My Only Love • JJK (COMPLETA)

Capítulo 2

El silencio en la habitación era muy fuerte, NaRi intentaba procesar lo que su novio le había dicho, según JungKook, ella había fallecido el día de San Valentín en un accidente de moto. Había ocurrido cuando NaRi regresaba del trabajo, un compañero se había ofrecido a llevarla, la chica fue la única persona fallecida en dicho accidente trayendo una trágica pérdida para su familia y su novio. La castaña quien vestía aún con su pijama sostenía la bolsa de hielo en la muñeca de su novio.

—¿No recuerdas nada realmente?—preguntó él sin dejar de verla.

—Lo último que recuerdo fue salir de la universidad, dirigirme a la floristería y quedarme dormida en el bus—con cuidado movió la bolsa—No hay ningún accidente en mis recuerdos.

—Te extrañé—ambas miradas se encontraron. JungKook tragó con dificultad luchando por controlar el temblor de su voz—Todos...lo hicimos.

Ahora entendía su estado.

—Estoy aquí ahora—alejó la bolsa de hielo aplicando la crema en su muñeca—Lo siento.

—¿Por qué?

—Por haberte hecho sufrir así, nunca te había visto llorar—indicó.

—Creo que eres la primera persona en disculparse por haber...

—¿Muerto?—lo miró. Sonrió ladinamente consiguiendo una pequeña sonrisa de su parte—No tiene mucho sentido, ¿Cómo es posible de que esté aquí?

—No lo sé—y no mentía—¿Cómo llegaste aquí?

—Desperté en la cama sin ti. Me levanté encontrando algo de ramen en la mesa y a ti quejándote en el sofá—JungKook se quejó ante el apretón en su mano herida—Lo siento—NaRi se encargó de vendar su muñeca bajo la mirada de su novio—¿Te sientes un poco más tranquilo?

No. Su novia fallecida ahora resultaba estar viva por arte de magia, ¿Qué demonios pasaba?

—La verdad es que no sé como sentirme.

—Dijiste que morí en esta misma fecha hace un año, ¿No?—él asintió—¿Y si al finalizar el día...ya no estoy aquí?

Eso lo asustó.

—¿Por qué lo dices?

—Tal vez...esto es un milagro de un día—se encogió de hombros—La verdad no lo sé, mi mente está en blanco ahora mismo, enterarme de repente que todos creen que estoy muerta...—hizo una pausa extensa suspirando con frustración. Guardó las cosas del botiquín al acabar—Voy a preparar el desayuno. Con el estómago vacío no puedo pensar.

—¿Quieres que te ayude?

—Con la venda en tu muñeca, creo que es mejor que no lo hagas—se levantó de la cama dejando el botiquín en el baño. JungKook tomó el cargador de su teléfono en la mesa de noche conectándolo, recordó lo de anoche perfectamente. Se había quedado dormido entre el dolor y el llanto, se dejó caer en la cama hacia atrás sin entender que había pasado.

—¡Jeon JungKook!—escuchó el grito. En segundos salió corriendo llegando a la cocina donde estaba NaRi—¿Por qué demonios lo único que hay en el refrigerador es agua y cerveza?, en este estante sólo hay ramen—acusó—Hice las compras hace poco y...—tuvo que corregirse. Para ella nada había cambiado, en cambio para JungKook era lo opuesto, el chico fue directo a ella abrazándola.

No sabía que había ocurrido, pero moriría por quedarse así.

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El supermercado se encontraba con poca gente esa mañana, NaRi insistió que debían comprar algunas cosas para el refrigerador o la cocina en sí, JungKook sostenía la cesta de compras con una mano y con la otra se mantenía aferrado a la castaña. Una pequeña sonrisa se dibujó en sus labios, ¿Cómo era posible que una persona fuera capaz de curar todo el dolor de ese año?, su corazón latía con fuerza, como si finalmente volviera a recuperar los pedazos.

—Creo que esto...—NaRi se interrumpió así misma. JungKook volvía a tener sus ojos brillosos—Oye, ¿Estás bien?—el chico vio esa forma tan dulce que lo observaba, atrajo a su novia con su brazo, rodeó sus hombros depositando un beso en su mejilla—¿JungKook?

—Si me distraigo un segundo siento que te irás—susurró en su oído—Te extrañé demasiado.

NaRi acarició su espalda sin poder decirle que lo entendía. Ella todavía no sabía que ocurría, se separó un poco colocando su mano en su mejilla, depositó un corto beso en sus labios sonriéndole un poco.

—Te amo.

JungKook tragó con dificultad conteniendo las lágrimas de nuevo. Besó a NaRi saboreando su boca como no lo hizo en ese año, ella tuvo que colocar su mano en su pecho deteniéndolo.

—Podemos seguir en casa si quieres, en este momento tengo...muchas preguntas.

Y no era la única.

—No tengo idea de cómo fue posible.

—¿Hiciste algún pacto con el diablo?

—Claro que no.

—¿Qué ocurrió con mis padres?—quiso saber. JungKook caminó a su lado en ese pasillo sin soltar su mano.

—Les duele haber perdido a su hija, fue difícil para ellos también.

NaRi miró al suelo.

—Morí el día de San Valentín—susurró—Se supone que tenía un regalo para ti—recordó. JungKook la miró con cierto dolor.

—Ibas a darme unos bombones con una pequeña caja llena de fotos y tarjetas sobre nosotros—ante eso, NaRi volteó a verlo—Encontré el regalo luego del funeral, lo habías escondido entre tu ropa en el armario.

—Funeral—repitió—¿Tuve un...entierro?

—No. Tus padres decidieron...cremar tu cuerpo.

—Eso explica aún más tu expresión de horror al verme. Como si hubieras visto un fantasma—y agregó—Sé que lo soy, pero...¿Cómo es posible?

—No lo sé, NaRi, no tengo una respuesta para esto.

La chica llevó la mano de su novio a su pecho.

—¿Sientes mi corazón?

—Sí—asintió—Está latiendo. ¿Hay algo que te duela?

—No, me siento normal aunque...perdida en realidad—miró alrededor olvidando lo próximo a comprar—Lamento haberte hecho sentir todo ese dolor—regresó su vista al chico—Se supone que no romperíamos el corazón del otro, soy una pésima novia.

—¿Y fue culpa tuya morir?—resopló—Estás aquí. No me importa nada más.

—¿No te parece extraño?

—Sí, mucho. Pero esa rareza te permitió estar conmigo de nuevo—besó su frente. NaRi lo abrazó teniendo muchos pensamientos en segundos.

Había perdido un año de su vida, parecía poco, para ella se sentía una eternidad.

:')