And My eyes? [Minwon]

8

Ya había pasado el proceso de aceptación, solo faltaba que el acosador dejara de ser tan molesto y que dejara de insistir con hacerme comer sopa, sabiendo que yo solo quiero dormir.

—¿Tienes hambre?— asentí de inmediato, últimamente estaba comiendo mucho, el acosador asintió para después irse a la cocina, me dispuse a tratar de dormir, pero un ruido fuerte hizo que me sobresaltada, al parecer era una moto, me levanté con curiosidad mientras me asomaba por la ventana, un chico se estaba bajando de la moto y al parecer era el amante del acosador, justo cuando el se estaba quitando el casco, paso por mis pies una cucaracha.

La cosa es que, no pude ver el rostro de este ser, ¡Maldición! Me acerque a la puerta para intentar oir, pero era imposible, decidí abrír un poco la puerta pero igual no ví nada. Decidí salir, necesitaba ver a el amante del acosador, si o si.

Me dirigí a la cocina y resulta que no estaban, al parecer se habían encerrado en su cuarto, ¿Por que? Siendo sincero, no podía hacer mucho, así que me fui a encerrará tambien en mi cuarto, abrí mi ventana para poder escuchar en el momento que su amante saliera por esa puerta y yo lo pueda ver.

Sin embargo, me quedé dormido, muy dormido, al darme cuenta me dio sueño, desperté molesto, había perdido la oportunidad de ver al tipo solo por estar de flojo —¿Cómo está la cosa más preciosa de aquí?— suspiré fastidiado, primero: no soy una cosa, segundo: ¿Por qué no podría ser la cosa más preciosa de todo el mundo? No le encontraba sentido a sus palabras, lo fulmine con la mirada indignado.

Que le vaya a decir cosa preciosa a su amante, a mí que ni me hable —¿Y ahora por qué andas molesto?— lo ignore para después acostarme, por desgracia el hizo lo mismo, ¿Cuál era la necesidad de obligarme a estar bajo sus brazos? Ninguna.

—Responde— apretó más el abrazo, haciendo que me frustrara al no oler su perfume, sino el de otro.

—Tu amante se fue temprano—
—¿Por qué se hiria tarde?—

Lo volví a ignorar, no era necesario responder a sus estúpidas y molestas preguntas —Ya se, es porque te deje esperando, me imagino que debes de tener más hambre, déjame y te preparo algo— me beso la mejilla para después irse, ¿Ah? O sea que yo estaba molesto por ¿Eso? Siendo sincero, se me había olvidado que tenía hambre, pero ya volvio y es lo más importante.

Tiempo después volvió con la comida y por cosas del destino me frustre ya que el olor me daba náuseas —Come— negué rápido, sentía que iba a morir por el olor —¡No me digas! Después de que me hiciste cocinar, ya no quieres comer— no me sentía bien como para discutir con un idiota, así que me fui al baño y me senté en el piso ya que me sentía muy mareado. Que pecado estare pagando...

—Cariño ¿Estás bien?— negué rápido, de repente me empezó a abrazar mientras me acariciaba y se sentía tan bien, pero no podía permitirmelo.

Empecé a recordar el plan, me levanté saliendo del baño y rápidamente llegó el olor haciendo que las náuseas vuelvan, empecé a tambalear y de un momento a otro sentí como me tomaba de sus brazos.

No sabía si era porque estaba débil o ¿Por qué lo sentía tan fuerte? Me sentía tan confundido.

Desperté en la cama más suave que había tocado en mi vida, me voltee lentamente llevándome el gran susto de mi vida
—Despertaste— empezó a sonreír y me asuste haciendo que me volteara para mirar a la pared, se acercó a mi abrazándome con fuerza.

—¿Por qué andas así conmigo?— la verdad es que no entendí su pregunta, para nada.

—Andas muy distante ¿Ya no me amas?— ¡Dios! Este ser estaba cada vez más loco