Oh, amado mío, tus palabras reverberan en ecos lejanos,
aguijones que traspasan,
cuchillas que cortan,
mas he aprendido a sanar.Tus ataduras, en tiempos pretéritos, fui cautivo,
conozco la senda que conduce hacia la libertad.Tus amenazas pintan el cielo con sombras,
mas ya he caminado por valles más oscuros.
y he surcado abismos sin retorno.Una verdad se asoma, aunque no veas tu reflejo,
reconozco tu amor en su más oscuro vuelo.Andy Martz
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Cartas Perdidas
Short Storyuna serie de cartas sobre pensamientos y sensaciones que quizá te parezcan familiares o tal vez no