Hola, mi nombre es Samantha, solo Samantha soy huérfana y vivo en un departamento con mi amiga América.
A los 5 años me dejaron en un orfanato en donde éramos golpeados por todo, pero a los 8 años escape, cuando cumplí los 10 años de andar vagando por las calles me encontraron y volví a ese orfanato, a los 15 años volví a escapar con mi amiga América y, nunca nos volvieron a encontrar, ahora que les conté un poco de lo que pasó.
Me llamo Samantha y tengo 17 años apunto de cumplir los 18 en un par de meses, mi estatura es de 1.75, me gusta patinar, leer, dibujar pintar y sobre todo jugar al baloncesto, tengo piel pálida y mi cabello es de color blanco o algo así, mis ojos son color azules cielo y soy delgada.
Nunca e creído en el amor, hasta que llegó aquella mujer hermosa vestida de morado y con un hermoso labial morado, sus labios morados.
América y yo trabajamos de meseras en un pequeño restaurante en donde ganamos bien, vivimos en un pequeño departamento y es muy acojedor, al lado del departamento están las canchas de básquet, América y yo salimos solo aveces, aún que aveces solo yo para salir a patinar.
Y mi amiga es morena, no tan alta le calculo unos 1.60 pues es mucho más enana que yo, en fin ella es delgada y es demasiado feliz, siempre me está haciendo reír, tiene ojos cafés y su cabello es negro, a mi me hubiera gustado ser igual a ella pero me tocó la mala suerte de tener piel pálida y cabello color blanco, toda la gente me mira, pero bueno ella es mi amiga.
Digamos que algo así soy 👇, obviamente no igual, pero algo similar.
Bueno como ya terminé de presentarme ahora sí, continuemos con la historia, mi historia en la qué se entromete la mujer de labios morados.