𖥸십𖥸

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El tiempo pasaba tan rápido, como pareja unida en compromiso después de decidir formalmente y con seriedad tener hijos, tuvieron su primer retoño, Niki de ahora diecisiete años, de el siguió Yeji de catorce años, fue la adoración por ser la segunda muy parecida a Hyunjin y por crear la típica "parejita", sentían que no podían con tanto regalo del cielo, luego siguió Jackson de doce años no tenía mucho parecido de Hyunjin pero si demaciado de Félix. Felix lloraba por ver que crecían tan rápido, sin embargo no se detuvieron pues siete años después del nacimiento de Jackson llegó Ji-Hoon de ahora cinco añitos, todos son la adoración de Félix, siempre soño con una casa llena de niños, de Hyunjin ni hablemos, según el " los niños arruinaron su privacidad, su trabajo y su tiempo a solas con Félix", pero aún después de "perder" todo eso los amaba con todo su corazón y no tiene favorito pero todos son una luz para sus días malos y depresivos, sin ninguno de ellos no sabría como vivir.

ᴘᴜsʜ ᴜᴘ



El pequeño Ji-Hoon corría por toda la casa, su papi Felix lo estaba buscando, esa tarde después de merendar decidieron jugar un rato pues Niki estaba en la escuela al igual que Yeji y Jackson de edades distintas, Hyunjin en el trabajo y solo ellos dos en casa, Félix también trabajaba pero la mayoría del tiempo lo hacía desde casa para tener tiempo para su hermosa familia.
Jugar con su papi solo el, amaba mucho Ji-Hoon porque tenía tiempo con Felix solo para el, sin hermanos ridículos que le quitaran toda la atención.
Se escondió dentro de la alacena en los estantes de abajo donde cabía mejor y no había forma de que se lastimara.

— Honie~ ¿donde estas? — Hablo fuertemente, pero con delicadeza incrustada, Felix mientras se asomaba hacia abajo de la mesa.

Sin duda tuvo que cambiar varias cosas de su pasado, empezando por la rudeza de hablar, el lenguaje, la paciencia, sobretodo paciencia pues después de que naciera Yeji el desastre sobraba, por eso se sorprendió al saber que de alguna rara manera tenía mucho autocontrol, por lo menos el si, Hyunjin en cambio, explotaba por cualquier cosa, tanto así que una noche luego de cenar y de Félix consolar a un pequeño Jackson regañado, fue obligado a dormir en el auto, Félix tal cual una mamá oso que siempre se la pasa salvando a sus criaturas. Pero volviendo a lo actual...

No fue hasta que accidentalmente Ji-Hoon dejó caer el paquete de galletas que estaba apuntó de abrir, su papi lo encontró gracias al ruido.

— ¡Te encontré, cariño! — Grito suavemente mientras lo sacaba y le hacía cosquillas.

— papi, ba-sta— Decían el niño entre carcajadas— Tu ganas, tu ganas— Grito riendo mientras Felix lo besaba en las mejillas.

Se levantaron del suelo, ese día Ji-Hoon no tendría clases por el hecho de que su maestra enfermo y bueno, fue punto a su favor, quería quedarse con su papi en casa.

— ¿Me ayudas a cocinar?, tu papá y hermanos llegaran pronto y con lo tragones que son, pedirán alimento en cuanto pasen la puerta— Bromeó mientras lo cargaba en sus brazos, los dos rieron.

— ¡¡Si!!, pero no quiero que lleguen— Rápidamente el entusiasmo se deciso de el cuerpo del pequeño niño castaño de tan sólo cinco añitos, Felix lo miro confundido y preguntó.

— ¿Porque lo dices cariño? — lo sento con cuidado en la barra aún lado de la estufa para ir al refrigerador por ingredientes, escuchando atento la respuesta de su pequeño angelito.

— Po'que ya no me pestadas mucha atención, po'que Yeji Noona quiere platicar sobre chicos todo el tiempo contigo, Jackson Hyung te abraza mucho y Niki Hyung apenas te ve y no se quiere despegar ni para ir al baño y papá es muy empalagoso y gruñon, cuando quiero estar contigo papi— Ji-Hoon hizo cara achicopalada con pequeñas lágrimas en los ojos, y esque era muy cierto, en cuanto llegaban de escuelas y trabajo estando todos en casa, nadie se quería despegar de Felix por ningún motivo, muchas veces cuando están enfermos, si, o cuando Hyunjin esta irritado, porque los regaña y no los deja acercarse a su mamá (Felix).

ᴘᴜsʜ ᴜᴘ HyunlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora