*CAPÍTULO 5: EL DESENCUENTRO*

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El viento soplaba frío en la estación de tren. Rossi miraba el reloj con impaciencia. Su tren a París estaba a punto de partir, y Jason aún no había llegado. ¿Por qué no había contestado sus llamadas? ¿Por qué el universo conspiraba contra ellos?

Habían compartido momentos inolvidables: besos bajo la lluvia, abrazos bajo las estrellas. Pero ahora, la distancia amenazaba con romper lo que habían construido. Rossi se aferraba a la esperanza de que Jason aparecería en el último minuto, como en las películas románticas.

El altavoz anunció la salida del tren. Rossi sintió un nudo en la garganta. ¿Debía subir al vagón y dejar atrás todo lo que habían vivido? ¿O debía esperar un poco más, aferrándose a la posibilidad de un reencuentro?

Justo cuando estaba a punto de rendirse, vio una figura corriendo por el andén. Jason. Su cabello revuelto, su mirada desesperada. Rossi sintió que su corazón se rompía y se recomponía al mismo tiempo.

—¡Rossi! —gritó Jason, alcanzándola justo antes de que las puertas del tren se cerraran.

Ella lo abrazó con fuerza, sintiendo sus lágrimas mezclarse con la lluvia.

—¿Por qué tardaste tanto? —susurró Rossi.

Jason la miró con ojos llenos de arrepentimiento.

—Hubo un malentendido. Una carta que no debiste leer. Pero Rossi, yo...

Las palabras quedaron suspendidas en el aire. El tren comenzó a moverse, separándolos inexorablemente. Rossi extendió la mano hacia él, como si pudiera detener el tiempo.

—¿Qué carta, Jason? —preguntó, su voz quebrándose.

Él la miró con dolor.

—Una carta que hablaba de mi pasado. De errores que no puedo borrar. Pero también hablaba de ti, Rossi. De cómo cambiaste mi mundo.

El tren se alejaba, y Rossi sintió que su corazón se partía en dos. ¿Debía quedarse o seguir adelante? ¿Podría perdonarlo por el desencuentro?

—Te esperaré —dijo Rossi, con lágrimas en los ojos—. Siempre.

Y así, en medio de la estación desierta, Rossi y Jason se separaron. Pero el hilo invisible que los unía seguía intacto. El desencuentro solo era un capítulo más en su historia de amor.

Bajo las Estrellas FugacesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora