O21

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Estaba afuera de la puerta del cuarto del cobalto, planteándose de nuevo si esto era una buena idea.

tengo que, pensó.

No se molesto en tocar y entró del tirón viendo al menor sentado en el piso apoyado en su cama, pequeñas lágrimas salían de sus ojos y se sentía un ambiente realmente triste.

Se acercó a él y vio como limpio sus lágrimas de inmediato, se sentó a su lado buscando que palabras decir.

—¿estas bien? —no supo otra manera de empezar la conversación.

—no...

—¿dije algo malo?

—¿que? No no, no es nada de eso.

—¿puedo saber que ocurrió? Solo si quieres. —era terrible para estas situaciones.

—¿alguna vez te has enterado de que casi toda tu vida te han mentido? Pues yo si y se siente horrible. —respiro profundo, tratando de calmar su llanto. —más cuando es tu propia familia.

—si... yo también pase por una mentira pero no fue igual por así decirlo. —lo miro. —me costó por un momento superarlo y sentí que nadie sabía el dolor que estaba pasando, así que empecé a joder mi salud después me di cuenta que no era lo correcto pero no pude dejar de fumar.

—oh... yo lo siento...

—no debes de disculparte y no hablemos de mi, tu eres importante en este momento.

—esta bien yo... Te contaré lo que sucedió.

El azabache escuchaba todo lo que había pasado los días que el cobalto se había ido y se sintió mal por el.

No sabía que decirle o recomendarle. Se sentía horrible por no saber que decir.

—perdón si no tengo mucho que decirte, pero que se joda tu padre. —pensó de nuevo lo que había dicho. —con, ¿respeto?

El cobalto río.

—gracias por escucharme. —se apoyo en el hombro del contrario. —nunca me imagine que harías esto.

—¿por?

—la primera vez que me besaste pensé que solo querías jugar conmigo o solo tener un chico con quien follar.

—oh no, yo realmente dije la verdad aquella vez aunque tu no sientas lo mismo. —hubo dolor en esas palabras pero era la verdad.

No hubo contestación.

—¿puedo preguntar algo? —volvió a hablar el azabache. —no se si lo recuerdas pero en aquella fiesta tu... Me dijiste algo.

—perdón si te insulte.

—no fue eso, tu me dijiste que yo te gustaba pero solo quiero saber si es realmente verdad, yo solo no quiero salir lastimado o hacerme ilusiones sabiendo que no es real.

—Shadow, desde aquella vez que me dormí en tu explicación del por qué te habías ido has cambiado tu actitud conmigo. Ya no eres igual. —hablo. —cada vez que me pasa algo tu siempre me traes en buen estado, te preocupas por mi y siempre estaré agradecido de eso.

—¿pero?

—necesito tiempo, me siento confundido nunca me había interesado en un chico antes es algo complicado para mi.

—eso significa, ¿que puede haber un nosotros?

—si estas dispuesto a esperar puede. —contestó mientras entrelazaba su mano con la del azabache.

—esperare lo que necesites.

El azabache estaba feliz de haber escuchado eso, tal vez no hoy o mañana o pasado pero algún día no tan lejano podría estar con la persona que quería.

Ninguno se alejo, ninguno rompió el agarra que tenían.

—¿cuál es tu canción favorita? —dijo de repente el azabache, el cobalto río por la pregunta tan repentina.

—this is what autumn feels like de jvke. —contestó. —adoro como empieza.

—wow, bueno realmente nunca he escuchado una canción de él.

—deberías. —le sonrió. —¿y tu?

—es difícil... Me encantan las canciones de the neighbourhood pero hay una que se a vuelto mi favorita.

—¿cuál exactamente?

—golden years de chistian french.

—esa es una buena canción y pensar que serias más de algo más "alocado".

—a veces, ¿ya te sientes mejor? —cambio de tema al inicial.

—si, hablar contigo es muy confortable. —le fue honesto. —¿podemos quedarnos así unos minutos más?

—si te duermes será mejor que no lo hagas aquí en el suelo.

—no tengo sueño.

—bueno.

Un pequeño silencio se hizo uno donde el azabache penso que el cobalto se habia dormido.

—shadow... ¿por que a mi? ¿por que te gusto? ¿por que quisiste seguir a mi lado despues de lo que te dije?

—por que... Desde que te vi... Mi forma de ver la vida cambio, ¿puedes creerme? cuando te veo una melodía dulce suena en mi corazón. —respondió. —eres la melodía que he estado buscando sonic pero no quería forzarte a estar conmigo... Y...  Al escuchar tu declaración en aquella fiesta... Tuve una ultima esperanza...

—shadow... Me alegra mucho que no te hayas rendido... Y lamento romper tu corazón aquellas veces...

—lo estas sanando ahora mismo, Fiji blue.

El cobalto lo miro y le sonrió, unos minutos despues el menor se quedo dormido y el azabache no podía dudar que el era un dulce mentiroso,pero a este punto al azabache no le impresionaba.

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𝗖𝗜𝗚𝗔𝗥𝗘𝗧𝗧𝗘 𝗦𝗠𝗘𝗟𝗟〃 ShadonicDonde viven las historias. Descúbrelo ahora