Cap 2: Sentimientos

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Derrian: ...A mí también, se ha vuelto muy recurrente metiéndose en la cabeza de los demás, creando falsas esperanzas. Es una verdadera molestia...

-...

Un lugar completamente diferente, donde un claro azul iluminaba. Lleno de demonios que estaban recostados en distintos lugares de aquel sitio. Sin ganas de moverse y los pocos que lo hacían solo se arrastraban.
En el medio, había una gran y redonda cama, la cual se veía increíblemente cómoda, y sobre ella, había un muchacho recostado. De tez pálida y cabello rubio platinado. No estaba dormido, estaba escuchando la conversación de los tres chicos en aquel bar / café.

-...

Con lentitud se sienta y cierra sus ojos con una leve sonrisa.

-¿Sigue en pie conocernos algún día?

Amenadiel: Si, pero dudo que se pueda ahora, debo atender el pedido de mi hermano

-Qué lindo, pones tu deber antes que tu corazón. Aunque creo que a veces es al revés, por algo decidiste no ser el Demonio Principal de la Lujuria

Amenadiel: Respeto a mi hermano. Pero cuando me has hablado de ti, de donde estas, de quien eres... de como luces. A veces me replanteo si decidí bien

-¿Y de lo que te gustaría que hagamos?

Amenadiel sonríe y dando un suspiro abre los ojos.

Amenadiel: Tengo que seguir con mi trabajo Belfegor, hablaremos en otro momento

Belfegor: ...Llámame... Jhaddiel

Tras terminar de hablar el peli negro, ingresa para sentarse y encontrarse con Joan.

-¡...!

Al terminar de besarse, ambos se miran sorprendidos y se escucha a la gente exclamar y a la policía llegar rápido.

Joan: Tsk, sígueme...

Jacket: Tu... acabas de besarme

Joan: Sí lo sé, quiero que tengamos sexo

Jacket: ¡¿Q-Qué?! ¡Pero acabamos de conocernos...!

Joan:
No me importa

Jacket:
¿Y-Y no deberíamos ver si alguien salió lastimado allá?

Molesto, Joan voltea para verlo y lo toma con fuerza de la entrepierna.

Joan:
Quiero que uses esto conmigo

Jacket: ¡J-Joan! ¡Espera, qué...!

Ambos estaban muy sonrojados, Jacket asombrado y Joan muy inquieto y pensando.

-Esto es tan incómodo, yo no soy así y ni siquiera sé si lo estoy haciendo bien. Tal vez... si no sonara tan desesperado...

Jacket: Oye, de verdad no creo que esto sea una buena idea...

Joan: ...Me gustas

Jacket:
¿...Qué?

Joan: Te vi y... me gustaste. Es por eso que te seguí y... quería pedirte una noche juntos

Aquello sonroja más al peli rojo quien traga saliva y presta atención al cuerpo de Joan.

-...

Y asiente.
Finalmente se encuentran en una habitación para tener ese tipo de encuentros. Joan entra al baño y Jacket se ve en un espejo nervioso.

Jacket: S-Será mi primera vez. Debería... ¿Relajarme primero? B-Bien, me voy a desnudar y poner en la ca... ¡...!

Al voltear ve a Joan sentado en la cama casi desnudo y muy sonrojado. El peli rojo tartamudea y aquello avergüenza más al rubio quien intentaba no mirarlo mucho.

Joan:
¿...Q-Qué miras tanto? Solo... solo ven aquí...

Aun nervioso, Jacket asiente y se pone frente a él mientras se desviste. Joan lo toma de los pantalones y aún más sonrojado se lo desabrocha mientras pensaba.

-Bien, tranquilo... puedo hacerlo. A-Además me informé lo suficiente en saber qué es lo que tengo que hacer para hacerlo sentir bien...

Se asombra del tamaño del miembro que tenía el muchacho y como se iba poniendo más y más erecto.

-...

Ninguno dijo nada y entonces, Joan lo introduce en su boca para comenzar. Los suspiros del peli rojo no se demoran en aparecer, y prefirió taparse la boca y mirar con atención como lo complacían.

Jacket: Se siente extraño, pero no quiero que se detenga... siento... siento que...

Joan: ...No puedo creer que esté haciendo esto

Pensó cada uno en esa situación. Cuando el rubio lo intenta ver a los ojos lo nota diferente. Dichos ojos brillaban de un intenso color amarillo y eso lo hace detenerse.

Joan: ¿... Jacket? Tus ojos...

Se asombra al darse cuenta de que sea lo que sea que le esté pasando, se estaba apoderando de él. Y antes que pudiera decir o hacer algo, es tomado bruscamente por el peli rojo y lanzado a la cama. Lo abren de piernas con fuerza y lo penetran sin ser gentil en lo absoluto.

El grito del rubio sin duda demostró dolor, miedo y confusión. Sintió como se le cortaba el aire y como golpeaban su interior con fuerza. Presiona sus dientes y comenzaba a lagrimear. Sentía que se ahogaba con sus propios gritos y solo escuchaba suspirar a Jacket totalmente fuera de control y el impactante sonido de cómo lo embestían.
Se toma de las sábanas con fuerza y tembloroso e intentaba cerrar sus piernas sin éxito.

Joan: ¡E-Espera un minuto, él es muy fuerte y no puedo respirar! ¡Si sigue haciéndolo así... va a matarme!

Piensa. Se corren dentro de él y sin detenerse continúan golpeando su interior.

Joan: ¡M-Maldición, mi cabeza da vueltas! ¡Va a matarme! ¡A-Alguien... ayúdeme!

Las venas de Jacket se notaban en sus manos, brazos, piernas, cuello y se vuelve a correr dentro del rubio.

