N/A: Hola! Perdón por el desastre, pero arreglé el capítulo anterior y le agregué un par de cosas que son importantes, así que por favor regresen a leer la última parte para poder entender lo que sucederá acá. Gracias por leer!!
Violeta regresó a la mansión mucho antes de lo que esperaba Edna. La chica entró claramente frustrada, Jack Jack estaba en la cocina, aún desayunando. Ella se acercó a la mesa y se sentó frente a su hermano.
-¿Vi?, ¿Cómo te fue? ¿Descubriste algo?
-Detesto a los millonarios.
-Pero la tía Edna es como... muy millonaria.
-Dije los, en masculino.
-Ok... Traeré a Tía Edna.
El niño se apresuró a comerse su emparedado y se teletransportó, poco después se escuchaban los pasos apresurados de Edna, que al llegar, recogió los platos de Jack Jack y luego se sentó a lado de Violeta.
-Jackie dice que estás insultando a mi estirpe.
-Ugh... Lo siento, tía. Tuve un mal día.
-Chica, son las 11 de la mañana, el día no ha empezado aún. ¿Qué pasó?
-¿Sabías que Feinmann también vive en una mansión?
-Una mucho más grande y con muchísimo menos clase, por supuesto.
-Bueno, pues uno pensaría que con un banco en quiebra, tendría menos seguridad, o que al menos sería más accesible para resolver el caso del atraco más fácilmente. ¡Pues no! Este sujeto tiene alarmas de proximidad en cada cuarto, guardias en todos lados, ventanas blindadas... Y un mayordomo muy grosero.
-No pudiste hablar con Feinmann.
-No-. Violeta suspiró -Sería más fácil entrar al pentágono... Intenté hablar con él por las buenas, y me dijeron que el señor Marion no acepta visitas sin una cita previa-. Dijo, simulando una voz sofisticada. -Y cuando no me lo permitieron... Bueno, traté de entrar por la ventana, pero no tenía el equipo necesario para evadir un cargo por invasión de propiedad.
-Ay, linda. Claro que no ibas a entrar.
-¿Cómo dices?
-Conozco a Marion, un hombre desagradable y arrogante si me lo preguntas, además de paranoico y más rico de lo que debería. De haber sabido a dónde ibas esta mañana te habría recomendado no ir en absoluto.
-¡¿Entonces cómo sigo el caso?!, no puedo dejarlo así nada mas.
En una velocidad impresionante, Edna tomó el periódico que estaba en la mesa y azotó la cabeza de Violeta con él.
-¡Auch!
-Escucha niña, obviamente no espero que hagas menos que todo en tu poder para resolver este caso, tu caso. Pero, ya te lo dije, tengo el disgusto de conocer a Feinmann.
-Bien, lo siento. ¿Entonces qué me recomiendas?
-Eres afortunada, muñeca. Vas a necesitar un vestido. Te haré algo lindo para la noche.
-¿Para qué-
-Los llevaré a una reunión de la Sociedad de Empresarios. Evito ir porque las personas que asisten me repugnan, pero justo por eso estará ahí Marion Feinmann, líderes de la política y toda aquella persona con la que te gustaría hablar si buscas el meollo de este caso tuyo.
-¿Dijiste "los llevaré"?
-Claro, no puedo dejar a Wilbur con Jack Jack, esos dos harán volar mi mansión si los dejo solos.
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Bastante visible para mi (Wilbur Robinson x Violeta Parr)
RomansVioleta Parr finalmente ha decidido separarse en el negocio familiar para hacer su propio camino como heroína, y el primer paso es diseñar un nuevo traje con su tía Edna. Ahora pasa un día a la semana con su enérgica tía diseñadora, su hermano pequ...