Capitulo 3: I Want You To Look At Me

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Después de aquella noche las cosas no mejoraron para mí, poco a poco notaba las razones por las que me sentía tan cómoda a su lado. Además de ser un lobo muy guapo, también lucía un físico muy espléndido, lo que podríamos llamar "cuerpo de espartano" por lo que hasta la más mínima provocación elevaba mi libido con bastante facilidad.

Verle trabajar, lucir sus músculos mientras levantaba cosas pesadas o que se quitara la camiseta sudada después de todo un día de rubro era todo un espectáculo para mí. Más de una vez terminé babeando con solo observar como el sudor bajaba por su pelaje tomando el camino que trazaban sus músculos, era una vista majestuosa.

Había rasgos suyos que me fascinaban bastante, su sudor no tenía mal olor, su pelaje siempre era bastante suave y cálido, aunque no cuidara mucho del mismo, unos ojos azules muy hermosos además de tener una voz grave y firme, a veces necesitaba susurrarme algo al oído y mi pelaje se erizaba ya que con su tono de voz era como un locutor profesional intentando seducirme, aunque a veces solo me decía "se me olvidó comprar papel higiénico" pero todo era un conjunto de dotes que me emocionaba. No puedo negar que más de una vez llegué a imaginar cómo serían sus hijos.

Siempre se dice que: Las hormonas de una mujer junto a la falta de insatisfacción sexual, aumentan en gran medida el apetito sexual.

Es posible que Mathew realmente no fuera tan perfecto, pero debido a mi fuerte ataque hormonal es posible que mi cerebro quitará cualquier desperfecto de mi cuñado impulsándome a cruzar la línea y saltar sobre él.

Los primeros días pude controlarlo un poco, pero después de una semana parecía una pervertida que solo se la pasaba masturbándose al ver a su cuñado y espiando cuando él estaba en la ducha. Aunque él tiene parte de la culpa, al menos considero que debía ponerme las cosas más difíciles, pero siempre que iba a su habitación la puerta nunca tuvo seguro y muchas veces se duchaba con la puerta del baño completamente abierta por lo que tuve mucha facilidad para espiarle y por ende cada día quedar fascinada por su físico mientras que me tocaba mirándole.

Esto duró alrededor de unos dos meses, prácticamente no salte sobre mi cuñado por pura fuerza de voluntad, no paraba de espiarle por las noches cada que tomaba una ducha, al igual que yo me masturbaba con bastante regularidad, al menos cuatro o cinco veces a la semana por lo que yo podría disfrutar bastante de verle disparar bastante semen en sus juguetes, incluso yo llegue a comprar algunos dildos para tener más acción mientras miraba a escondidas. Al inicio fue uno pequeño para divertirme, pero poco a poco fui escalando en tamaño hasta llegar a los 20 centímetros, pero aun así no llegaba a tener el grosor o longitud que tenía mi cuñado.

En este periodo de tiempo pude hacer unos pequeños experimentos ya que viéndole masturbarse descubrí que yo también le interesaba un poco, si un día teníamos algún pequeño accidente como verme en toalla, con poca ropa o de alguna forma muy comprometedora, solía masturbarse aún más rápido, por más tiempo e incluso más veces. Esto lo pude comprobar haciendo pequeñas pruebas, no usar sostén y ponerme algún vestido holgado para que se me vieran los senos con facilidad, usar shorts muy pequeños y ajustados o la clásica de usar falda corta sin ropa interior. Esos accidentes intencionales provocaban que Mathew se masturbara con mayor regularidad, era obvio que también estaba interesado en mi sexualmente, pero respetaba esa línea de ser cuñados.

Incluso una vez mientras limpiábamos en casa encontré una caja con mi colección de cosplay's que usaba para seducir a mi esposo, aproveché esta oportunidad con la excusa de "Que buenos recuerdos" para lucirme ante Mathew luciendo aquellos trajes muy sugerentes, era muy divertido verle nervioso mientras intentaba ocultar su erección, solo limitándose a

decir que se me veían bien. Se que ya para este punto quien le estaba provocando y pasándose de la línea era yo, incluso abusando demasiado de la amistad y confianza que teníamos entre ambos, pero aquel sentimiento de alguien que te desea con todas sus ganas me hacía muy feliz, hace bastante tiempo que mi esposo no me miraba como lo hacía mi cuñado, de alguna forma sentía que estaba recuperando lo que había perdido hace mucho tiempo.

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