FERRY-LOVE-BOAT: Forever Mine

Capitulo 36

EL PUNTO DE VISTA DE MAYA

-¿Estás emocionado? - La puerta de mi oficina fue abierta abruptamente por una Andy definitivamente emocionada, solo escuchar el tono agudo de su voz me hizo estremecerme ligeramente. - ¡Faltan tres días para la boda!

-Si por excitado te refieres a tener la peor noche de sueño de mi vida, acidez estomacal que no desaparece con ningún antiácido y necesidad de correr durante veinticuatro horas al día, entonces sí. - Suspiré profundamente, sintiendo el peso de mis palabras y las reacciones de mi cuerpo ante ellas. Estaba demasiado angustiada y darme cuenta de esto me puso aún más ansiosa porque sabía conscientemente que no era así como debería sentirme tres días antes de mi boda y la insuficiencia de mis sentimientos se estaba apoderando de mí. - Realmente estoy tratando de no pensar demasiado en esta cuenta regresiva y, escuchando el consejo de Carina, estoy tratando de no obsesionarme con cada detalle relacionado con nuestra boda, estoy eligiendo confiar en Riley.

-¿Y sin embargo tuviste la peor semana de tu vida? - Andy arrugó la frente, sus brazos presionaron firmemente contra su pecho.

-Bueno, sí. - Me encogí de hombros, no había mucho que pudiera hacer más que obligarme a seguir los consejos de las personas que querían verme en un mejor estado. - Estaría mucho más estresada si me centrara en los detalles de la boda, eso es un hecho, y como realmente estoy tratando de ser una novia que confía en su organizador de bodas y llega a casa a una hora aceptable, Carina me está dando todo el sexo que quiero.

-Oh, eso es... - Andy arqueó ambas cejas sorprendido por mi revelación, sintiendo una ligera inquietud en el estómago ahora que me había escuchado a mí mismo. -¡Está bien! Es decir... ¡Excelente! Tienes que aprovechar al máximo todo el sexo que te está dando Carina.

-Realmente estoy haciendo eso. - Sonreí de reojo, volviendo los ojos hacia los papeles de mi escritorio, una nueva ola de aburrimiento me golpeó tan pronto como mis ojos recorrieron las primeras palabras en la hoja de papel. - ¿Necesitabas algo?

-No. - Andy puso ambas manos detrás de su espalda, su pecho se hinchó un poco más mientras respiraba profundamente. - Pero, solo por curiosidad, ¿a qué hora sueles salir de aquí para tener todo ese buen sexo con Carina?

-¿A las siete? - Fruncí las cejas confundida y volví a mirar a la mujer, con el bolígrafo aún presionado contra el informe que tenía delante. - Bueno, por lo general Carina quiere que regrese a casa a las siete, pero hoy está trabajando y no saldrá del hospital hasta entonces, así que usaré el tiempo extra para organizar algunas cosas.

-¡Venga, sí! Siete, es un momento decente, un gran momento en realidad, ni demasiado temprano, ni demasiado tarde, ¡un gran momento! - Andy habló apresuradamente mientras caminaba de espaldas hacia la puerta.

-¿Por qué suenas raro? - pregunté, todavía bastante confundido, pero tal vez su excitación se centraba en su deseo de salir de la estación a una hora aceptable después de mí.

-¿Me? ¿Extraño? ¡No soy raro! ¡Eres raro! Definitivamente más pálido de lo habitual, ¿estás seguro de que estás recibiendo suficiente sol? ¡Tal vez sea toda la preocupación por la boda! - La mujer abrió la puerta rápidamente, con una sonrisa temblorosa aún en sus labios, y salió de mi oficina mientras seguía hablando. - Encantado de hablar con usted, jefe.

-Muy raro. - Puse los ojos en blanco y me burlé.

-¡Maya! - Vic prácticamente gritó cuando me vio bajar las escaleras, sus ojos se abrieron casi cómicamente y arrugé la frente, tratando de contener la risa ante su reacción.

-¿Eh? - Agarré un poco más fuerte la correa de mi mochila, pero entonces se me ocurrió algo. - ¡Por favor, dime que no tienes ningún tipo de trabajo para mí, porque ya llego tarde!