El esposo del profesor ¹ ↦Sugusato

Cap. 21

Los fans de la banda y el público en general no se esperaba que los primos de Satoru pudiera subir algunas fotos de la pareja o conviviendo con Geto, muchos aun creía que solo se trataba de un movimiento desesperado por parte de la agencia de la banda a pesar de que esta ya había dado un comunicado sobre el desconocimiento de la relación y que se apoyaba en todo al artista.

Era una mierda obviamente, Gojo había sido notificado por parte de la agencia con su abogado que si seguían adelante con todo eso sin comunicárselo al manager, al representante o a alguien de la empresa el pelinegro sería expulsado de la banda por incumplimiento del contrato.

Si antes de ese ultimátum Satoru quería derrumbar la empresa de entretenimiento de la banda ahora había sido retado y en su visión de todo eso solo lo obligaba a hacer caer la empresa y comprarla por el mínimo para poder sacarla de la quiebra. Era por eso que se encontraba saliendo de la empresa de su padre, después de una larga y extensa discusión con accionistas e inversores

Por más que quería comunicarle su decisión y plan a Geto, llegó a la conclusión de que no podía hacerlo aún, no es que no confiara en su pareja pero las personas a su alrededor no eran dignas de confianza sobre todo por ese maldito manager que no servía para nada más que para intentar amedrentar a Satoru.

Pues se llevaría un fiasco, el albino no le tenía miedo ni a su abuelo cuando estaba vivo, quien era quien lo podría desheredar y volver alguien común y corriente, ahora le va a venir a tener miedo a un don nadie que no sabe cuál es su maldito lugar.

— ¿De quien estamos planeando el asesinato? —preguntó la madre del albino mientras se sentaba a su lado en el comedor.

Gojo había llegado hacía algunos minutos antes de su padre a pedido de este para terminar de elaborar un plan de maniobrar.

— ¡Cielo deja de arrugar esa frente, que todo el maldito trabajo al tenerte se arruinara! —la Sra. Gojo colocó la mano bajo el mentón y elevo el rostro de su hijo para mirarlo más de cerca— ¿Qué has estado haciendo? ¡Tu rostro se ve fatal! ¿Has dormido bien?

— Poco...

— ¿Por? —la ceja alvina de la mujer se elevo mientras soltaba el rostro del contrario y cruzaba ambos brazos— ¿La escuela? ¿Necesitas que quitemos a Utahime de la dirección e intercambien lugares?

— ¿Qué? ¡Claro que no!... Aunque eso me servirá para recordarle quien manda —la sonrisa del albino se extendió por su rostro.

Su madre le dio un golpe para regresarlo de sus suelos viciosos.

— Deja de pensar en hacerle la vida imposible a Utahime, ustedes parecen de todo menos familia —le riño la mujer.

Gojo miró a su madre quien lo miraba con firmeza y soltó un suspiro antes de continuar, no es que tuviera miedo o algo por el estilo a su madre, pero conocía lo suficiente a esa mujer como para saber que eran como dos gotas de agua tanto física como mentalmente, no llegaría a ningún lado discutiendo con ella.

— El manager de Geto a estado siendo un grano en el culo, tuve que pedirle al abogado que detenga la filtración de nuestras fotos de bodas porque ese maldito hombre ha estado detrás de nosotros todo el tiempo. —Gojo alboroto su cabello un poco— ¡No entiendo que quiere! El principal problema con Hakari se terminó, encontraron al maldito amigo que faltaba, la chica despertó y podrá dar su testimonio próximamente, pero ese imbécil ve peor que yo salga públicamente con Suguru que el hecho de que uno de los amigos de Hakari que está en la cárcel es accionista de su maldita empresa.

— ¿Qué dijiste?

— ¿Que? ¿Sobre la chica despertando o sobre el manager de Suguru? —estaba confundido había hablado lo suficientemente rápido como para que su cerebro no procesa todo lo que había sucedido.