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Mark miro a Donghyuck con desesperación, debía de admitir que estaba un poco aterrado, aunque tal vez estaba siendo un poco exagerado.

-No hay forma de volver atrás, ¿no? -logró a preguntar antes de que el omega abriera la puerta.

-Por la loba Mark, solo vas a entrar a mi casa y nada malo va a pasar, ya te conoce todo el mundo -Donghyuck paso el dorso de su mano por su rostro, haciéndolo temblar- no te hagas males que no necesitas hyungie, todo va a estar bien.

Tomo una bocanada de aire, la verdad es que Donghyuck tenía razón pero igualmente le costaba un poco.

No era tan fácil como parecía, aunque ya era conocido por su familia pero esta vez era diferente, ya no era el amigo de Donghyuck, no, era mucho más que eso.

Aunque lo que más le ponía presión era que sus madres claramente sabían que sucedió entre ellos el día de la presentación de su hijo...

"Basta, estamos alterando a nuestro lobito, hay que relajarnos" se regaño mentalmente.

-¿Puedes darme un beso antes de que entremos? -Donghyuck le levantó una ceja, como si estuviera cuestionando su pregunta- ya sabes, para hacerme sentir menos nervioso.

Donghyuck se agacho un poco para quedar a la altura de su rostro y le dio una de esas sonrisas que Mark ya reconocía que estaban cargadas de maldad.

-Creo que deberías de demostrarme lo nervioso que estas, porque lo que me estas pidiendo suena más a que te quieres aprovechar de mi a que otra cosa.

Mark rodó los ojos, tratando de mostrarse un poco molesto ante Donghyuck cuando en realidad su corazón estaba super acelerado al escuchar como le hablaba de esa manera.

Aveces parecía un sueño estar al lado de Donghyuck.

-Oh vamos, eres la persona menos indicada para hacerme esos cuestionamientos Hyuckie -El mencionado soltó una pequeña risita- además, yo realmente me merezco ese beso, por todo el arduo trabajo que estoy haciendo y por ser un omega valiente como tú dices.

El aroma a miel y girasoles exploto a su alrededor, calmando a todo su sistema y haciéndolo suspirar.

Podía deducir que Donghyuck estaba feliz por la peculiar dulzura que tenía su olor y eso lo estaba llevando al borde la locura.

-Esta bien, pero me debes otro luego.

Y Donghyuck tomo su rostro para darle unos tres picos, uno tras otro, alterando a su lobo por completo.

-Dejen de besarse y entre de una vez, ¡Por la loba! -les grito Jeno a la vez que abría la puerta principal de la cabeza.

A Mark casi se le sale el corazón por la boca, maldita sea.

-¿Qué acaso no les dije que no los quería a ninguno de los dos verlos besuqueandose con sus novios en mi casa? Voy a tener que dejarlos sin comer para que entiendan -ese fue el primer comentario que escucho al entrar a la casa, había sido Dawon.

El tono de Dawon había sonado como chiste y Mark esperaba que así fuera... ¿No?

-En teoría estaba afuera de casa... -contestó Donghyuck con una sonrisa maliciosa en el rostro, su madre Dawon rodó los ojos al escuchar su respuesta.

-¡Cariño, esta Mark!, ¡no podemos quedar mal ante él tan rápido! -la regañó su pareja dandole un pequeño golpe en el hombro, si no estaba mal ella era Jinseol.

-Mamá Ji, no es como que tengamos que cuidar nuestra imagen demasiado cuando Mark esta con Donghyuck.

Oh... esa había sido muy buena, aunque trato de hacer todo lo posible para no reírse y hacerle entender a Jeno que estaba de su lado esta vez.

the Moon (문) to the truth | MarkhyuckDonde viven las historias. Descúbrelo ahora