Joan: ¡Me estoy mareando... quiero vomitar! ¡...!

Él también se corre y allí mismo Jacket se detiene. Quedando inmóvil, parecía haberse detenido su tiempo. No respiraba, no hablaba y no parpadeaba, sus ojos pierden aquel extraño brillo y luego se deja caer sobre Joan, el cual temblaba.
Al sentir que caían sobre él, retoma el aire desesperadamente, estaba asustado y muy adolorido.

-...

Quería decir algo pero no tenía fuerzas, levanta una de sus manos intentando alcanzar algo que ni él sabía que era, y rindiéndose, se desmaya.

-...

Joan: ...En cuanto consigan lo que les falta podré ayudarlos con su ritual...

Jean: ¡Bla, bla, bla...!

Molesto, Joan mira a su hermano, ambos vestidos de negro y sentados en un bar. Jean interrumpe con burlas mientras que su hermano hablaba por su celular. Este lo miraba serio.

Joan: ...Si, luego hablamos...

Tras colgar se iba a poner a leer uno de sus tantos libros satánicos.

Jean: Atendiste esa llamada cuando te estaba hablando

Joan: Era importante. Y antes de que digas algo, sí, era más importante que seguir escuchando que quieres ser una puta...

Jean: ¿Y dónde está lo malo? Prefiero eso a volver a entregarme a alguien por amor

Joan nota a Jean mirar a otro lado desilusionado.

Jean: ...Como es posible que no me quiera. Estaba dispuesto a cambiar, de verdad yo...

Joan: Jean, escucha...

Jean: Ugh, olvídalo hermano. A ti tampoco te importo. Te la pasas haciendo esas cosas para un ser que quizá ni exista

Joan: Sigo el camino de madre. Y tu...

Ambos se miran.

Joan: ¿Qué diría madre si escuchara el camino que vas a tomar?

Jean: ¿Y por qué no se lo preguntas? Eres tú el que puede "Hablar con los muertos"

Joan: No es tan fácil como piensas...

Jean: Tsk ¿Lo ves? Déjalo ya. Solo desperdicias tu vida...

Jean se levanta y retira de aquel lugar. Se habían reunido por él, para esperar tener algún aliento o consejo por parte de Joan, su único familiar y eso jamás pasó.
Volviendo a ver su libro, el rubio se molesta.

Joan: ...Idiota

Había dicho eso último tras abrir sus ojos lentamente, respondiéndole a la nada. Había soñado aquello. Había revivido uno de sus tantos recuerdos.

-Tsk...

Se sienta muy adolorido y no ve a Jacket por ningún lado.

Joan: ¿Cuánto tiempo... estuve dormido?

Se rasca la cabeza e intenta vestirse deprisa.

Joan: Al menos envié a ese maldito Trono al infierno y podré irme...

Pero.

Amenadiel: No está en el infierno

Joan: ¡¿Qué dices?!

Tanto Joan como Amenadiel estaban en el café, en una tarde tranquila. El rubio golpea la mesa con ambas manos y el peli negro se cruza de brazos.

Joan: ¡No bromes conmigo! ¡Hice todo al pie de la letra! ¡Ese Trono casi me mata anoche!

Amenadiel: Vaya ¿De verdad?

El peli negro se ríe.

Joan: ¡No te rías! ¡Es enserio!

Amenadiel: Mi hermano te concedió la inmortalidad ¿Y dices que casi te matan?

Molesto, Joan guarda silencio.

Amenadiel: Los Tronos, como te había dicho antes, poseen mucho conocimiento y fuerza, en especial fuerza. Se pueden teleportar a otros lugares en una fracción de segundo. Simplemente no se dejó atrapar

Joan:
¿Y eso es todo? ¿Así termina esto?

Amenadiel: Claro que no. Te encomendaron llevarlo al infierno y no te iras hasta cumplir eso. El Diablo cumplió con tu petición cuando ya deberías estar muerto hace tiempo. Si tú no cumples con tu parte del pacto, este se anula y...

Da un chasquido.

Amenadiel: ...Tu corazón se detendrá. Así de fácil

El peli negro se levanta para irse de aquel lugar.

Amenadiel: No se ira de la ciudad. Así que búscalo y termina con la labor

Mordiéndose su pulgar derecho, el rubio se molesta.

Joan: ...Significa que tengo que volver a tener sexo con él

Comienza a recordar todo lo que le hicieron y se sonroja bastante.

-A juzgar por tu cara, sí que lo pasaste bien anoche

Asustándose, el rubio ve sentado frente a él a su amigo.

Joan: ¡¿L-Lele?! ¡¿Qué haces aquí?! ¡Deberías estar estudiando!

Lele: Eso hacía pero me volvió a hablar Belfegor

Joan: Ugh, Lele, ya te dije que...

Lele: ...Dice que el infierno peligra y pronto te enviaran a alguien

Joan: ¿Qué?

Lele: Y también dijo sobre la ubicación de un Trono. Que si no quieres morir que vayas al callejón del Club Nocturno Lust

Joan: ¿Allí esta...? ¿...?

Ve a su amigo retirarse.

Lele: Solo vine a eso, se lo escuchaba preocupado ¿Lo ves Joan? A veces hay que escuchar a ese Demonio, y yo lo escuché lo suficiente como para saber cuándo molesta y cuando no

Tras irse, Joan se lo queda mirando y luego se apresura en salir de ahí para dirigirse a donde le indicaron.
Ignorando a la gente del lugar, no se dio cuenta que habían varios muchachos mirándolo en un mesa aparte.






Capítulo 3

Seventh Heaven 4 Special (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora