los ojos cerrados, sus narices se tocaban. Y Julie fue la de la iniciativa, cogio a Enzo del cuello de su remera para así, acortar el pequeño espacio que tenían sus bocas, juntándolas.

Enzo se encogió de hombros tras sentir el frío tacto de los labios de Julie, pero fue cuestión de segundos cuando los labios y bocas de los dos compartían calor y salida. El beso era tranquilo, cada dos segundos intercambiaban un nuevo beso, Julie apretó más su mano que sostenía el cuello de la remera de Enzo para atraerlo más hacia ella.

A mitad de uno de los tantos besos que intercambiaban, Enzo soltó una sonrisa tonta haciéndolos parar por unos cuantos segundos, Enzo juntó sus frentes sosteniendo de la misma forma el rostro de Julie, los dos estaban agitados, demasiado, agitados.

Julie deslizó su mano por el pecho de Enzo, soltando unos pocos jadeos, sonriendo.

— No sabías cuando necesitaba esto, linda —murmuró con su voz rasposa, poniéndola a ella de color rojo, sus cachetes.

Julie cerró sus ojos y buscó la manera de besarle de nuevo, Enzo se levantó de la cama por lo cual ella también. El chico se inclinó para besarle otra vez, volviendo a sentir sus labios rotos de Julie, ella se aferró al cabello de Enzo, proporcionándole caricias en el.

Beso. Se separó un poco de ella.

— Decime cuál es tu película favorita —besó cortamente los labios rojizos por su culpa.

— ¿Me estás torturando?

— No. Te estoy conociendo... ahora, decime cuál es tu película favorita para besarte.

— El día después del mañana —Enzo sonrió y la volvió a besar, después de cinco segundos, ella hizo una pregunta.

— ¿Show de comedia favorito? —pasó sus manos por sus fuertes brazos, acariciando.

— ¿The big bang theory suena muy nerd? —soltaron unas risas.

— Como me encantas Enzo —lo agarró de su nuca para estamparle sus labios contra los suyos.

Enzo decidió dejar de preguntar, quiso desear sentir sus labios por más minutos. Hizo que caminase hacia atrás a pasos torpes hasta chocar contra la pared en donde Enzo recargó una de sus manos a lado de la cabeza de ella, la otra mano libre la sostuvo de su cintura, apretándola un poco, ella lo tomaba de su nuca y al mismo tiempo lo que hacía era juguetear con su cabello por lo cual eso lo volvía a él muy loco, más de lo que ya estaba por ella.

Minutos más se separaron, Julie, logrando morderle el labio inferior, el chico sonrió ante tal sensación.

Se separaron por fin, el le limpió un poco sus comisuras de sus labios, sonriendo.

— Sos guapísima Julie, de ahora en adelante, nos conoceremos, prometido linda.

Le dio un beso de mejilla para despedirse de ella.

— Ten una linda noche, Julie, descansa.

— Chau Enzo...

Lo acompaño a la puerta para después, el desaparecer por el pasillo. Julie cerró la puerta detrás de ella y se recargó en ella soltando una risa tonta, estaba fijísima, nerviosa.

Enzo besaba tan bien, y le encantaba, fue como una droga para ella.















hola amores,
aquí el beso que tanto pidieron,
se lo merecen por apoyar la historia.

AHORA VOTEN Y COMENTEN 🙏🏻😩

¿Les gustó? El cap lo escribí escuchando
"One of the girls" de The Weeknd 😊🙃

Locos | Enzo VogrincicDonde viven las historias. Descúbrelo ahora