Chillido Travieso

Capitulo⁰²

Taehyung miró desde su mesa como Jimin devoraba las cerezas de goji que le había puesto en su casillero. La noche anterior se había puesto a investigar arduamente en internet para encontrar información sobre los lobo. Lamentablemente no encontró mucho que le sirviera. La mayoría de las páginas hablaban de los rasgos de la especie en general; que los lobos amaban el sabor de la carne, y que existían algunos híbridos que mantenían una dieta completamente carnívora. También aprendió que en algunas manadas se acostumbra que los lobos Alfas proporcionarán el alimento, pero Taehyung sintió que era una idea arcaica. De igual forma, leyó que amaban cubrir y estar cubiertos del aroma de su pareja, pero era muy pronto para que él extendiera su cuello y se lo ofreciera como regalo, lo perturbaría.

Después de estar muchas horas pegado a su laptop, finalmente encontró información valiosa. A muchos lobos les gustaba comer de las bayas y hierbas silvestres del lugar donde habitaban. Taehyung rogó que aquello se apegara a los gustos de Jimin. La realidad era que muchas veces existía una importante división entre los gustos del humano y las características del animal, al ser seres pensantes, los híbridos podían controlar perfectamente el instinto y vivir sin complicaciones. Un ejemplo eran los híbridos provenientes de animales carnívoros que decidían eliminar la carne de sus dietas.

Pero Taehyung estaba desesperado, por lo que decidió tomar el riesgo. Así que en la mañana se tuvo que levantar a las cuatro de la madrugada para ir al mercado y conseguir las cerezas antes de ir a la escuela. Siempre debía de dejar los obsequios muy temprano para evitar que otras personas vieran que estaba abriendo el casillero de Jimin, era importante ser cauteloso.

— Si fuera tú, apartaría la mirada antes de que se dé cuenta que lo estás mirando como un tonto.

— No puedo evitarlo. — suspiró — Por fin pude darle algo que le gusta, míralo, las está comiendo con una sonrisa en la cara.

— No sabía que los lobos tenían gusto por las bayas. — Sungjae sacó su jugo y lo tomó aprovechando que el maestro aún no entraba.

— Ni yo, apenas lo descubrí ayer.

— ¿Visitaste los blogs que te recomendé?

— Si, pero ninguno me sirvió. — respondió frustrado — Tuve que recurrir a buscar información de animal salvaje, la única información que me dieron tus blogs fue sobre el efecto de las feromonas en ellos y sobre su época de apareamiento.

— Bueno, ahora puedes decir que te has vuelto un experto, es más, deberías escribir un artículo que guíe a los Omegas perdidos como tú.

Tomó una nuez de su desayuno y se la tiró con saña en la cabeza. Su amigo se quejó por el golpe, pero internamente agradeció por la nuez, porque había estado deseando una desde que olfateó el fruto en la mochila de Taehyung.

— ¿No pudiste traerlas ya descascaradas? No puedo abrir esta cosa.

Sungjae mordía con fuerza la cáscara, intentaba con todas sus fuerzas abrirla, pero solo logró babear la superficie.

— No es tan difícil, mira.

Tomó la nuez partiéndola perfectamente con sus dientes. Sungjae aplaudió emocionado, devorando el fruto de un solo bocado cuando se le fue entregado. A veces lo comparaba con Winnie Pooh, porque al igual que el personaje, Sungjae era un oso comelón, con la diferencia de que el alfa se mantenía en forma.

— Por ciento, Hyungsik tiene un plan.

— ¿Para qué? — preguntó confundido.

— ¿Para qué más? Para enamorar al idiota que esta comiendo bayas como salvaje.

— No lo llames así. — defendió firme — Sólo es un mal estudiante, pero no es un idiota.

— Lo es.

Sungjae intentó seguir burlándose, pero se aburrió casi al instante porque no era alguien que disfrutaba de mofarse de las personas. A Taehyung le gustaba la cualidad de su amigo de ser alguien pacifico. Tenía la apariencia de un gran depredador, pero en el interior era como un gran oso de felpa andante. A veces inclusive rozaba en lo sensible, no era alguien que tolerara los regaños con facilidad.

— Ahora dime, ¿Qué es lo que tienen en mente?