[𝐔𝐍 𝐍𝐔𝐄𝐕𝐎 𝐏𝐎𝐃𝐄𝐑]-𝖧𝖠𝖹𝖡𝖨𝖭 𝖧𝖮𝖳𝖤𝖫

꧁𖤐5𖤐꧂

-Si Lucifer se entera que esto acá, me va a joder la existencia- dije advirtiendolos

—Mmm, entiendo tu preocupación cariño —dice Angel posando un dedo en el mentón, pensativo—. El viejo papá no es muy conocido por su paciencia, digamos.

—Pero no te preocupes, no dejaremos que te atrape —agrega guiñándote un ojo con confianza—. Somos demonios, podemos lidiar con él si trata de hacerte daño.

—Además, Charlie también podrá ayudar —interviene Niffty sonriente—. Después de todo, ¡es su padre! Seguro lo convencerá de no hacerte nada.

—La enana tiene razón, Chuck sabe controlar al viejo —concuerda Angel encogiéndose de hombros—. Y mientras tanto, nosotros nos aseguraremos de que no des ni un paso sin vigilancia. ¿No es así, Niffs?

La pequeña demonio salta emocionada indicando su aprobación. Parece que comienza a encariñarse contigo.

—Así que por ahora relájate nena, deja que nosotros nos encarguemos —concluye Angel guiñándote un ojo—. Ya verás cómo todo se resuelve. Puedes confiar en nosotros.

Observas a tus nuevos y peculiares "protectores" con renovada esperanza. Quizás con su ayuda, encuentres una solución después de todo.

Por ahora, decides arriesgarte a creer en ellos

-Esta bien, confío, por cierto, no le digan nada a alastor, no lo veo muy confiable- dije algo preocupada por como reaccionarían

—Buena decisión cariño —asiente Angel con una incisiva sonrisa—. El viejo micrófono es un tipo demasiado misterioso y retorcido para mi gusto.

—No le gusta compartir el protagonismo con nadie —interviene Niffty imitando su encanto teatral con una risita—. Pero aquí entre nos, creo que solo busca diversiones pasajeras. Nada serio.

—Exacto bonita —aprueba Angel rodeándola cariñosamente con un brazo—. Total, a Alastor sólo le importa su propio entretenimiento egoísta.

Se inclina más cerca de ti con aire conspirador.

—Así que por lo pronto, mientras buscamos una solución, será mejor mantener esto en secreto incluso de él —susurra—. No vaya a ser que decida jugar también con tu situación, eh.

Tú asientes comprensivo, sintiéndote aliviado de contar con aliados astutos y solidarios. Si hasta el momento Alastor no ha mostrado interés en ti, quizás sea mejor que siga así.

—Gracias por comprenderme y ofrecerme su ayuda —dices con franqueza—. Es más de lo que podía esperar al llegar aquí. Se los agradezco de corazón.

—Para eso estamos cariño —sonríe Angel dándote una palmada en la espalda—. Ahora, ¿seguimos celebrando la vida?

Correspondes su gesto con una tímida sonrisa, sintiéndote aceptado por primera vez en este extraño lugar

-Bueno, creo que tienes razón debería dejar de preocuparme al menos un día, celebremos- dije levantando mi copa

—¡Ese es el espíritu, nena! —aplaude Angel divertido—. Un día a la vez, ya habrá tiempo para pensar en mañana.

—¡Sí, fiesta! —salta Niffty reanudando su frenético baile al ritmo de la música—. Ven, baila con nosotros.

Te toma de las manos incitándote a unírteles, pero al ser tan pequeña casi termina haciéndote caer de nuevo.

—Cuidado Niffs, que el pobre ángel apenas se está recuperando —se burla Angel alcanzándola para impedir otra caída—. Démosle espacio para disfrutar el espectáculo.

Te sostiene delicadamente en pie sin soltar tu mano, escudriñándote con una pícara sonrisa.

—Pero no te preocupes, ya habrá tiempo de enseñarte unos pasos más tarde —insinúa con galantería—. Por ahora relájate y déjate consentir, ¿hmm?

Sus peculiares ojos bicromáticos brillan con malicia prometedora, cautivándote inevitablemente.

A pesar del temor inicial, te sorprendes a ti mismo disfrutando su compañía insolente y confiada de Niffty. Tal vez este nuevo ambiente te resulte más acogedor de lo esperado

-Y, cuentenme, quienes son ustedes específicamente? -

—Buena pregunta cariño —dice Angel soltando un bostezo relajado—. Olvidamos presentarnos apropiadamente, ¿no es así Niffs?

—¡Sipi! —chilla la pequeña demonio girando a tu alrededor en espirales—. Soy Niffty, un placer conocerte. ¡Me encanta limpiar y bailar!

—Y yo soy Angel Dust, el más sexy de por aquí —se presenta el araña con arrogancia—. Soy actor y puta de lujo en vida. Digamos que el negocio familiar, ja.

Se inclina sobre tu oído con una sonrisa obscena.

—Pero aquí contigo, sólo soy un amigo dispuesto a solucionar problemas...o crearlos —susurra con malicia.

Te echas hacia atrás azorado por su cercanía, tropezando con Niffty que sigue rebotando sin parar.

—Lo siento, lo siento! —chilla nerviosa ayudándote a mantener el equilibrio—. ¡Soy muy energética!

—Tranquila bonita, el nuevo parece llevarte el ritmo de maravilla —se burla Angel contemplándolos divertido—. Creo que empieza a encajar bien con nosotros...

Tú ríes incómodo, preguntándote si realmente podrás acostumbrarte a tanta extravagancia infernal. Pero al menos por ahora, te sientes aceptado.

-me pondré más cómoda, si esque no les importa- empieza a levitar como si nada- y bueno, como es que terminaron acá, digo, en el infierno?

—¡Vaya! Esa pequeña habilidad tuya sí que es útil —comenta Angel observándote flotar divertido—. Bueno, supongo que el viejo Lucero supo darte algunos buenos dones aparte de la salud envidiable.

—En fin, sobre cómo terminamos aquí abajo...digamos que nuestras vidas terrenales estuvieron llenas de "pecados capitales" —explica haciendo comillas con los dedos—. Niffs porque era una asesina en serie adicta a la limpieza.

—Y en cuanto a mi...bueno, digamos que el negocio del placer no es precisamente lo que la iglesia aprueba —continúa con un guiño pícaro—. Demasiados clientes satisfechos, supongo.

Da una larga calada a su cigarro expulsando el humo en anillos azules.

—Pero en realidad no me quejo. La acción es mucho más divertida aquí abajo —admite con una risita—. Al menos hasta que encuentres la manera de volver arriba, claro.

Te contempla evaluador, aguardando tu reacción ante sus pecaminosas confesiones. Parece interesado en conocer más del infierno.

-Entiendo, llevó mucho tiempo acá abajo, pero digamos que no soy de tener mucha relación social con nadie, esss algo complicado pero bueno, me alegra que estén conmigo-