𝟎𝟎 . 𝐄𝐋 𝐉𝐄𝐅𝐄 𝐘 𝐒𝐔 𝐄𝐌𝐏𝐋𝐄𝐀𝐃𝐀

1K 87 36
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Crecí en un lugar al cuál no podía exactamente llamar hogar, pues vivía junto con mi madre bajo el techo de la Familia Yang, una familia que nunca sufría por falta de dinero ya que eran dueños de una empresa de aerolínea que gozaba de gran éxito

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Crecí en un lugar al cuál no podía exactamente llamar hogar, pues vivía junto con mi madre bajo el techo de la Familia Yang, una familia que nunca sufría por falta de dinero ya que eran dueños de una empresa de aerolínea que gozaba de gran éxito.

Tal vez convivir con gente adinerada pueda ser bueno, pero para nosotras siendo unas simples empleadas del hogar todo era limitado, incluso la libertad.

He permanecido entre estas grandes paredes desde que tenía quince años, debido a que mi madre había firmado un contrato en el estipulaba que podía trabajar a cambio de un sueldo mucho más alto del promedio pero con la condición de que debía quedarse a vivir permanentemente, pues a estos jefes no les gustaba cambiar de personal tan seguido. Todos los que trabajan para ellos han permanecido incluso varios años aquí.

Al ver aquella cifra de números mamá no dudó mucho en aceptar, necesitaba el dinero para mantenernos ya que aquel hombre que no merece ser llamado padre la había abandonado con cuentas que pagar y la cambió por otra mujer igual de inservible que él.

Por suerte yo pude seguir estudiando, con lo que ella ganaba era más que suficiente para mandarme a una buena escuela.

Aun así, detrás de mí siempre había un niño que me seguía como sombra.

𝐈𝐍𝐌𝐀𝐃𝐔𝐑𝐎 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora