『𝗗𝗮𝗲𝗺𝗼𝗻 𝗧𝗮𝗿𝗴𝗮𝗿𝘆𝗲𝗻 』ᵒᶰᵉ ˢʰᵒᵗˢ ⁺¹⁸

12-𝐀 𝐍𝐢𝐠𝐡𝐭𝐥𝐲 𝐒𝐭𝐫𝐨𝐥𝐥

Resumen: Hightower!Lector,

 Advertencias: pura obscenidad, lector ha tenido sentimientos hacia  Daemon durante años, ahora se siente de la misma manera

 autor original:smut, no-con, vaginal, sexo sin protección, age-gap, breeding kink,

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"¿Mi Lady?" 

"¿Esta bien?"

Sus palabras se sintieron a mundos de distancia una vez que escuchaste que tu hermana se casaría con el Rey, el padre de tu mejor amiga. No sólo te ayudó en todo momento durante la muerte de tu madre, sino que también lo hizo cuando la de Rhaenyra falleció. Era una especie de roca para los dos y ahora se ha ido con tu padre, ahora es tu Reina.

Sintiendo que la frustración se acumulaba, abandonaste la reunión del consejo inmediatamente, Rhaenyra no muy lejos de ti. No había forma de que te sentaras a escuchar a gente a la que no le importaba tratar de explicar por qué esto sería bueno para el reino.

Te sentaste en el Bosque de Dios, con tu libro en la mano mientras pensabas en el día en que perdiste a uno de tus mejores amigos. No había nada que pudiera describir la soledad que habías sentido ahora, primero Alicent Hightower, ahora la Reina, se había casado con el rey, y luego tu mejor amiga se marchó a una gira de hombres que querían casarse con ella. No podías enfadarte con Rhaenyra, al fin y al cabo es la Princesa, y la heredera al Trono de Hierro, para desgracia de Daemon.

Habías oído hablar de sus victorias en las Piedras Escalonadas, y te preguntabas si volvería pronto al capitolio. Siempre habías observado a Daemon durante tu estancia en la Fortaleza Roja. Su naturaleza caótica era siempre entretenida de observar, por no hablar de las miradas que te dirigía cuando nadie más miraba.

No es que tuvieras una relación de tú a tú con el Príncipe, habías hablado con él entre mucha otra gente, pero no podías evitar desear que alguna vez se acercara a ti por su cuenta. Nunca lo hizo, y una vez exiliado, la corte se convirtió para ti en una tarea tediosa.

Te sacaron de tus pensamientos cuando oíste el murmullo lejano de gente que hablaba animadamente, pasos igualmente alborozados. Sin pensarlo, dejaste tu libro para ver de qué se trataba la conmoción, ya que no habías oído el alboroto de la gente en más de dos meses. Te quedaste boquiabierto cuando viste a Rhaenyra caminando por el pasillo, sin darte cuenta corriste hacia ella. Chocasteis bruscamente, Rhaenyra riendo mientras te abrazaba también, "Oh mi Rhaenyra no tienes ni idea de cuanto te he echado de menos," le gimoteaste mientras os abrazabais.

"No Y/N, no creo que te des cuenta de lo mucho que te he echado de menos", se ríe entre dientes.

Te sientas allí por otro momento antes de separarte, "Pensé que tu gira era mucho más larga", dices mientras te arreglas el pelo y te vistes.

"Tenías razón en tus pensamientos, ni siquiera había terminado la mitad de mi gira. No soportaba escuchar a los hombres hablar de lo mucho que querían mi sangre valeryana para sus futuras nenas", suspiró.

Yo no lo vería así, princesa. Eres la futura Reina, y el hecho de que tengas elección en el asunto es algo que muchos no tienen".

Te mira con expresión sombría: "Bueno, al menos tu padre no quiere que te cases con un hombre con un gran castillo para asegurarse de que su linaje no se acabe".

"No, ya no se preocupa por mí, no desde que casó a mi hermana con el Rey. Parece que ya no está atento a nada de lo que hago, ni siquiera me habla desde que nació el príncipe Aegon", apenas susurras.