Cómplice o verdugo

Todo o nada

Habían pasado dos semanas desde que Tomás había recibido la amenaza de Aldo, todos estaban dando su mayor esfuerzo para sacar adelante la empresa, pero estaba siendo muy difícil conseguir clientes en este momento por la crisis mundial. Leticia había buscado por todos los medios conseguir un préstamo, pero ningún banco estaba dispuesto a asumir el riesgo, sabían que CONCEPTOS era una empresa seria, pero se había visto envuelta en un embargo y pese a que estaba recuperándose exitosamente la economía del país los hacía ser muy precavidos y el dinero que había recibido como pago por Aurora lo había metido en su totalidad en Filmo Imagen como inversión y no disponía de él. Fernando tampoco había conseguido un préstamo a título personal puesto que ya no tenía propiedades que respondieran por él como una hipoteca, las había vendido para cubrir parte de la deuda y aunque había llegado a un arreglo para que le fueran devueltas en cuanto tuviera una mejor situación económica los bancos no se fiaban. Lety había propuesto hacer un nuevo préstamo con Filmo Imagen, pero en el banco les habían advertido que si eso llegaba a suceder lo tomarían como fraude y rematarían ambas empresas, por lo tanto, no se podían arriesgar a hacer ese movimiento.

F- doña Lety, estoy preocupado.

L- yo también don Fernando, se me están acabando las opciones para liquidar la deuda y el tiempo nos está cayendo encima.

F- busqué por todos los medios sacar un préstamo, pero fue imposible.

L- Aldo me citó para la hora de la comida, a lo mejor recapacitó y viendo las condiciones en las que estamos acceda a extender la fecha de pago.

F- yo voy con usted.

L- es mejor que vaya yo sola, no me lo tomes a mal, pero digamos que tú no eres santo de su devoción y si existe la mínima posibilidad de que Aldo nos ayude la voy a tomar.

F- pero Lety, no quiero que estés a solas con él, no me da buena espina.

L- no te preocupes, en el fondo Aldo es una buena persona, es solo que está herido.

F- será todo lo bueno que tú digas, pero un hombre herido es capaz de hacer muchas cosas.

L- no creo que sea capaz de hacerme daño, déjame hablar con él a solas para ver que puedo conseguir.

F- mmm está bien, pero por favor cualquier cosa sospechosa me llamas de inmediato, ¿a dónde van a ir a comer?

L- me pidió que nos viéramos en Le Noir.

F- está bien, avísame cuando vengas de regreso. Te amo Lety.

L- yo te amo a ti, sin importar nada y pase lo que pase siempre te voy a amar.

Llegó la hora de la comida y puntualmente llegó Leticia al lugar acordado y allí estaba Aldo esperándola, tenía una sonrisa de triunfador, algo que desconcertó un poco a Lety.

Al- Leticia, que gusto verte de nuevo, te ves muy hermosa.

L- hola Aldo, muchas gracias.

Al- ¿cómo has estado?

L- bien, preocupada por la situación de la empresa.

Al- pues para eso estamos aquí ¿no? Te tengo una propuesta a la que sé que no te podrás negar – pedimos la comida y mientras esperábamos le hacía conversación de otros temas, sabía que estaba desesperada por saber lo que le diría, pero aprovecharía esta comida hasta el último momento.

L- Aldo por favor, dime ¿cuál es tu propuesta?

Al- mira, yo sé lo importante que es para ti CONCEPTOS, es cierto que te has equivocado con respecto a Fernando, pero todos cometemos errores, a pesar de eso estoy dispuesto a perdonarte.